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La Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) ha expresado su rechazo ante los ataques digitales sufridos por la periodista indígena Sandra Chindoy, presentadora de noticias y del programa “La voz del Territorio” en RTVC. Desde el pasado 24 de septiembre, Chindoy ha recibido más de cien mensajes a través de su cuenta en la red social X, en los que se le ha insultado y atacado con comentarios racistas, misóginos y estigmatizantes que afectan tanto su trabajo periodístico como su identidad y apariencia física.
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Estos ataques no solo representan una amenaza para su seguridad, obligando a Chindoy a tomar medidas preventivas en sus desplazamientos, sino que también han afectado su libertad personal, al punto de que ha optado por ocultar su indumentaria característica para evitar ser reconocida en público. La FLIP subrayó la gravedad de las agresiones que enfrentan las mujeres periodistas y el impacto que tienen en su labor, especialmente en redes sociales, donde el proyecto Social Media 4 Peace de la UNESCO ha identificado un aumento en conductas machistas, sexistas y racistas.
Estos ataques representan una grave amenaza para la vida e integridad de la comunicadora, quien se ha visto forzada a tomar medidas preventivas que han afectado su trabajo. Además, Chindoy se ha quitado su indumentaria característica para evitar ser reconocida, lo que afecta su…
— Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) (@FLIP_org) October 4, 2024
En lo que va de 2024, la FLIP ha registrado 16 casos de estigmatización y acoso en línea contra mujeres periodistas. Además, la Corte Constitucional, en su sentencia T-087 de 2023, advirtió que los ataques sexistas en internet pueden desencadenar violencias adicionales, como amenazas físicas, afectando tanto la vida profesional como personal de las comunicadoras.
El origen de estos ataques contra Chindoy se remonta a un comentario publicado por el concejal Daniel Briceño en la red social X, en el que acusó a la periodista de “desinformar” en su labor en RTVC. La FLIP hizo un llamado al concejal Briceño a utilizar vías constitucionales, como la solicitud de rectificación, para expresar sus preocupaciones en lugar de emitir mensajes públicos estigmatizantes. Esta es la cuarta vez en el año que Briceño realiza declaraciones despectivas contra la prensa, según la FLIP, que ha solicitado la intervención de la Personería y la Procuraduría para investigar sus actos.
La FLIP advirtió que los comentarios despectivos, sexistas o racistas no solo buscan desprestigiar el trabajo periodístico, sino que también aumentan la vulnerabilidad de quienes ejercen la profesión, especialmente en contextos de alta polarización. Asimismo, subrayó que los funcionarios públicos deben ser responsables y evitar emitir mensajes que puedan poner en riesgo la seguridad y reputación de los periodistas.
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