Los dos hombres capturados por la masacre en Cali no aceptaron cargos
Se trata de Yefferson Marcial Angulo y Juan Carlos Loaiza a quienes la Fiscalía les imputó el delito de homicidio agravado en concurso homogéneo sucesivo con tráfico de armas. Los capturados le dijeron al juez 25 de control de garantías de Cali ser obreros de construcción y no trabajadores de vigilancia en el cañaduzal.
Los dos capturados por la masacre de los cinco adolescentes en Llano Verde, en Cali (Valle del Cauca) no aceptaron cargos durante la audiencia de imputación. Se trata de Yefferson Marcial Angulo y Juan Carlos Loaiza a quienes la Fiscalía acusa de homicidio agravado. Durante la audiencia, Angulo dijo que no asesinó a nadie.
(En contexto: Masacre en Llano Verde: hipótesis sobre el asesinato de cinco jóvenes en Cali)
De ser condenados por la masacre ocurrida el pasado 11 de agosto en Llano Verde, ninguno podrá obtener rebaja de penas por tratarse de un delito contra menores de 18 años. Las víctimas fueron Luis Fernando Montaño, Jean Paul Perlaza, Léyder Cárdenas, Álvaro Caicedo y Jaír Andrés Cortés; todos tenían entre 13 y 14 años. Por los hechos, la Fiscalía solicitó medida de aseguramiento en centro carcelario en aras de proteger a la comunidad y a las víctimas.
Durante la audiencia de legalización de captura celebrada este 28 de agosto, los hombres aseguraron ser trabajadores de una empresa de construcción en Bucaramanga (Santander), versión que corroboró en una entrevista para Blu Radio Élmer Montaña, abogado de una de las víctimas. “Los indiciados manifestaron que trabajaban para una empresa constructora que tiene sede en Bucaramanga y que está realizando unas obras cerca del Jarillón, uno de ellos es operario de máquina pesada y otro vigilante”, dijo Montaña a la emisora.
La Fiscalía, por su lado, había dicho que los capturados eran vigilantes del cañaduzal: “El día de los hechos, al parecer, los tres adultos que trabajaban como vigilantes en los alrededores del cañaduzal habrían observado a los cinco menores de edad y, sin medir palabra, posiblemente con la intención de evitar la presencia de los jóvenes, habrían asesinado con armas de fuego a cuatro y arma blanca a otro”, agregó el fiscal Francisco Barbosa.
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Para el fiscal del caso, existe un testimonio clave que desmentiría la versión de ambos hombres. Se trata de un trabajador de una empresa de vigilancia que contrata con la Alcaldía de Cali, quien aseguró que Juan Carlos Loaiza prestaba servicios de seguridad y que tenía conocimiento de que Yefferson Marcial Angulo manejaba una máquina retroexcavadora para otra empresa.
La Fiscalía reiteró en la audiencia que ya se tiene identificada a la tercera persona involucrada en los crímenes. Se trataría de un hombre identificado como Gabriel Alejandro Bejarano. Según el ente acusador, el hombre habría abordado a uno de los menores, mientras que Loaiza y Angulo acorralaron a los demás.
La Fiscalía señaló que “hay operativos para dar captura en las próximas horas, se sabe a ciencia cierta de quién se trata, puede que esté en la ciudad, aunque, al día siguiente de cometido el hecho, esta persona abandonó su lugar de residencia y se fue para otro sitio”. Algunas versiones de familiares de las víctimas indican que los cinco amigos habrían salido hacia los cañaduzales a elevar cometa cuando desaparecieron.
El juez 25 de control de garantías de Cali dictó medida de aseguramiento para Yefferson Marcial Angulo y Juan Carlos Loaiza.
Los dos capturados por la masacre de los cinco adolescentes en Llano Verde, en Cali (Valle del Cauca) no aceptaron cargos durante la audiencia de imputación. Se trata de Yefferson Marcial Angulo y Juan Carlos Loaiza a quienes la Fiscalía acusa de homicidio agravado. Durante la audiencia, Angulo dijo que no asesinó a nadie.
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De ser condenados por la masacre ocurrida el pasado 11 de agosto en Llano Verde, ninguno podrá obtener rebaja de penas por tratarse de un delito contra menores de 18 años. Las víctimas fueron Luis Fernando Montaño, Jean Paul Perlaza, Léyder Cárdenas, Álvaro Caicedo y Jaír Andrés Cortés; todos tenían entre 13 y 14 años. Por los hechos, la Fiscalía solicitó medida de aseguramiento en centro carcelario en aras de proteger a la comunidad y a las víctimas.
Durante la audiencia de legalización de captura celebrada este 28 de agosto, los hombres aseguraron ser trabajadores de una empresa de construcción en Bucaramanga (Santander), versión que corroboró en una entrevista para Blu Radio Élmer Montaña, abogado de una de las víctimas. “Los indiciados manifestaron que trabajaban para una empresa constructora que tiene sede en Bucaramanga y que está realizando unas obras cerca del Jarillón, uno de ellos es operario de máquina pesada y otro vigilante”, dijo Montaña a la emisora.
La Fiscalía, por su lado, había dicho que los capturados eran vigilantes del cañaduzal: “El día de los hechos, al parecer, los tres adultos que trabajaban como vigilantes en los alrededores del cañaduzal habrían observado a los cinco menores de edad y, sin medir palabra, posiblemente con la intención de evitar la presencia de los jóvenes, habrían asesinado con armas de fuego a cuatro y arma blanca a otro”, agregó el fiscal Francisco Barbosa.
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Para el fiscal del caso, existe un testimonio clave que desmentiría la versión de ambos hombres. Se trata de un trabajador de una empresa de vigilancia que contrata con la Alcaldía de Cali, quien aseguró que Juan Carlos Loaiza prestaba servicios de seguridad y que tenía conocimiento de que Yefferson Marcial Angulo manejaba una máquina retroexcavadora para otra empresa.
La Fiscalía reiteró en la audiencia que ya se tiene identificada a la tercera persona involucrada en los crímenes. Se trataría de un hombre identificado como Gabriel Alejandro Bejarano. Según el ente acusador, el hombre habría abordado a uno de los menores, mientras que Loaiza y Angulo acorralaron a los demás.
La Fiscalía señaló que “hay operativos para dar captura en las próximas horas, se sabe a ciencia cierta de quién se trata, puede que esté en la ciudad, aunque, al día siguiente de cometido el hecho, esta persona abandonó su lugar de residencia y se fue para otro sitio”. Algunas versiones de familiares de las víctimas indican que los cinco amigos habrían salido hacia los cañaduzales a elevar cometa cuando desaparecieron.
El juez 25 de control de garantías de Cali dictó medida de aseguramiento para Yefferson Marcial Angulo y Juan Carlos Loaiza.