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Más de un mes lleva ya detenido en Cabo Verde el empresario colombiano Alex Saab, el contratista favorito del chavismo y señalado por Estados Unidos de servirle de testaferro al régimen de Nicolás Maduro. Y, mientras él pelea en África para que no lo extraditen, en Colombia la Fiscalía inició un proceso de extinción de dominio sobre sus bienes, avaluados en más de $35.000 millones. Entre los predios hay una mansión, dos lotes, una casa, un apartamento y tres garajes.
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Saab viene siendo judicializado por la Fiscalía colombiana porque, al parecer, realizó operaciones ficticias de comercio exterior a través de Shatex, una “empresa de papel” para lavar dinero en el sistema cambiario. Ya en ese proceso fue llamado a juicio desde diciembre del año pasado, pues, como contó El Espectador en su edición del pasado 18 de junio, el empresario barranquillero, ayudó a “invertir, transformar y administrar bienes dándoles apariencia de legalidad a estos dineros encaminada a ocultar la procedencia ilícita del dinero con el propósito de posteriormente obtener un provecho ilícito con actividades de exportaciones e importaciones ficticias”, sostiene la Fiscalía.
Y, al parecer, con el dinero que obtuvo de esas supuestas operaciones ilícitas, Saab se hizo a su fortuna. Entre su abundante patrimonio, que le ha alcanzado para pagar los servicios del reconocido abogado español Baltasar Garzón, Saab tiene a su nombre en Colombia “una mansión de 3.740 metros cuadrados, avaluada preliminarmente en 28 mil millones de pesos; dos casas, un apartamento de 379 metros cuadrados y tres garajes”, señaló la Fiscalía este miércoles en un comunicado, tras ocupar los bienes, ubicados en Barranquilla.
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Si bien el ente investigador ya había iniciado el proceso de extinción de dominio desde comienzos de junio, hasta ahora las medidas se hacen efectivas. Y es que en esa oportunidad la Fiscalía radicó medidas cautelares para que Saab no pueda vender ni hacer ninguna transacción con estos inmuebles, pues, se “constató que los bienes están a nombre de una sociedad que habría servido de fachada para ocultar los dineros obtenidos por Alex Saab”. Sin embargo, por la pandemia del COVID-19, no había podido materializar las medidas de embargo secuestro y suspensión de la posesión, que apenas hasta ahora hizo.
En la diligencia, funcionarios del CTI adscritos a la Dirección Especializada de Extinción del Derecho de Dominio de la Fiscalía ocuparon los bienes y los dejaron en manos de la Sociedad de Activos Especiales (SAE), encargada de manejar los bienes que están en procesos de extinción de dominio. Estas son algunas imágenes de los bienes que podrían pasar al erario público cuando culmine el proceso de extinción:
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El 25 de julio de 2019, Saab y su socio Álvaro Pulido Vargas, fueron acusados por el Departamento de Justicia de los Estados Unidos por ocho cargos relacionados con el lavado de cerca de US$350 millones. Según el indictment (acusación) presentado ante una corte de la Florida, los empresarios habrían lavado dinero de cuentas venezolanas hacia cuentas en Estados Unidos, aprovechando el sistema de cambio regulado que existe en el vecino país. Por estos hechos, cursa un pedido de extradición del país norteamericano ante un Tribunal de Cabo Verde, que se resolvería en las próximas semanas. Su futuro judicial se volvió, entonces, en una discusión geopolítica.