Excomandantes de las extintas Farc reconocieron crímenes en Cauca y Valle
A través de un aporte temprano a la verdad, varios miembros de las estructuras de las extintas Farc que hacían presencia en el norte del Cauca y el sur del Valle del Cauca reconocieron ante la JEP su responsabilidad en varios crímenes que cometieron contra la población civil de la zona.
Homicidios, desplazamientos, reclutamientos y desapariciones forzadas, cometidos contra las comunidades indígenas, afrodescendientes y campesinas, reconocieron varios excomandantes de las extintas Farc ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). Los excombatientes aceptaron, en un aporte temprano a la verdad, haber participado en acciones criminales que tuvieron lugar en el norte del Cauca y el sur del Valle del Cauca.
En contexto: Excombatientes de las Farc también deberán presentarse a la JEP por caso del norte del Cauca
En el marco del macrocaso 05, que investiga los hechos cometidos en esta región, los antiguos miembros de la extinta guerrilla han venido entregando sus aportes a la verdad desde octubre de 2021 hasta el pasado 16 de septiembre de 2022 en cuatro actos que contaron con la presencia de las víctimas. El primero de los aportes lo entregaron excombatientes de la Columna Móvil Gabriel Galvis durante un acto en Cali. En la diligencia, que contó con la participación de las víctimas de la región, los exguerrilleros reconocieron su responsabilidad en la comisión de actos criminales y afectaciones contra indígenas y afrodescendientes.
Este caso de la JEP, que actualmente cuenta con 180.000 víctimas acreditadas, investiga las violaciones a los derechos humanos cometidas en el marco del conflicto armado. El caso 05 también pone en la mira las afectaciones especiales que sufrieron las comunidades indígenas y afrodescendientes que tienen especial vulnerabilidad en este territorio. Junto a los macrocasos de Urabá y Tumaco, Barbacoas y Ricaurte en Nariño, el macrocaso 05 es uno de los tres casos territoriales que investiga la Sala de Reconocimiento de Verdad.
Lea aquí: Las claves del nuevo caso que abrió la JEP para investigar 72 mil hechos violentos
Durante el segundo aporte temprano a la verdad, excombatientes de la Columna Móvil Jacobo Arenas aceptaron su participación en varios hechos criminales en el norte del Cauca. “Fuimos responsables del silenciamiento de vidas indígenas, de personas clave para la organización y la lucha de las comunidades indígenas (...) Queremos reconocer que afectamos las poblaciones afrocolombianas y las comunidades negras en el Cauca. La Columna Móvil Jacobo Arenas contribuyó a las afectaciones en las vidas y bienes de esta población”, afirmaron en un acto que contó con la presencia de las víctimas.
En un tercer momento, en un acto restaurativo con las víctimas del Cauca, excombatientes del Frente VI aceptaron los crímenes cometidos contra la población, incluyendo el reclutamiento de menores y desapariciones forzadas. “Reconocemos nuestra responsabilidad en las afectaciones a las comunidades indígenas de los municipios en los que hicimos presencia, con nuestra presencia alteramos su proyecto de vida y territorio, y afectamos el desarrollo de sus prácticas, según su cosmovisión”, aseguraron los exguerrilleros.
Lea también: JEP le niega definitivamente la entrada a José Miguel Narváez por crimen de Garzón
Durante esta diligencia, los excombatientes también reconocieron su responsabilidad en afectaciones a las personas afro. “Reconocemos nuestra responsabilidad en las afectaciones a las comunidades afrocolombianas de los municipios en que hicimos presencia, si bien nuestra área de operación constante fue la parte alta de los municipios donde no se encontraban comunidades negras, en la parte plana donde la mayoría de la población es afro, también se realizaron acciones de orden militar, en especial, hostigamientos a la fuerza pública, el uso de artefactos explosivos y acciones de control territorial dentro de la confrontación política armada”, aseguraron los exfarc.
El pasado 16 de septiembre de 2022 tuvo lugar el último de los actos restaurativos por parte de los exguerrilleros. Allí, excombatientes de la Columna Móvil Miller Perdomo aceptaron su participación en el reclutamiento de menores, homicidios, desplazamientos y otros crímenes contra las víctimas de la región. Finalmente, los ex-Farc reconocieron especialmente su participación en victimizaciones contra las comunidades afrodescendientes e indígenas, aceptando su presencia y actuar criminal en las zonas donde viven estas comunidades.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.
