La sargento segunda del Ejército Ghislaine Karina Ramírez y sus dos hijos fueron secuestrados por el Ejército de Liberación Nacional (ELN) el pasado 3 de julio en la vía que conduce al municipio de Fortul (Arauca) y dejados en libertad el viernes 7 del mismo mes. Ahora, se conocen más detalles de la retención de la que fueron víctimas la uniformada y los dos menores de edad: fuentes cercanas a la investigación le compartieron a El Espectador las identidades de las personas que estarían detrás de la retención en contra de la militar y su familia.
Jorge Enrique Salazar Ramírez, alias Emiliano; y alias Cabras, serían los hombres responsables del secuestro contra la sargento Ramírez y sus dos hijos la semana pasada. Según la información obtenida por este diario, los dos guerrilleros son líderes de distintas comisiones del grupo armado, encargadas de secuestros extorsivos.
Alias Emiliano:
De acuerdo con la información obtenida, Jorge Enrique Salazar Ramírez es el actual líder de la comisión Martha Helena Barón y se encargaría de dirigir las extorsiones allí. Este hombre es oriundo de Bochalema (Norte de Santander) y hace parte de Guerra Oriental “Domingo Laín Sáenz”.
Alias Emiliano sería responsable también de extorsión a transportadores en las veredas: Betoyes, El Botalón, Puente Tabla, Puerto Miranda, Alto Cauca, Pueblo Seco, entre otros, del municipio de Tame (Arauca).
Alias Cabras:
Esta persona, según los datos obtenidos, lidera la comisión Omaira Montoya Henao, según las fuentes consultadas por este diario. Asimismo, este hombre fue uno de los que entregó a la Defensoría a la sargento Ramírez y a sus dos hijos, y aparece en uno de los videos compartidos por la entidad.
Una misión humanitaria de la Defensoría del Pueblo y la Iglesia Católica permitió el regreso a la libertad de la sargento del Ejército, Ghislaine Karina Ramírez, y sus dos hijos, menores de edad, quienes estaban en poder del Ejército de Liberación Nacional (ELN), en Arauca. 1/3 pic.twitter.com/A0zRr4I3M4
— Defensoría del Pueblo (@DefensoriaCol) July 7, 2023
La liberación de la sargento Ramírez y sus hijos estuvo acompañada por una comisión de la Defensoría y la Iglesia Católica. Tras recuperar su libertad, la uniformada y sus dos hijos fueron trasladados a Bogotá y desde la base militar de Catam. Según el Ejército, desde allí fueron llevados al Hospital Militar, donde se les realizaron los exámenes médicos de rutina, para establecer su estado de salud.
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