Las claves del fallo que cambió el número de semanas para pensión de las mujeres

Que una mujer tenga que cumplir 1.300 semanas para pensionarse es un sacrificio desproporcionado de los derechos de las mujeres. Con esas palabras, la Corte Constitucional explicó la histórica decisión que tomó que cambia radicalmente el sistema de pensiones en Colombia. Por orden del alto tribunal, el Estado no puede exigirle las mismas semanas para la pensión a hombres y a mujeres y, en consecuencia, el número para ellas debe reducirse. Se trata de una nueva decisión de la Corte que estudió una demanda que pedía cambiar el régimen actual por no proteger varios derechos fundamentales y por no estar en armonía con el enfoque de género.

Que una mujer tenga que cumplir 1.300 semanas para pensionarse es un sacrificio desproporcionado de los derechos de las mujeres. Con esas palabras, la Corte Constitucional explicó la histórica decisión que tomó que cambia radicalmente el sistema de pensiones en Colombia. Por orden del alto tribunal, el Estado no puede exigirle las mismas semanas para la pensión a hombres y a mujeres y, en consecuencia, el número para ellas debe reducirse. Se trata de una nueva decisión de la Corte que estudió una demanda que pedía cambiar el régimen actual por no proteger varios derechos fundamentales y por no estar en armonía con el enfoque de género.

(En contexto: Corte Constitucional ordena reducir semanas para que una mujer pueda pensionarse)

Protección de derechos fundamentales

Aunque todavía no se conoce la sentencia, el alto tribunal divulgó un comunicado de prensa en el que resumió el fallo y dio las claves del caso. Para empezar, la Corte señala que tomó esta decisión buscando el amparo de varios derechos fundamentales, como el de la igualdad, protección a la mujer y, en especial, a la cabeza de familia, y a la seguridad social. Al estudiar el caso, el alto tribunal tuvo en cuenta intervenciones de expertos, universidades y organizaciones sociales que, en su mayoría, coincidieron en que era injusto que a hombres y mujeres se les exigiera las mismas semanas para obtener la pensión, al menos en lo que tiene que ver con el régimen de prima media (el sistema público).

El desequilibrio, explica la Corte, se basa en varios factores como la informalidad en los trabajos que terminan consiguiendo las mujeres, y también en la discriminación en el ámbito laboral. Pero quizás el argumento de más peso en esta discusión es que, en las reglas actuales para tasar el número de semanas de trabajo, no se tiene en cuenta la invisibilidad del trabajo no remunerado en la economía del cuidado, que recae, en su gran mayoría, sobre las mujeres. “Esta situación ocasiona una deficiencia estructural que impide realizar adecuadas condiciones de justicia material para ellas”, señala el alto tribunal, que discutió una ponencia del magistrado Juan Carlos Cortés para llegar a esta decisión.

(Lea también: ¿Qué implica bajar el requisito de semanas de pensión para las mujeres?)

Las cifras que respaldan la decisión

Según cifras de Colpensiones (con corte abril del año pasado) del total de pensionados en el régimen de prima media, 850.607 son mujeres. Al consultar de dónde sale esa cifra, encontramos que un buen número (308.141 mujeres que representan el 87 % del total de ese tipo de pensiones) tienen una pensión por supervivencia y un pequeño porcentaje corresponde a la pensión por invalidez (29.134, un 38 % del total de ese tipo de pensión). Evaluando solo la cifra de pensión por vejez, en este régimen las mujeres representan en realidad 48 %. Otros estudios también dan cuenta de esa brecha.

Un documento de Fescol revela que, en 2020, del total de mujeres en edad de pensionarse, solo lo hicieron el 19 %, frente a un 29 % de hombres, registrando así una brecha del 10 %. Ese documento también dice que el 81,5 % de las mujeres pensionadas recibe menos de dos salarios mínimos, frente a un 73,1 % de hombres. Colpensiones también precisa que 54 % de los pensionados en Colombia son hombres y que estos gozan de un especial protagonismo en los rangos de pensión más altos. También que la edad promedio de pensión de un hombre es los 64 años, mientras que en las mujeres son los 62, y que los hombres se pensionan cuando alcanzan la semana 1.465, mientras que las mujeres lo hacen cuando logran la semana 1.396.

Así quedaron las reglas

“La Corte advierte que la medida actual genera un sacrificio desproporcionado de los derechos de las mujeres a la dignidad humana, a la igualdad, a la seguridad social, a la pensión, al mínimo vital y a obtener una protección especial en el ámbito laboral y de la seguridad social”, señala la noticia de prensa. La decisión la tomaron seis de los nueve magistrados de la Corte: Diana Fajardo, Paola Meneses, Natalia Ángel, Jose Fernando Reyes, Jorge Enrique Ibáñez y Juan Carlos Cortés. Tres salvaron el voto: Alejandro Linares, Antonio José Lizarazo y Cristina Pardo.

Sobre los factores que vuelven injusto el sistema pensional, la Corte agrega: “Para que las mujeres puedan acceder a la pensión de vejez deben acreditar las mismas 1.300 semanas de cotización que los hombres, sin considerar las barreras y dificultades que enfrentan para acceder y mantenerse en el mercado laboral y asumir las obligaciones del cuidado del hogar, tanto como las que se intensifican cuando llegan a la adultez mayor”. Así, para el alto tribunal, es claro que la decisión histórica busca superar una situación discriminatoria para las mujeres y buscar un cambio gradual del sistema de pensiones. Para lograrlo, la Corte dejó la hoja de ruta lista.

(Lea también: Ponencia propone modificar número de semanas para que una mujer pueda pensionarse)

Según el comunicado, el Congreso tiene hasta diciembre de 2025 para introducir el cambio para que a las mujeres no se les exijan 1.300 semanas, sino 1.000 (la Corte no explicó cómo llegó a este número). Esa modificación tampoco es inmediata: “Se disminuirá en 50 semanas por el año 2026 y, a partir del 1° de enero de 2027, se disminuirá en 25 semanas cada año hasta llegar a 1.000 semanas”, explica la Corte. Además de la modificación de la política pensional, el alto tribunal también pidió al Congreso y al Gobierno a que trabajen en la creación de una política que contribuya a cerrar la brecha en la equidad de género, en especial, para que se reconozca la economía del cuidado.

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