JEP acepta sometimiento de exagente del DAS, clave en falsos positivos en Tolima
Se trata de Giovanny Calderón Salazar, conocido por muchos como el “cerebro” de las ejecuciones extrajudiciales en el Tolima. Ya fue condenado y tiene otros nueve procesos. La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) ya había rechazado su sometimiento por considerar insuficiente su aporte de verdad.
La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) aceptó el sometimiento del exagente del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), Giovanny Calderón Salazar, conocido como el “cerebro” de ejecuciones extrajudiciales en el Tolima. La decisión de esta instancia transicional se conoce luego de que la propia JEP rechazara su entrada al sistema especial de paz por considerar insuficiente su aporte a la verdad.
Según el prontuario de Calderón Salazar, ya fue condenado por dos falsos positivos ocurridos en Tigrera (Alvarado, Tolima), pero en su contra hay por lo menos nueve expedientes similares. El caso por el que fue declarado culpable ocurrió el 12 de enero de 2007, en esa vereda tolimense, cuando miembros del Ejército y Calderón Salazar simularon una operación antiextorsión en la que asesinaron a Marco Antonio Quiroga y Álvaro Enrique Rodríguez Buitrago.
“La Sala de Definición de Situaciones Jurídicas aceptó el sometimiento a la JEP del exagente del extinto DAS, Giovanny Calderón Salazar, como miembro de ‘facto’ de la fuerza pública. Es decir, el exagente del extinto DAS debía demostrar que había fungido como un sujeto que formalmente no hacía parte de las fuerzas militares, pero, en la práctica, sí, según el nivel de participación que tuvo en las operaciones llevadas a cabo con unidades militares”, explicó la jurisdicción especial.
La decisión de aceptar a Calderón Salazar en la JEP la tomó el magistrado José Miller Hormiga Sánchez, luego de contrastar los aportes del exagente y expedientes judiciales. Según la jurisdicción, son 10 hechos con 17 víctimas en los que el procesado podría aportar verdad. Los crímenes fueron cometidos entre el 5 de junio de 2006 y el 21 de mayo de 2008, cuando Calderón fungía como detective del extinto DAS en Tolima, adscrito al Grupo de Acción Unificada para la Libertad Personal.
El exagente ya reconoció su responsabilidad en nueve de los diez hechos que investiga la JEP. “A juicio de la Sala, los aportes del ahora compareciente permitieron esclarecer el ‘modus operandi’ y el accionar del Gaula Tolima, así como la participación de miembros del extinto DAS, el CTI y la Fiscalía General de la Nación en asesinatos y desapariciones forzadas presentadas como bajas en combate por agentes del Estado en el departamento de Tolima”, se lee en un comunicado de la jurisdicción especial.
Además de aceptarlo en la JEP, el magistrado Hormiga le otorgó la libertad condicionada al exagente. Mientras colabore en los procesos, Calderón podrá resolver su situación jurídica de forma definitiva y recibir los beneficios que otorga la jurisdicción especial.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.
La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) aceptó el sometimiento del exagente del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), Giovanny Calderón Salazar, conocido como el “cerebro” de ejecuciones extrajudiciales en el Tolima. La decisión de esta instancia transicional se conoce luego de que la propia JEP rechazara su entrada al sistema especial de paz por considerar insuficiente su aporte a la verdad.
Según el prontuario de Calderón Salazar, ya fue condenado por dos falsos positivos ocurridos en Tigrera (Alvarado, Tolima), pero en su contra hay por lo menos nueve expedientes similares. El caso por el que fue declarado culpable ocurrió el 12 de enero de 2007, en esa vereda tolimense, cuando miembros del Ejército y Calderón Salazar simularon una operación antiextorsión en la que asesinaron a Marco Antonio Quiroga y Álvaro Enrique Rodríguez Buitrago.
“La Sala de Definición de Situaciones Jurídicas aceptó el sometimiento a la JEP del exagente del extinto DAS, Giovanny Calderón Salazar, como miembro de ‘facto’ de la fuerza pública. Es decir, el exagente del extinto DAS debía demostrar que había fungido como un sujeto que formalmente no hacía parte de las fuerzas militares, pero, en la práctica, sí, según el nivel de participación que tuvo en las operaciones llevadas a cabo con unidades militares”, explicó la jurisdicción especial.
La decisión de aceptar a Calderón Salazar en la JEP la tomó el magistrado José Miller Hormiga Sánchez, luego de contrastar los aportes del exagente y expedientes judiciales. Según la jurisdicción, son 10 hechos con 17 víctimas en los que el procesado podría aportar verdad. Los crímenes fueron cometidos entre el 5 de junio de 2006 y el 21 de mayo de 2008, cuando Calderón fungía como detective del extinto DAS en Tolima, adscrito al Grupo de Acción Unificada para la Libertad Personal.
El exagente ya reconoció su responsabilidad en nueve de los diez hechos que investiga la JEP. “A juicio de la Sala, los aportes del ahora compareciente permitieron esclarecer el ‘modus operandi’ y el accionar del Gaula Tolima, así como la participación de miembros del extinto DAS, el CTI y la Fiscalía General de la Nación en asesinatos y desapariciones forzadas presentadas como bajas en combate por agentes del Estado en el departamento de Tolima”, se lee en un comunicado de la jurisdicción especial.
Además de aceptarlo en la JEP, el magistrado Hormiga le otorgó la libertad condicionada al exagente. Mientras colabore en los procesos, Calderón podrá resolver su situación jurídica de forma definitiva y recibir los beneficios que otorga la jurisdicción especial.
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