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A pocos días que inicie la vacancia judicial, el periodo de vacaciones colectivas de la Rama Judicial desde el 20 de diciembre al 13 de enero de 2020, la Corte Suprema acaba de tomar una última gran decisión. La Sala Penal de las altas cortes acaba de condenar al exmagistrado de la Corte Constitucional, Jorge Pretelt Chaljub, a 6 años y 6 meses de prisión. El antiguo miembro del alto tribunal fue enjuiciado por supuestamente haber pedido $500 millones para incidir en una tutela de empresa Fidupetrol. En abril de 2018, su juicio finalizó y estaba a la espera de que la Corte Suprema diera su veredicto final.
La Sala Especial de Primera Instancia tomó la determinación ynegó la posibilidad de darle la casa por cárcel al exmagistrado. No obstante, no ordenó su captura porque la defensa de Pretelt puede apelar la decisión. El abogado de Pretelt, Abelardo de la Espriella, anunció que lo hará a través de sus redes sociales. "Seguro de lo inocencia de mi cliente, tengo confianza de que la administración de justicia podrá hacer una valoración serena y ponderada del acervo probatorio que obra en el expediente y que confirma que el doctor Pretelt Chaljub no cometió el delito que le fue imputado", dijo el jurista.
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Jorge Pretelt, quien se convirtió en el primer magistrado de una alta corte en ser llamado a juicio, fue señalado de haber pedido dinero para direccionar el avance de una tutela con la que Fidupetrol buscaba tumbar una multa de $22.500 millones impuesta por la Corte Suprema por haber usado mal las regalías de Casanare. El inédito proceso inició por una denuncia que interpuso uno de sus compañeros, el magistrado Mauricio González, ante la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes.
En el juicio contra Pretelt, que inició en octubre de 2017, fue acusado por el delito de concusión y el principal testigo en su contra fue Víctor Pacheco. Se trata del abogado de Fidupetrol, quien la contó a las autoridades que en una visita al apartamento de Pretelt el día 18 de octubre de 2013, Pretelt le pidió los $500 millones. Pretelt en cambio negó rotundamente que esa reunión haya sucedido e insistió haber sido víctima de un complot en su contra orquestado supuestamente por la Fiscalía, el Gobierno y algunos de sus excompañeros en el alto tribunal.
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La Procuraduría General durante el juicio dijo que Pretelt es culpable. El entonces procurador delegado, Jorge Caldas, hoy miembro de la Sala Especial de Primera Instancia de la Corte Suprema, le pidió ese alto tribunal condenarlo al considerar que hay suficientes pruebas que permitían concluir que Pretelt sí hizo la petición de dinero. A su juicio, Pretelt utilizó su condición de magistrado de la Corte Constitucional para sacar un provecho económico del trámite de la tutela.
Pretelt por su parte siempre insistió en su inocencia. En su defensa, el exmagistrado negó haber hablado con los magistrados que participaron en la selección de la tutela, ni con Mauricio González, a quien le correspondió el estudio de la misma. Igualmente, negó con vehemencia que haya hecho la petición de dinero. Además, Pretelt insistió que en su caso hubo presiones del Ejecutivo.
(En contexto: Senado suspendió del cargo a Pretelt y lo dejó en manos de la Corte Suprema)
“La Cámara de Representantes y el Senado de la República fueron llevados a tomar decisiones políticas y no jurídicas. Algunos magistrados de la Corte Constitucional cedieron a las presiones del Ejecutivo y desfilaron al Palacio de Nariño a recibir instrucciones oscuras, hechos repudiables a la luz de la democracia y la justicia. Todo este proceso fue motivado por mi forma de pensar, por convertirme en un magistrado incómodo, porque me opuse a la impunidad sin barreras, concedida por el Gobierno Nacional en los Acuerdos de La Habana”, señaló al finalizar el juicio.