Así fue la audiencia de Mancuso: Fiscalía y Corte Suprema recibirán declaraciones

Hoy, 17 de noviembre de 2023, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) tomó una decisión trascendental sobre el futuro del exjefe paramilitar, Salvatore Mancuso. Luego de escucharlo durante cuatro días de audiencia, contrastar sus declaraciones y revisar los documentos que entregó, esta justicia nacida del Acuerdo de Paz con las FARC definió que sí lo acepta como “bisagra” o punto de conexión entre las Autodefensas y miembros de la fuerza pública. Es decir, con el eslabón entre los paramilitares y altos mando militares de la época.

Así se desarrolló la audiencia:

La Jurisdicción Especial para la Paz explicó en su momento que Mancuso debía entregar novedosa sobre la guerra en Colombia, en especial sobre el papel que cumplieron los paramilitares en el país y como fue su financiación, para de esta manera aceptarlo como bisagra” o punto de conexión entre las Autodefensas y miembros de la fuerza pública.

Luego del proceso de contrastación, la JEP concluyó que Mancuso habló que el actuar paramilitar permitió que la Fuerza Pública aumentara sus resultados, operaciones y que de esta manera las estructuras paramilitares se apropiaran de los territorios que le interesaban. También, según la JEP, entregó información novedosa sobre la desaparición forzada que se desplegó en la zona fronteriza con Venezuela, donde dijo que al menos 200 cuerpos de personas que fueron desaparecidas a lo largo del conflicto armado en el país, fueron arrojados en territorio venezolano.

Concluyó además que Mancuso entregó verdad sobre la manera como los paramilitares influyeron en elecciones, como persiguieron sindicalistas y como se coordinaron para cometer varias masacres. Mancuso también entregó información sobre como en coordinación con el DAS cometieron masacres y como persiguieron a muchas personas.

Por todo lo anterior, la JEP decidió aceptarlo. En este sentido, explicó que luego de su aceptación tendrá que comparecer en los casos 03, que corresponde a los falsos positivos; caso 04, situación territorial del Uraba; caso 06, crímenes contra miembros de la UP; y caso 08, crímenes cometidos por la fuerza pública en asocio con los paramilitares. Sin embargo, la decisión no lo excluye de su participación ante la Jurisdicción de Justicia y Paz.

Por último, la JEP aclaró que con su ingreso a la JEP Mancuso deberá aportar en la búsqueda de personas dadas por desaparecidas, además de entregar más detalles sobre quienes se vieron beneficiados con el paramilitarismo. Además, la JEP compulsó copias a la Fiscalía, a la Corte Suprema de Justicia y a la Procuraduría, para que revisen las declaraciones del exjefe paramilitar.

Pasadas las 9:00 de la mañana inició la audiencia que definirá el futuro de Mancuso en la JEP. Minutos después, el exjefe paramilitar tomó la palabra desde Estados Unidos, donde se encuentra detenido, y dijo que aceptará la decisión que la JEP adopte en su contra. “Sea el resultado que sea lo acataré como siempre. Hemos llegado hasta el día con el deseo de que los compromisos de paz por el país se den”, dijo.

Acto seguido, la magistrada Heidi Patricia Baldoesa tomó la palabra y luego de una breve introducción anunció el levantamiento parcial de la reserva de la información que entregó el exjefe paramilitar en las audiencias del 10, 11, 15 y 16 de mayo de 2023. Sin embargo, continuará la reserva sobre la información que lo ponga en riesgo a él o a su familia, entre otras personas.

Dentro de estas diligencias reservadas, según reveló la JEP en apartes, Mancuso contó que, por ejemplo, que los paramilitares le dieron mensualmente a los Policías $200.000, a los cabos y sargentos $500.000 y a los oficiales $1.000.000 por cooperación. Dijo además que el general (r) Leonardo Barrero Gordillo, excomandate de las Fuerzas Militares, recibía entre 10 y 15 millones. La justicia especial explicó además que el exjefe paramilitar habló sobre la manera en la que fueron instrumentalizadas las Convivir para el fortalecimiento de los paramilitares, por lo cual se relacionó con las Fuerzas Militares, políticos y empresarios.

