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Este viernes un juez con función de garantías ordenó incautar el vehículo de alta gama, marca Porsche, del exgobernador de Santander y coronel (r) de la Policía Hugo Heliodoro Aguilar. Al parecer, Aguilar simuló la venta del lujoso vehículo para que no se le fuera incautado. El escándalo inició cuando la periodista de Vanguardia Liberal, Diana Saray, revelara una foto en la que se veía a Aguilar conduciendo un vehículo de alta gama (convertible marca Porsche) avaluado en más de $350 millones.
Tal fotografía cobró relevancia cuando se supo que al exgobernador se le había impuesto una multa de 10.750 salarios mínimos (más de $6.300 millones al momento del fallo). Sin embargo, el coronel (r) de la Policía señaló que sólo podía pagar $500.000 mensuales porque no tenía recursos para cancelar su deuda.
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Ante las críticas y cuestionamientos que desató la imagen, el coronel que alguna vez se ganó la admiración de los colombianos por capturar a Pablo Escobar, aceptó a los periodistas del periódico El Frente de Bucaramanga que efectivamente en 2015 compró el vehículo pero que se había visto “en aprietos para pagar los honorarios de abogados y lo vendí en el año 2016 a un ingeniero que tiene una empresa de Seguros, que vende vehículos”.
Sin embargo, los escándalos no pararon para el reconocido exmiembro de la Policía. En febrero de este año, Aguilar fue capturado por agentes del CTI en el Aeropuerto de Bucaramanga. Igualmente, su exesposa, Mónica María Barrera Carreño; su exsuegra, Socorro Carreño Miranda, y un presunto testaferro identificado como Yeison Albeiro Sáenz Plazas también fueron capturados en ese momento.
La investigación tiene origen en una compulsa de copias que hizo la Unidad de Justicia y Paz a la Dirección Especializada Contra el Lavado de Activos, de la Fiscalía, por los bienes de personas condenadas por parapolítica. La Fiscalía, en su intervención, señaló que en la década de los 2000 este fenómeno se asentó en Santander y fue protagonizado por el Bloque Central Bolívar y el Partido Convergencia Ciudadana para las elecciones parlamentarias de 2002 y autoridades locales un año más tarde.
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Tras las indagaciones de las autoridades, se encontraron cinco bienes de Aguilar adquiridos entre 2008 y 2010 pero estos registran a nombre de su exesposa. En la misma pesquisa, a Mónica María Barrera Carreño le encontraron cinco bienes, entre 2011 y 2016 y, uno de ellos, dijo el fiscal delegado, fue traspasado a una persona identificada como Luis Eduardo Castillo Pérez. También encontraron la existencia de tres vehículos gama alta: un Porsche, un Mercedes Benz y un Toyota. La Fiscalía también extendió sus investigaciones al grupo familiar y, a su exsuegra, Socorro Carreño Miranda, se le encontró el predio rural El Rubí, en Socorro (Santander).
La supuesta falta de argumentación de la Fiscalía hizo que el juez 74 con función de garantías dejara en libertad al exgobernador, a su exesposa, Mónica María Barrera; su exsuegra, Socorro Carreño; y su supuesto testaferro, Yeison Sáenz. “Si la investigación se hubiera hecho un poquito más exhaustiva, posiblemente la Fiscalía hubiera llegado con más certeza sin vacilar (…) dando golpes certeros en los que se puede demostrar de dónde se obtuvo el dinero”, aseguró el juez.