JEP citó a declarar a exdirectivos del DAS por persecución y exilio a periodista
Se trata de Rodolfo Medina Alemán y Enrique Alberto Ariza, quienes habrían participado de los hechos victimizantes contra Claudia Julieta Duque. La comunicadora fue víctima de estos hechos en medio de sus investigaciones en el caso del asesinato de Jaime Garzón, en el que habrían participado agentes estatales y el paramilitarismo.
La Sala de Definición de Situaciones Jurídicas de la Jurisdicción Especial para la Paz acaba de citar a dos antiguos directivos del extinto Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), organismo de inteligencia que estuvo adscrito a la Presidencia hasta 2011. La JEP citó a versión de aporte temprano a la verdad a Rodolfo Medina Alemán y Enrique Alberto Ariza Rivas, vinculados a graves delitos cuando fueron funcionarios del DAS desde 2001 hasta 2010, aproximadamente.
Lea también: ‘Lo de Claudia Julieta Duque fue tortura síquica’: Fiscalía
La diligencia de Medina Alemán, que se desempeñó como subdirector de contrainteligencia, se realizará el 31 de enero, mientras que la de Ariza Rivas, quien fue director general de Inteligencia, será el 2 de febrero ante dicha Sala. “Es necesario citar a los solicitantes para adelantar diligencia de versión voluntaria de aporte temprano a la verdad, como consecuencia de la configuración y ajuste del compromiso claro, concreto y programado, pero, particularmente, advirtiéndoles que sus relatos de verdad deberán ser contrastados y soportados con elementos de convicción”, dice la Sala.
Es decir, en su declaración deberán aportar pruebas de lo que dicen. La investigación que adelantaba la Fiscalía contra estos hombres de la inteligencia colombiana estaban relacionados con las amenazas, persecución y exilio que sufrió la periodista Claudia Julieta Duque. Estos hechos, dijo la Fiscalía en 2013, se tradujeron en seguimientos, vigilancias, interceptaciones de correos electrónicos, amenazas, hostigamientos, entre otros actos ilegales por parte del grupo de funcionarios adscritos a la Dirección General de Inteligencia del extinto DAS desde 2001.
Lea aquí: El Estado es responsable de la tortura psicológica a Claudia Julieta Duque: Tribunal
En julio de 2001, la periodista fue víctima de secuestro en la modalidad de “paseo millonario”, en el que sus victimarios le indicaron que su secuestro tenía relación con el trabajo de investigación que realizaba por el homicidio del también periodista Jaime Garzón Forero. En ese entonces, la comunicadora presentó la denuncia ante la Fiscalía. Desde ese entonces, la comunicadora fue blanco de hostigamientos y seguimientos por parte de múltiples vehículos, entre ellos taxis, que finalmente la terminaron obligando a abandonar el país junto con su hija. Más tarde se comprobó que esos carros pertenecieron al extinto DAS.
El documento de la JEP también reconoce como víctima a otras personas, entre ellos al partido político el Polo Democrático y al político que hizo parte de esa colectividad Wilson Borja, quien también fue víctima de seguimientos y un atentado por militares y el paramilitarismo. “Adicionalmente, por solicitarlo, se reconocerá la calidad de interviniente especial del señor Jaime Araujo Rentería. En el mismo sentido se procederá con relación al Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo y del líder político Wilson Borja Díaz, quienes acuden a través de mandatario judicial”.
La respuesta de Claudia Julieta Duque
El pasado 29 de diciembre la periodista le respondió a la JEP sobre esta y otras determinaciones en su caso. La Comunicadora señaló que: “Resulta risible, por decir lo menos, que la mayor parte del escrito del sindicado sea un resumen del expediente. Es evidente que en mi caso la justicia ordinaria, y particularmente la Fiscalía General, recaudó tal cantidad de material probatorio que Ariza pretende burlarse de la justicia ‘confesando’ lo que ya obra en el expediente y constituye prueba irrebatible de su responsabilidad en el delito de tortura psíquica del que fui víctima”.
Y agregó que “Además de algunas anécdotas que demuestran los conflictos existentes entre José Miguel Narváez y Enrique Ariza, hay muy pocas aseveraciones concretas que puedan aportar en algo a la verdad ya conocida en el expediente. Lo mismo puede decirse de su mención a varios personajes de la vida nacional, al igual que de otros presuntos responsables aún sin investigar. El de Ariza es un relato para cautivar a personas incautas e indoctas sobre la fuerza probatoria existente en el expediente”.