El exjefe paramilitar contó también que los transportadores de carbón pagaron mucho dinero para expulsar a la guerrilla de las zonas donde necesitaban transportar la mercancía. Dijo además que también tuvieron relaciones con varias carboneras del país, entre otros aportes.

Durante cuatro días de audiencia, Mancuso contestó el cuestionario de los magistrados de la JEP, quienes dividieron en cuatro grandes temas su declaración. Primero, las Convivir como fachada del accionar paramilitar. Segundo, las operaciones conjuntas entre paramilitares y fuerza pública. Tercero, las alianzas entre funcionarios, civiles, paramilitares y fuerza pública. Y cuarto, la filtración de información del DAS con fines contrainsurgentes. La gran mayoría de su relato se concentró en episodios que en el pasado ya había contado en otras instancias judiciales y que quedaron en expedientes de la Corte Suprema de Justicia y Justicia y Paz.

Sin embargo, también reveló datos de los que poco se ha hablado. Dijo, por ejemplo, que al menos 200 cuerpos de personas que fueron desaparecidas a lo largo del conflicto armado en el país, fueron arrojados en territorio venezolano. También dijo que políticos venezolanos le propusieron a las AUC un golpe de Estado a Hugo Chávez.

Reiteró también el supuesto papel del exvicepresidente Francisco Santos en la creación del Bloque Capital, declaración que el implicado negó, como lo ha hecho por años, argumentando que no existen pruebas en su contra. Siguiendo con los señalamientos a políticos, habló sobre cómo la familia Gnecco del Cesar y Jorge Bisbal Martelo, expresidente de Fedegán, habrían apoyado el paramilitarismo. Así como reafirmó lo dicho por él mismo en Justicia y Paz, en años anteriores, acerca de que las Autodefensas apoyaron las candidaturas presidenciales de Horacio Serpa, Andrés Pastrana, y Álvaro Uribe.

Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.

Hoy, 17 de noviembre de 2023, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) tomó una decisión trascendental sobre el futuro del exjefe paramilitar, Salvatore Mancuso. Luego de escucharlo durante cuatro días de audiencia, contrastar sus declaraciones y revisar los documentos que entregó, esta justicia nacida del Acuerdo de Paz con las FARC definió que sí lo acepta como “bisagra” o punto de conexión entre las Autodefensas y miembros de la fuerza pública. Es decir, con el eslabón entre los paramilitares y altos mando militares de la época.

Así se desarrolló la audiencia:

La Jurisdicción Especial para la Paz explicó en su momento que Mancuso debía entregar novedosa sobre la guerra en Colombia, en especial sobre el papel que cumplieron los paramilitares en el país y como fue su financiación, para de esta manera aceptarlo como bisagra” o punto de conexión entre las Autodefensas y miembros de la fuerza pública.

Luego del proceso de contrastación, la JEP concluyó que Mancuso habló que el actuar paramilitar permitió que la Fuerza Pública aumentara sus resultados, operaciones y que de esta manera las estructuras paramilitares se apropiaran de los territorios que le interesaban. También, según la JEP, entregó información novedosa sobre la desaparición forzada que se desplegó en la zona fronteriza con Venezuela, donde dijo que al menos 200 cuerpos de personas que fueron desaparecidas a lo largo del conflicto armado en el país, fueron arrojados en territorio venezolano.

Concluyó además que Mancuso entregó verdad sobre la manera como los paramilitares influyeron en elecciones, como persiguieron sindicalistas y como se coordinaron para cometer varias masacres. Mancuso también entregó información sobre como en coordinación con el DAS cometieron masacres y como persiguieron a muchas personas.

