La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) acreditó como víctima al exvicepresidente de la República, exsenador y exministro Germán Vargas Lleras, en medio del caso que investiga los crímenes no amnistiables cometidos por la extinta guerrilla de las FARC. Esta acreditación fue otorgada por la Sala de Reconocimiento de Verdad debido a dos atentados que sufrió el político, el primero de ellos el 13 de diciembre de 2002 y otro posterior, el 10 de octubre de 2005, en Bogotá.
La JEP tomó esta decisión luego de analizar la solicitud de acreditación y toda la información presentada por el exvicepresidente. Particularmente, la magistrada Marcela Giraldo, correlatora del Caso 10, fue quien determinó que Vargas Lleras sí cumplía con todos los requisitos para poder ser considerado una víctima directa, ya que los crímenes “fueron perpetrados por integrantes de las extintas Farc-EP; los hechos no son de competencia de ninguno de los otros casos que investiga la JEP, ocurrieron antes del 1 de diciembre de 2016 y tendrían relación directa con ocasión del conflicto armado”.
Ambos atentados sucedieron cuando Vargas Lleras era senador. El primero de ellos se dio en diciembre de 2002 cuando el exvicepresidente recibió un libro bomba en su oficina en el Congreso de la República, dicha explosión le ocasionó una situación de discapacidad debido a la gravedad de las heridas de sus manos. Posteriormente, en octubre de 2005, sufrió el segundo atentando mientras salía de las instalaciones de Caracol Radio en Bogotá. En este hecho dejó nueve personas heridas, entre las que se encuentran sus escoltas, debido a la explosión de un carro bomba al paso de su vehículo.
Estos ataques ya habían sido reconocidos por las extintas Farc-EP por medio de una carta que enviaron al expresidente Juan Manuel Santos en 2020, en ella reconocían su autoría y manifestaban su intención de aportar a la verdad. Por otra parte, el caso en el que fue acreditado Vargas Lleras se centra en los patrones macrocriminales de hechos considerados no amnistiables, debido a su gravedad, específicamente en contextos urbanos.
Debido a esta acreditación, el exvicepresidente podrá hacerles preguntas o escuchar a los comparecientes de las Farc, que estén vinculados al proceso, durante sus versiones voluntarias y audiencias. También podrá presentar observaciones sobre estas versiones y participar de las propuestas para las sanciones propias, así como podrá solicitar acompañamiento sicológico.
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