'Lo de Claudia Julieta Duque fue tortura síquica': Fiscalía
Siete exfuncionarios del DAS, incluido Miguel Narváez, fueron asegurados por el caso de la periodista. Próximo paso sería llamarlos a juicio.
El Espectador
El exsubdirector del DAS, José Miguel Narváez; el exdirector de inteligencia, Enrique Ariza; el exsubdirector de inteligencia, Carlos Arzayuz; el exsubdirector de contrainteligencia, Rodolfo Medina Alemán; el exsubdirector de Operaciones, Hugo Daney Ortiz; el exsecretario general, Giancarlo Auque y Jorge Armando Rubiano.
Contra todos ellos la Fiscalía acaba de ordenar medida de aseguramiento por el delito de tortura agravada en modalidad psíquica. La víctima: Claudia Julieta Duque.
Ella fue una de las periodistas más acosadas por interceptaciones y seguimientos ilegales por parte del DAS. Según ella misma ha declarado, sus desencuentros con la policía secreta del Ejecutivo empezaron después del asesinato del periodista y humorista Jaime Garzón, crimen que Duque estaba empeñada en ayudar a descifrar. Con ese caso, sostiene ella, Duque se convirtió en blanco de los funcionarios de inteligencia.
“Con el abogado Alirio Uribe Muñoz señalamos con pruebas, los nombres y apellidos de los funcionarios implicados en el montaje que tenía por objeto que no encontraran a los asesinos de Jaime Garzón. En marzo de 2004 el juez nos dio la razón y ordenó investigar a diez miembros del DAS por su participación en lo que yo he llamado las “DAS-viaciones” del caso Garzón. Esta orden fue confirmada en segunda instancia. Sin embargo, no se acató el resultado porque ninguno de ellos fue investigado”, le dijo la periodista a El Espectador en una entrevista publicada en enero del año pasado.
La medida de aseguramiento, sin embargo, se remite a hechos denunciados por la propia Duque entre 2003 y 2004. Entre ellos el “Manual para amenazar”, un documento que se halló en las inspecciones que la Fiscalía realizó en las instalaciones del DAS cuando el escándalo de las ‘chuzadas’ estalló en el gobierno Uribe.
En ese documento se detallaba de qué manera se tenía que intimidar a la periodista, indicando de dónde se tenía que llamar (“hacer la llamada en cercanía a las instalaciones de Inteligencia de la Policía, preferiblemente desde un teléfono de ETB de tarjeta), cómo hablar “(“no tartamudear”), o cómo llegar al lugar para llamar (“quien realice la llamada la debe hacer solo y desplazarse en bus hasta el sitio”.
Más importante aún, en ese documento se especificaba hasta qué decir: “Señora, ¿es usted la mamá de M... A......? (Esperar contestación). Pues le cuento que no nos dejó otra salida, se le dijo de todas las formas y usted no quiso hacer caso, ahora ni camionetas blindadas ni carticas chimbas le van a servir. Nos tocó meternos con lo que más quiere, eso le pasa por perra y por meterse en lo que no le importa, vieja go... hij.....”.
Órdenes de operaciones del DAS dadas en esos términos y con fines a todas luces ilegales son los que, basándose en tratados internacionales, motivaron a la Fiscalía a configurar en esta investigación el delito de tortura en modalidad psíquica. Según divulgó el diario El Tiempo, esta es la primera vez en que la Fiscalía recurre a protocolos internacionales para tipificar este delito.
“He esperado muchos años por esta noticia. Hoy me abrazo un poco a la posibilidad de justicia”, expresó en su cuenta de Twitter Claudia Julieta Duque, quien se ha visto forzada a exiliarse en varias ocasiones precisamente por cuenta de intimidaciones en su contra.
El exsubdirector del DAS, José Miguel Narváez; el exdirector de inteligencia, Enrique Ariza; el exsubdirector de inteligencia, Carlos Arzayuz; el exsubdirector de contrainteligencia, Rodolfo Medina Alemán; el exsubdirector de Operaciones, Hugo Daney Ortiz; el exsecretario general, Giancarlo Auque y Jorge Armando Rubiano.
Contra todos ellos la Fiscalía acaba de ordenar medida de aseguramiento por el delito de tortura agravada en modalidad psíquica. La víctima: Claudia Julieta Duque.
Ella fue una de las periodistas más acosadas por interceptaciones y seguimientos ilegales por parte del DAS. Según ella misma ha declarado, sus desencuentros con la policía secreta del Ejecutivo empezaron después del asesinato del periodista y humorista Jaime Garzón, crimen que Duque estaba empeñada en ayudar a descifrar. Con ese caso, sostiene ella, Duque se convirtió en blanco de los funcionarios de inteligencia.
“Con el abogado Alirio Uribe Muñoz señalamos con pruebas, los nombres y apellidos de los funcionarios implicados en el montaje que tenía por objeto que no encontraran a los asesinos de Jaime Garzón. En marzo de 2004 el juez nos dio la razón y ordenó investigar a diez miembros del DAS por su participación en lo que yo he llamado las “DAS-viaciones” del caso Garzón. Esta orden fue confirmada en segunda instancia. Sin embargo, no se acató el resultado porque ninguno de ellos fue investigado”, le dijo la periodista a El Espectador en una entrevista publicada en enero del año pasado.
La medida de aseguramiento, sin embargo, se remite a hechos denunciados por la propia Duque entre 2003 y 2004. Entre ellos el “Manual para amenazar”, un documento que se halló en las inspecciones que la Fiscalía realizó en las instalaciones del DAS cuando el escándalo de las ‘chuzadas’ estalló en el gobierno Uribe.
En ese documento se detallaba de qué manera se tenía que intimidar a la periodista, indicando de dónde se tenía que llamar (“hacer la llamada en cercanía a las instalaciones de Inteligencia de la Policía, preferiblemente desde un teléfono de ETB de tarjeta), cómo hablar “(“no tartamudear”), o cómo llegar al lugar para llamar (“quien realice la llamada la debe hacer solo y desplazarse en bus hasta el sitio”.
Más importante aún, en ese documento se especificaba hasta qué decir: “Señora, ¿es usted la mamá de M... A......? (Esperar contestación). Pues le cuento que no nos dejó otra salida, se le dijo de todas las formas y usted no quiso hacer caso, ahora ni camionetas blindadas ni carticas chimbas le van a servir. Nos tocó meternos con lo que más quiere, eso le pasa por perra y por meterse en lo que no le importa, vieja go... hij.....”.
Órdenes de operaciones del DAS dadas en esos términos y con fines a todas luces ilegales son los que, basándose en tratados internacionales, motivaron a la Fiscalía a configurar en esta investigación el delito de tortura en modalidad psíquica. Según divulgó el diario El Tiempo, esta es la primera vez en que la Fiscalía recurre a protocolos internacionales para tipificar este delito.
“He esperado muchos años por esta noticia. Hoy me abrazo un poco a la posibilidad de justicia”, expresó en su cuenta de Twitter Claudia Julieta Duque, quien se ha visto forzada a exiliarse en varias ocasiones precisamente por cuenta de intimidaciones en su contra.