Por todo lo anterior, la JEP decidió aceptarlo. En este sentido, explicó que luego de su aceptación tendrá que comparecer en los casos 03, que corresponde a los falsos positivos; caso 04, situación territorial del Uraba; caso 06, crímenes contra miembros de la UP; y caso 08, crímenes cometidos por la fuerza pública en asocio con los paramilitares. Sin embargo, la decisión no lo excluye de su participación ante la Jurisdicción de Justicia y Paz.

Por último, la JEP aclaró que con su ingreso a la JEP Mancuso deberá aportar en la búsqueda de personas dadas por desaparecidas, además de entregar más detalles sobre quienes se vieron beneficiados con el paramilitarismo. Además, la JEP compulsó copias a la Fiscalía, a la Corte Suprema de Justicia y a la Procuraduría, para que revisen las declaraciones del exjefe paramilitar.

Pasadas las 9:00 de la mañana inició la audiencia que definirá el futuro de Mancuso en la JEP. Minutos después, el exjefe paramilitar tomó la palabra desde Estados Unidos, donde se encuentra detenido, y dijo que aceptará la decisión que la JEP adopte en su contra. “Sea el resultado que sea lo acataré como siempre. Hemos llegado hasta el día con el deseo de que los compromisos de paz por el país se den”, dijo.

Acto seguido, la magistrada Heidi Patricia Baldoesa tomó la palabra y luego de una breve introducción anunció el levantamiento parcial de la reserva de la información que entregó el exjefe paramilitar en las audiencias del 10, 11, 15 y 16 de mayo de 2023. Sin embargo, continuará la reserva sobre la información que lo ponga en riesgo a él o a su familia, entre otras personas.

Dentro de estas diligencias reservadas, según reveló la JEP en apartes, Mancuso contó que, por ejemplo, que los paramilitares le dieron mensualmente a los Policías $200.000, a los cabos y sargentos $500.000 y a los oficiales $1.000.000 por cooperación. Dijo además que el general (r) Leonardo Barrero Gordillo, excomandate de las Fuerzas Militares, recibía entre 10 y 15 millones. La justicia especial explicó además que el exjefe paramilitar habló sobre la manera en la que fueron instrumentalizadas las Convivir para el fortalecimiento de los paramilitares, por lo cual se relacionó con las Fuerzas Militares, políticos y empresarios.

El exjefe paramilitar contó también que los transportadores de carbón pagaron mucho dinero para expulsar a la guerrilla de las zonas donde necesitaban transportar la mercancía. Dijo además que también tuvieron relaciones con varias carboneras del país, entre otros aportes.

Durante cuatro días de audiencia, Mancuso contestó el cuestionario de los magistrados de la JEP, quienes dividieron en cuatro grandes temas su declaración. Primero, las Convivir como fachada del accionar paramilitar. Segundo, las operaciones conjuntas entre paramilitares y fuerza pública. Tercero, las alianzas entre funcionarios, civiles, paramilitares y fuerza pública. Y cuarto, la filtración de información del DAS con fines contrainsurgentes. La gran mayoría de su relato se concentró en episodios que en el pasado ya había contado en otras instancias judiciales y que quedaron en expedientes de la Corte Suprema de Justicia y Justicia y Paz.

Sin embargo, también reveló datos de los que poco se ha hablado. Dijo, por ejemplo, que al menos 200 cuerpos de personas que fueron desaparecidas a lo largo del conflicto armado en el país, fueron arrojados en territorio venezolano. También dijo que políticos venezolanos le propusieron a las AUC un golpe de Estado a Hugo Chávez.

Reiteró también el supuesto papel del exvicepresidente Francisco Santos en la creación del Bloque Capital, declaración que el implicado negó, como lo ha hecho por años, argumentando que no existen pruebas en su contra. Siguiendo con los señalamientos a políticos, habló sobre cómo la familia Gnecco del Cesar y Jorge Bisbal Martelo, expresidente de Fedegán, habrían apoyado el paramilitarismo. Así como reafirmó lo dicho por él mismo en Justicia y Paz, en años anteriores, acerca de que las Autodefensas apoyaron las candidaturas presidenciales de Horacio Serpa, Andrés Pastrana, y Álvaro Uribe.

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