“Este es el pan diario de los excombatientes”: reincorporada de Farc que sufrió atentado
La excombatiente de las Farc, Fanny Castellanos, fue víctima de un ataque sicarial mientras se movilizaba en el sur de Bogotá. Asegura que un grupo armado pretende asesinarla y que, a pesar de las intimidaciones, mantiene firme su posición en búsqueda de la paz.
El partido político Comunes, antes denominado FARC, denunció que la excombatiente Fanny Castellanos, integrante del proyecto de economías sociales de la agrupación de reincorporados, sufrió un ataque sicarial ayer 8 de febrero cuando se movilizaba en compañía de su esquema de seguridad en la localidad de Usme, al sur de Bogotá. Castellanos cuenta que ha sido blanco de múltiples amenazas, producto de su compromiso con los Acuerdos de Paz.
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“Fuimos interceptados por unos sujetos armados. Eso fue ayer a las 5:00 am. El objetivo era matarnos, no sabemos más. Ahora se procede con una investigación que esperemos dé resultados. Afortunadamente estamos con vida, pero la realidad es que nos iban a matar. Esa ha sido la orden que tienen estos grupos, de acabar con los reincorporados, de las personas que le apostamos a la paz”, explicó Fanny Castellanos en entrevista con El Espectador.
De acuerdo con la reincorporada, hay una organización armada que tiene como objetivo amedrentar y asesinar a los excombatientes de la extinta guerrilla de las Farc, quienes, en su concepto, podrían tener el mismo destino que los exintegrantes de la Unión Patriótica (UP): un partido político que nació tras un acuerdo de paz con las Farc en la década de los ochenta y que se desvaneció en el exterminio del que fue blanco durante años.
“En un momento de esos lo que uno piensa es que si han matado a más de 250 excombatientes, ¿qué más se puede esperar? Que uno es el próximo. Y si suena bala para todo lado pues es una terrible situación. Este es el pan diario de los excombatientes, los líderes sociales, de quienes le apostamos a la paz. Nos van a asesinar. Y si todos nos denunciamos y si todos nos decimos lo que está pasando pues vamos a terminar en las mismas condiciones que los partidos que han exterminado aquí en Colombia”, agregó Fanny Castellanos.
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La excombatiente de las Farc trabaja en la cooperativa Economías Sociales del Común (Ecomun), que es una agrupación de reincorporados de esa guerrilla que busca la reinserción integral de la “familia fariana” y las comunidades en los territorios más afectados por el conflicto armado. De acuerdo con el sitio oficial de Ecomun, allí se agremian más de 13.000 desmovilizados, quienes han sacado adelante más de 260 emprendimientos a nivel nacional.
“Continuamos en la lucha, en la búsqueda por la paz, por nuestro compromiso por la palabra que empeñamos en 2016 (con la firma del Acuerdo Final de Paz). Podrán asesinarnos, pero nunca acabarán con la voluntad de paz que tenemos. Vamos a continuar denunciando la masacre que tienen contra nuestro partido” concluyó Fanny Castellanos. De acuerdo con el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), a corte del 22 de enero de 2021, han sido asesinados 256 desmovilizados. Entre tanto, fuentes en el partido Comunes le confirmaron a este diario que uno de los escoltas de Castellanos fue herido en una de sus manos.
El partido político Comunes, antes denominado FARC, denunció que la excombatiente Fanny Castellanos, integrante del proyecto de economías sociales de la agrupación de reincorporados, sufrió un ataque sicarial ayer 8 de febrero cuando se movilizaba en compañía de su esquema de seguridad en la localidad de Usme, al sur de Bogotá. Castellanos cuenta que ha sido blanco de múltiples amenazas, producto de su compromiso con los Acuerdos de Paz.
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“Fuimos interceptados por unos sujetos armados. Eso fue ayer a las 5:00 am. El objetivo era matarnos, no sabemos más. Ahora se procede con una investigación que esperemos dé resultados. Afortunadamente estamos con vida, pero la realidad es que nos iban a matar. Esa ha sido la orden que tienen estos grupos, de acabar con los reincorporados, de las personas que le apostamos a la paz”, explicó Fanny Castellanos en entrevista con El Espectador.
De acuerdo con la reincorporada, hay una organización armada que tiene como objetivo amedrentar y asesinar a los excombatientes de la extinta guerrilla de las Farc, quienes, en su concepto, podrían tener el mismo destino que los exintegrantes de la Unión Patriótica (UP): un partido político que nació tras un acuerdo de paz con las Farc en la década de los ochenta y que se desvaneció en el exterminio del que fue blanco durante años.
“En un momento de esos lo que uno piensa es que si han matado a más de 250 excombatientes, ¿qué más se puede esperar? Que uno es el próximo. Y si suena bala para todo lado pues es una terrible situación. Este es el pan diario de los excombatientes, los líderes sociales, de quienes le apostamos a la paz. Nos van a asesinar. Y si todos nos denunciamos y si todos nos decimos lo que está pasando pues vamos a terminar en las mismas condiciones que los partidos que han exterminado aquí en Colombia”, agregó Fanny Castellanos.
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La excombatiente de las Farc trabaja en la cooperativa Economías Sociales del Común (Ecomun), que es una agrupación de reincorporados de esa guerrilla que busca la reinserción integral de la “familia fariana” y las comunidades en los territorios más afectados por el conflicto armado. De acuerdo con el sitio oficial de Ecomun, allí se agremian más de 13.000 desmovilizados, quienes han sacado adelante más de 260 emprendimientos a nivel nacional.
“Continuamos en la lucha, en la búsqueda por la paz, por nuestro compromiso por la palabra que empeñamos en 2016 (con la firma del Acuerdo Final de Paz). Podrán asesinarnos, pero nunca acabarán con la voluntad de paz que tenemos. Vamos a continuar denunciando la masacre que tienen contra nuestro partido” concluyó Fanny Castellanos. De acuerdo con el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), a corte del 22 de enero de 2021, han sido asesinados 256 desmovilizados. Entre tanto, fuentes en el partido Comunes le confirmaron a este diario que uno de los escoltas de Castellanos fue herido en una de sus manos.