La Sala de Definición de Situaciones Jurídicas de la Jurisdicción Especial para la Paz acaba de citar a dos antiguos directivos del extinto Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), organismo de inteligencia que estuvo adscrito a la Presidencia hasta 2011. La JEP citó a versión de aporte temprano a la verdad a Rodolfo Medina Alemán y Enrique Alberto Ariza Rivas, vinculados a graves delitos cuando fueron funcionarios del DAS desde 2001 hasta 2010, aproximadamente.
Lea también: ‘Lo de Claudia Julieta Duque fue tortura síquica’: Fiscalía
La diligencia de Medina Alemán, que se desempeñó como subdirector de contrainteligencia, se realizará el 31 de enero, mientras que la de Ariza Rivas, quien fue director general de Inteligencia, será el 2 de febrero ante dicha Sala. “Es necesario citar a los solicitantes para adelantar diligencia de versión voluntaria de aporte temprano a la verdad, como consecuencia de la configuración y ajuste del compromiso claro, concreto y programado, pero, particularmente, advirtiéndoles que sus relatos de verdad deberán ser contrastados y soportados con elementos de convicción”, dice la Sala.
Es decir, en su declaración deberán aportar pruebas de lo que dicen. La investigación que adelantaba la Fiscalía contra estos hombres de la inteligencia colombiana estaban relacionados con las amenazas, persecución y exilio que sufrió la periodista Claudia Julieta Duque. Estos hechos, dijo la Fiscalía en 2013, se tradujeron en seguimientos, vigilancias, interceptaciones de correos electrónicos, amenazas, hostigamientos, entre otros actos ilegales por parte del grupo de funcionarios adscritos a la Dirección General de Inteligencia del extinto DAS desde 2001.
Lea aquí: El Estado es responsable de la tortura psicológica a Claudia Julieta Duque: Tribunal
En julio de 2001, la periodista fue víctima de secuestro en la modalidad de “paseo millonario”, en el que sus victimarios le indicaron que su secuestro tenía relación con el trabajo de investigación que realizaba por el homicidio del también periodista Jaime Garzón Forero. En ese entonces, la comunicadora presentó la denuncia ante la Fiscalía. Desde ese entonces, la comunicadora fue blanco de hostigamientos y seguimientos por parte de múltiples vehículos, entre ellos taxis, que finalmente la terminaron obligando a abandonar el país junto con su hija. Más tarde se comprobó que esos carros pertenecieron al extinto DAS.
El documento de la JEP también reconoce como víctima a otras personas, entre ellos al partido político el Polo Democrático y al político que hizo parte de esa colectividad Wilson Borja, quien también fue víctima de seguimientos y un atentado por militares y el paramilitarismo. “Adicionalmente, por solicitarlo, se reconocerá la calidad de interviniente especial del señor Jaime Araujo Rentería. En el mismo sentido se procederá con relación al Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo y del líder político Wilson Borja Díaz, quienes acuden a través de mandatario judicial”.
La respuesta de Claudia Julieta Duque
El pasado 29 de diciembre la periodista le respondió a la JEP sobre esta y otras determinaciones en su caso. La Comunicadora señaló que: “Resulta risible, por decir lo menos, que la mayor parte del escrito del sindicado sea un resumen del expediente. Es evidente que en mi caso la justicia ordinaria, y particularmente la Fiscalía General, recaudó tal cantidad de material probatorio que Ariza pretende burlarse de la justicia ‘confesando’ lo que ya obra en el expediente y constituye prueba irrebatible de su responsabilidad en el delito de tortura psíquica del que fui víctima”.
Y agregó que “Además de algunas anécdotas que demuestran los conflictos existentes entre José Miguel Narváez y Enrique Ariza, hay muy pocas aseveraciones concretas que puedan aportar en algo a la verdad ya conocida en el expediente. Lo mismo puede decirse de su mención a varios personajes de la vida nacional, al igual que de otros presuntos responsables aún sin investigar. El de Ariza es un relato para cautivar a personas incautas e indoctas sobre la fuerza probatoria existente en el expediente”.