Homicidios, desplazamientos, reclutamientos y desapariciones forzadas, cometidos contra las comunidades indígenas, afrodescendientes y campesinas, reconocieron varios excomandantes de las extintas Farc ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). Los excombatientes aceptaron, en un aporte temprano a la verdad, haber participado en acciones criminales que tuvieron lugar en el norte del Cauca y el sur del Valle del Cauca.
En contexto: Excombatientes de las Farc también deberán presentarse a la JEP por caso del norte del Cauca
En el marco del macrocaso 05, que investiga los hechos cometidos en esta región, los antiguos miembros de la extinta guerrilla han venido entregando sus aportes a la verdad desde octubre de 2021 hasta el pasado 16 de septiembre de 2022 en cuatro actos que contaron con la presencia de las víctimas. El primero de los aportes lo entregaron excombatientes de la Columna Móvil Gabriel Galvis durante un acto en Cali. En la diligencia, que contó con la participación de las víctimas de la región, los exguerrilleros reconocieron su responsabilidad en la comisión de actos criminales y afectaciones contra indígenas y afrodescendientes.
Este caso de la JEP, que actualmente cuenta con 180.000 víctimas acreditadas, investiga las violaciones a los derechos humanos cometidas en el marco del conflicto armado. El caso 05 también pone en la mira las afectaciones especiales que sufrieron las comunidades indígenas y afrodescendientes que tienen especial vulnerabilidad en este territorio. Junto a los macrocasos de Urabá y Tumaco, Barbacoas y Ricaurte en Nariño, el macrocaso 05 es uno de los tres casos territoriales que investiga la Sala de Reconocimiento de Verdad.
Lea aquí: Las claves del nuevo caso que abrió la JEP para investigar 72 mil hechos violentos
Durante el segundo aporte temprano a la verdad, excombatientes de la Columna Móvil Jacobo Arenas aceptaron su participación en varios hechos criminales en el norte del Cauca. “Fuimos responsables del silenciamiento de vidas indígenas, de personas clave para la organización y la lucha de las comunidades indígenas (...) Queremos reconocer que afectamos las poblaciones afrocolombianas y las comunidades negras en el Cauca. La Columna Móvil Jacobo Arenas contribuyó a las afectaciones en las vidas y bienes de esta población”, afirmaron en un acto que contó con la presencia de las víctimas.
En un tercer momento, en un acto restaurativo con las víctimas del Cauca, excombatientes del Frente VI aceptaron los crímenes cometidos contra la población, incluyendo el reclutamiento de menores y desapariciones forzadas. “Reconocemos nuestra responsabilidad en las afectaciones a las comunidades indígenas de los municipios en los que hicimos presencia, con nuestra presencia alteramos su proyecto de vida y territorio, y afectamos el desarrollo de sus prácticas, según su cosmovisión”, aseguraron los exguerrilleros.
Lea también: JEP le niega definitivamente la entrada a José Miguel Narváez por crimen de Garzón
Durante esta diligencia, los excombatientes también reconocieron su responsabilidad en afectaciones a las personas afro. “Reconocemos nuestra responsabilidad en las afectaciones a las comunidades afrocolombianas de los municipios en que hicimos presencia, si bien nuestra área de operación constante fue la parte alta de los municipios donde no se encontraban comunidades negras, en la parte plana donde la mayoría de la población es afro, también se realizaron acciones de orden militar, en especial, hostigamientos a la fuerza pública, el uso de artefactos explosivos y acciones de control territorial dentro de la confrontación política armada”, aseguraron los exfarc.
El pasado 16 de septiembre de 2022 tuvo lugar el último de los actos restaurativos por parte de los exguerrilleros. Allí, excombatientes de la Columna Móvil Miller Perdomo aceptaron su participación en el reclutamiento de menores, homicidios, desplazamientos y otros crímenes contra las víctimas de la región. Finalmente, los ex-Farc reconocieron especialmente su participación en victimizaciones contra las comunidades afrodescendientes e indígenas, aceptando su presencia y actuar criminal en las zonas donde viven estas comunidades.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.