Fue capturado en Turbo alias García, uno de los líderes del Clan del Golfo
Por la muerte de uno de sus gallos más preciados en una pelea, alias García en represalia habría desterrado a un subalterno de su organización criminal, quien luego brindó información clave para dar con el paradero del narcotraficante.
La Policía capturó a Luis Alberto Furnieles Garces, alias García, uno de los líderes de Clan del Golfo. Ante la presencia de las autoridades, el hombre se escondió debajo de la cama en una casa de ladrillo del corregimiento El Tres, en zona rural del municipio de Turbo (Antioquia). Según las autoridades, una pelea de gallos fue clave para dar con la captura del narcotraficante, que operó por 10 años en los departamentos de Magdalena, Cesar y La Guajira.
Luego de la muerte del gallo de pelea más preciado por alias García, este habría desterrado a un subalterno, y sus hombres más cercanos, por haberlo retado a esta riña, en las que el narco apostaba grandes cantidades de dinero en efectivo, joyas, e inclusive casas y fincas, “a sabiendas de que siempre ganaba o lo dejaban ganar”. Según las autoridades, este contrincante aportó “información clave para dar con el paradero del hombre que había llegado a la Sierra Nevada de Santa Marta a librar una guerra a muerte contra ‘Los Pachenca’ y el ELN, por el control de rutas del narcotráfico en el Caribe colombiano”.
Entre las pruebas de los delitos cometidos por alias García, se encuentran chats detallando el plan con el que pretendía consolidar el bloque ‘Nelson Darío Hurtado Simanca’ en la Costa Caribe colombiana. Este bloque tendría como misión tomar el control de rutas de tráfico de estupefacientes desde los puertos de comercio exterior, contaminando contenedores y utilizando lanchas rápidas para el contrabando.
También, alias García, quien supuestamente habría pagado $50 millones a una bruja por rezarlo y mantenerlo alejado de las autoridades, tenía orden del tercer líder del Clan de Golfo, Rodrigo Flechas, de trasladar personal, incluidos menores de edad víctimas de reclutamiento forzoso, desde el Urabá chocoano y antioqueño hacia el Magdalena. Luis Alberto Furnieles, según la Policía, “utilizaba tres sistemas de mensajería encriptada para mantener en secreto sus comunicaciones, también pretendía trasladar personal con entrenamiento especial para conformar un cuerpo élite, tal como lo revela uno de los chats en poder de los investigadores”.
La captura de García, de acuerdo con las autoridades, habría presentado dificultades, ya que el narcotraficante se mantenía casi siempre en la Sierra Nevada, y al momento de salir “realizaba los desplazamientos en horas de la noche, utilizando una red de automóviles de bajo perfil, conducidos por colaboradores de la organización, quienes lo transportaban en movimientos pendulares entre inmuebles seguros” localizados en Magdalena, Atlántico, Bolívar, Sucre, Córdoba y Antioquia.
“Fue una operación limpia, la cual hace parte de la ofensiva frontal contra la criminalidad ordenada por el señor Presidente de la República, en este caso contra el ‘Clan del Golfo’”, señaló el general William René Salamanca, director de la Policía Nacional, sobre la captura del narcotraficante, Luis Alberto Furnieles, que lideraba en La Guajira, Magdalena y Cesar, enfrentamientos armados contra la fuerza pública con el fin de facilitar el cultivo, producción, tráfico y distribución de estupefacientes hacia mercados ilícitos internacionales en Estados Unidos y Europa.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.
La Policía capturó a Luis Alberto Furnieles Garces, alias García, uno de los líderes de Clan del Golfo. Ante la presencia de las autoridades, el hombre se escondió debajo de la cama en una casa de ladrillo del corregimiento El Tres, en zona rural del municipio de Turbo (Antioquia). Según las autoridades, una pelea de gallos fue clave para dar con la captura del narcotraficante, que operó por 10 años en los departamentos de Magdalena, Cesar y La Guajira.
Luego de la muerte del gallo de pelea más preciado por alias García, este habría desterrado a un subalterno, y sus hombres más cercanos, por haberlo retado a esta riña, en las que el narco apostaba grandes cantidades de dinero en efectivo, joyas, e inclusive casas y fincas, “a sabiendas de que siempre ganaba o lo dejaban ganar”. Según las autoridades, este contrincante aportó “información clave para dar con el paradero del hombre que había llegado a la Sierra Nevada de Santa Marta a librar una guerra a muerte contra ‘Los Pachenca’ y el ELN, por el control de rutas del narcotráfico en el Caribe colombiano”.
Entre las pruebas de los delitos cometidos por alias García, se encuentran chats detallando el plan con el que pretendía consolidar el bloque ‘Nelson Darío Hurtado Simanca’ en la Costa Caribe colombiana. Este bloque tendría como misión tomar el control de rutas de tráfico de estupefacientes desde los puertos de comercio exterior, contaminando contenedores y utilizando lanchas rápidas para el contrabando.
También, alias García, quien supuestamente habría pagado $50 millones a una bruja por rezarlo y mantenerlo alejado de las autoridades, tenía orden del tercer líder del Clan de Golfo, Rodrigo Flechas, de trasladar personal, incluidos menores de edad víctimas de reclutamiento forzoso, desde el Urabá chocoano y antioqueño hacia el Magdalena. Luis Alberto Furnieles, según la Policía, “utilizaba tres sistemas de mensajería encriptada para mantener en secreto sus comunicaciones, también pretendía trasladar personal con entrenamiento especial para conformar un cuerpo élite, tal como lo revela uno de los chats en poder de los investigadores”.
La captura de García, de acuerdo con las autoridades, habría presentado dificultades, ya que el narcotraficante se mantenía casi siempre en la Sierra Nevada, y al momento de salir “realizaba los desplazamientos en horas de la noche, utilizando una red de automóviles de bajo perfil, conducidos por colaboradores de la organización, quienes lo transportaban en movimientos pendulares entre inmuebles seguros” localizados en Magdalena, Atlántico, Bolívar, Sucre, Córdoba y Antioquia.
“Fue una operación limpia, la cual hace parte de la ofensiva frontal contra la criminalidad ordenada por el señor Presidente de la República, en este caso contra el ‘Clan del Golfo’”, señaló el general William René Salamanca, director de la Policía Nacional, sobre la captura del narcotraficante, Luis Alberto Furnieles, que lideraba en La Guajira, Magdalena y Cesar, enfrentamientos armados contra la fuerza pública con el fin de facilitar el cultivo, producción, tráfico y distribución de estupefacientes hacia mercados ilícitos internacionales en Estados Unidos y Europa.
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