Exfarc que participaron en el secuestro de diputados del Valle aceptaron imputación
La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) les imputó cargos a ocho exmiembros del Bloque Oriental por 60 hechos cometidos entre 1993 y 2016. A través de una carta, reconocieron “los profundos daños que nuestras acciones provocaron en la vida personal, familiar y comunitaria de las víctimas de los secuestros que cometimos”.
Ocho exmiembros del Bloque Oriental de las Farc aceptaron los hechos que les imputó la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) por el secuestro de los 12 diputados del Valle, ocurrido el 11 de abril de 2002, y el posterior asesinato de 11 de ellos, el 28 de junio de 2007. Así se lo hicieron saber a ese tribunal de paz a través de una carta en la que reconocieron “los profundos daños que nuestras acciones provocaron en la vida personal, familiar y comunitaria de las víctimas de los secuestros que cometimos”.
Los exguerrilleros aceptaron su participación en los cargos imputados por la JEP: crímenes de guerra de toma de rehenes, homicidio, atentados a la dignidad personal, violación sexual, tortura, tratos crueles e inhumanos y los crímenes de lesa humanidad de otras privaciones graves de la libertad, tortura, asesinato, desaparición forzada, violación sexual, y otros actos inhumanos.
Entre los llamados por la justicia transicional están: alias Pacho Chino, el Grillo, Pacho Quinto y Sargento Pascuas. En la imputación, que se conoció en diciembre pasado, la JEP explicó que durante el secuestro, los diputados fueron sometidos a malos tratos y a una violación permanente de su dignidad humana. “A las condiciones materiales extremas se sumaron los malos tratos entre los cuales se documentó como frecuentes: el aislamiento, las marchas forzadas, la insuficiencia de recursos materiales para la supervivencia, las cadenas y amarres, los castigos, los gritos, amenazas, humillaciones y simulaciones de fusilamiento”, señaló.
Además, la jurisdicción especial explicó que la violación a su dignidad humana se evidenció también “en la ausencia de sanciones para quienes transgredieran la integridad de las personas en cautiverio. A esto se sumó la precariedad de los lineamientos para la capacitación y supervisión de la tropa que vigilaba a los cautivos”. Ahora, los exFarc tendrán que realizar un acto de reconocimiento ante las víctimas para que, posteriormente, la JEP ordene las medidas de sanción que puedan aplicarse a este caso.
Los hechos que ahora reconocen los ocho exmiembros del Bloque Oriental ocurrieron en abril de 2002, cuando fueron secuestrados los 12 diputados del Valle, como una estrategia de la guerrilla para presionar al Gobierno de Álvaro Uribe a intercambiar militares, civiles y políticos secuestrados, por guerrilleros presos. : Rufino Varela, Carlos Barragán, Jairo Javier Hoyos Salcedo, Alberto Quintero Herrera, Juan Carlos Narváez, Edinson Pérez, Nacianceno Orozco, Carlos Charry, Francisco Giraldo, Ramiro Echeverry, Héctor Arismendy y Sigifredo López. El único que sobrevivió fue este último.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.
Ocho exmiembros del Bloque Oriental de las Farc aceptaron los hechos que les imputó la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) por el secuestro de los 12 diputados del Valle, ocurrido el 11 de abril de 2002, y el posterior asesinato de 11 de ellos, el 28 de junio de 2007. Así se lo hicieron saber a ese tribunal de paz a través de una carta en la que reconocieron “los profundos daños que nuestras acciones provocaron en la vida personal, familiar y comunitaria de las víctimas de los secuestros que cometimos”.
Los exguerrilleros aceptaron su participación en los cargos imputados por la JEP: crímenes de guerra de toma de rehenes, homicidio, atentados a la dignidad personal, violación sexual, tortura, tratos crueles e inhumanos y los crímenes de lesa humanidad de otras privaciones graves de la libertad, tortura, asesinato, desaparición forzada, violación sexual, y otros actos inhumanos.
Entre los llamados por la justicia transicional están: alias Pacho Chino, el Grillo, Pacho Quinto y Sargento Pascuas. En la imputación, que se conoció en diciembre pasado, la JEP explicó que durante el secuestro, los diputados fueron sometidos a malos tratos y a una violación permanente de su dignidad humana. “A las condiciones materiales extremas se sumaron los malos tratos entre los cuales se documentó como frecuentes: el aislamiento, las marchas forzadas, la insuficiencia de recursos materiales para la supervivencia, las cadenas y amarres, los castigos, los gritos, amenazas, humillaciones y simulaciones de fusilamiento”, señaló.
Además, la jurisdicción especial explicó que la violación a su dignidad humana se evidenció también “en la ausencia de sanciones para quienes transgredieran la integridad de las personas en cautiverio. A esto se sumó la precariedad de los lineamientos para la capacitación y supervisión de la tropa que vigilaba a los cautivos”. Ahora, los exFarc tendrán que realizar un acto de reconocimiento ante las víctimas para que, posteriormente, la JEP ordene las medidas de sanción que puedan aplicarse a este caso.
Los hechos que ahora reconocen los ocho exmiembros del Bloque Oriental ocurrieron en abril de 2002, cuando fueron secuestrados los 12 diputados del Valle, como una estrategia de la guerrilla para presionar al Gobierno de Álvaro Uribe a intercambiar militares, civiles y políticos secuestrados, por guerrilleros presos. : Rufino Varela, Carlos Barragán, Jairo Javier Hoyos Salcedo, Alberto Quintero Herrera, Juan Carlos Narváez, Edinson Pérez, Nacianceno Orozco, Carlos Charry, Francisco Giraldo, Ramiro Echeverry, Héctor Arismendy y Sigifredo López. El único que sobrevivió fue este último.
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