Los secretos de la familia de Otoniel que reveló un proceso de extinción de dominio
El Clan del Golfo puso decenas de millonarias propiedades a nombre del núcleo familiar de Otoniel. ¿Sabía que el papá y una de las hermanas de Úsuga están vinculados con Fedegan? Una joven quiso hacerle creer a las autoridades que con 23 años podía comprar un lujoso apartamento en Medellín.
Juan de Dios Úsuga Orrego es el papá de quien llegó a ser el hombre más buscado del país: Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, líder del Clan del Golfo y preso en Estados Unidos por narcotráfico. No solo le dio la vida a quien comanda el grupo organizado con mayor presencia en Colombia, también le dio el nombre a Juan de Dios Úsuga David, alias Giovanni y hermano de Otoniel. Se trata de quien en 2008 reunió a exparamilitares del Urabá antioqueño para conformar las Agc, que terminaran por convertirse en todo un clan que se apoderó de la tranquilidad en el pacífico y la costa caribe nacional.
En contexto: Así es como la familia de Otoniel y cercanos al Clan ocultaron dinero en Antioquia
El padre de Otoniel es uno de los protagonistas de la reciente decisión del Juzgado Primero de Extinción de Dominio de Antioquia, que reveló la forma en que el Clan del Golfo quiso ocultar el dinero mal habido del narcotráfico a través de presuntos testaferros. Se trata de la incautación de 51 bienes a lo largo y ancho de Medellín, así como en municipios de Antioquia como Carepa, Turbo, Guarne, