La fuga de “Matamba” la habría pagado un exmiembro del Clan del Golfo
Alias “115″ habría puesto $500 millones para asegurarse que el jefe criminal lograra escaparse de La Picota en marzo de este año. El hombre, identificado como Henry Martínez, se declara inocente.
Según la Fiscalía, por la fuga del líder criminal alias Matamba se pagaron $500 millones. Quien aportó el dinero para asegurar la libertad del narcotraficante más poderoso de Nariño, al parecer, fue un exmiembro del Clan del Golfo de alias 115, a quien las autoridades identificaron como Henry Martínez Torres. El hombre fue imputado por el delito de concierto para delinquir agravado y deberá permanecer en prisión mientras avanza el proceso en su contra.
(Lea también: Bruja venezolana: la clave de la Policía para llegar hasta “Matamba”)
Al parecer, 115 era el jefe financiero de la estructura criminal que lideraba Matamba en Nariño. Juan Larrinson Catro, verdadero nombre de este capo, había logrado acuerdos con el Clan del Golfo para operar una franquicia de su negocio narcotraficante en el departamento de Nariño. Así amasó su fortuna hasta que fue capturado y, mientras esperaba su extradición, se fugó de la cárcel La Picota, en Bogotá, en marzo. Dos meses más tarde murió en un enfrentamiento con la Fuerza Pública en el Magdalena Medio.
Además de manejarle el dinero, según la Fiscalía, alias 115 era “el encargado de conseguir armas y munición; así como de coordinar los asuntos logísticos para el grupo criminal”. Tras meses detrás del supuesto jefe criminal, las autoridades lo capturaron en Medellín y un fiscal de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales lo llevó ante un juez de control de garantías. El hombre se declaró inocente.
(Le puede interesar: Alias “Matamba”, el escurridizo extraditable que se le fugó al Inpec)
La Fiscalía tiene indicios de que, tras la muerte de Matamba, alias 115 continuó delinquiendo. “El material de prueba indica que, luego de la captura y muerte de su entonces jefe, se convirtió en uno de los principales articuladores de la estructura disidente de las Farc autodenominada Ariel Aldana, que está alineada a la ‘Segunda Marquetalia’ y tiene injerencia en Nariño”, dijo el ente investigador en un comunicado.
No sería extraño, pues, según las investigaciones, este hombre lleva 25 años en diferentes organizaciones criminales. Por ejemplo, se le sindica de haber pasado por las Autodefensas Unidas de Colombia y de ser muy cercano al exjefe paramilitar Carlos Mario Jiménez Naranjo, alias Macaco, con amplia influencia en el Magdalena Medio. De hecho, contra 115 hay otra investigación en contra por homicidio, que lleva un fiscal de derechos humanos.
(Lea también: La otra denuncia sobre una posible alianza de militares con “Matamba”)
El supuesto financiero de Matamba fue capturado junto a su pareja, identificada como Carolina Cepeda Guarín. La Fiscalía sostiene que, supuestamente, la mujer le manejaba las comunicaciones, pues 115 no utilizaba celular, además, que, al parecer, realizó varios giros a nombre de él y que ella recibía constantemente dineros producto de las actividades criminales de las organizaciones con las que se relacionaban.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.
Según la Fiscalía, por la fuga del líder criminal alias Matamba se pagaron $500 millones. Quien aportó el dinero para asegurar la libertad del narcotraficante más poderoso de Nariño, al parecer, fue un exmiembro del Clan del Golfo de alias 115, a quien las autoridades identificaron como Henry Martínez Torres. El hombre fue imputado por el delito de concierto para delinquir agravado y deberá permanecer en prisión mientras avanza el proceso en su contra.
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Al parecer, 115 era el jefe financiero de la estructura criminal que lideraba Matamba en Nariño. Juan Larrinson Catro, verdadero nombre de este capo, había logrado acuerdos con el Clan del Golfo para operar una franquicia de su negocio narcotraficante en el departamento de Nariño. Así amasó su fortuna hasta que fue capturado y, mientras esperaba su extradición, se fugó de la cárcel La Picota, en Bogotá, en marzo. Dos meses más tarde murió en un enfrentamiento con la Fuerza Pública en el Magdalena Medio.
Además de manejarle el dinero, según la Fiscalía, alias 115 era “el encargado de conseguir armas y munición; así como de coordinar los asuntos logísticos para el grupo criminal”. Tras meses detrás del supuesto jefe criminal, las autoridades lo capturaron en Medellín y un fiscal de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales lo llevó ante un juez de control de garantías. El hombre se declaró inocente.
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La Fiscalía tiene indicios de que, tras la muerte de Matamba, alias 115 continuó delinquiendo. “El material de prueba indica que, luego de la captura y muerte de su entonces jefe, se convirtió en uno de los principales articuladores de la estructura disidente de las Farc autodenominada Ariel Aldana, que está alineada a la ‘Segunda Marquetalia’ y tiene injerencia en Nariño”, dijo el ente investigador en un comunicado.
No sería extraño, pues, según las investigaciones, este hombre lleva 25 años en diferentes organizaciones criminales. Por ejemplo, se le sindica de haber pasado por las Autodefensas Unidas de Colombia y de ser muy cercano al exjefe paramilitar Carlos Mario Jiménez Naranjo, alias Macaco, con amplia influencia en el Magdalena Medio. De hecho, contra 115 hay otra investigación en contra por homicidio, que lleva un fiscal de derechos humanos.
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El supuesto financiero de Matamba fue capturado junto a su pareja, identificada como Carolina Cepeda Guarín. La Fiscalía sostiene que, supuestamente, la mujer le manejaba las comunicaciones, pues 115 no utilizaba celular, además, que, al parecer, realizó varios giros a nombre de él y que ella recibía constantemente dineros producto de las actividades criminales de las organizaciones con las que se relacionaban.
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