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La familia de José Antonio Quesada Alián pasó una noche distinta este 19 de febrero, pues luego de 20 años de búsqueda incesante por su paradero, recibieron el cuerpo del joven y podrán sepultarlo. Quesada es la octava víctima de desaparición forzada en ser identificada y entregada a sus familiares, de los más de 70 cuerpos que exhumó la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) en febrero de 2020 en el cementerio Las Mercedes, de Dabeiba (Antioquia), algunos de los cuales podrían ser falsos positivos.
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Según la JEP, la familia de Quesada Alián “hoy tiene certeza sobre lo que sucedió en 2002, cuando la víctima salió de Frontino en busca de una mejor opción laboral”. La identificación del cuerpo del joven se da en el marco de las investigaciones que adelanta la Sala de Reconocimiento de la JEP, en concreto en el caso 03, que busca esclarecer los falsos positivos, y el 04, sobre la situación territorial en Urabá. Gracias a las versiones de militares, exfuncionarios y otros testigos, los magistrados llegaron hasta este cementerio.
El cuerpo de Quesada Alián fue hallado en una de las 29 fosas que, a la fecha, ha hallado la JEP en el cementerio Las Mercedes. En concreto, en la número 15. “De acuerdo con el informe pericial, allí fue encontrada la víctima, en un enterramiento múltiple ilegal junto con al menos cinco personas más, que están en proceso de identificación. Los cuerpos fueron hallados en bolsas negras y amarrados”, informó la Jurisdicción. Como esta forma de enterramiento no es común, encendió las alarmas de los investigadores. Los otros cinco cuerpos continúan siendo identificados.
(En contexto: Los cuerpos hallados por la JEP en Dabeiba sí eran víctimas de “falsos positivos”)
A la fecha, 29 militares, entre los que hay comandantes de batallones y brigadas, han dado su testimonio sobre los hechos ocurridos en Dabeiba. Ante las revelaciones, el magistrado Alejandro Ramelli, de la Sala de Ausencia de Reconocimiento de Verdad, ordenó medidas cautelares sobre el cementerio Las Mercedes que incluyen, por ejemplo, la intervención forense que llevó al hallazgo de las fosas, así como órdenes de no intervenir el lugar para proteger los cuerpos que aún no han sido exhumados.
La JEP, la Unidad de Víctimas, la Fiscalía y otras entidades participaron de la entrega digna del cuerpo de Quesada Alián a su familia que tuvo lugar en Carepa y Frontino. En la ceremonia, el magistrado Alejandro Ramelli les dijo a los familiares de la víctima: “José Antonio, de alguna manera, ha propiciado que se conozcan y que se cree un vínculo que hoy les permite unirse como familia para recibirle con afecto. Celebramos este encuentro, nos sentimos honrados de haberlo facilitado y agradecemos su disposición”.
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Quesada Alián se convirtió, entonces, en el octavo desaparecido de la región en ser hallado en el cementerio de Dabeiba, identificado y entregado a sus familiares. La Jep continúa las labores de investigación sobre tres puntos de interés del cementerio en los que podría haber más cuerpos. Apenas en enero de este año, la Jurisdicción levantó parcialmente las medidas cautelares impuestas. Ahora, como lo habían pedido los administradores del lugar y la Alcaldía de Dabeiba, se pueden enterrar a los habitantes del municipio que fallezcan. La razón: el COVID-19 en Antioquia y a nivel nacional, elevó el número de muertes en la región.
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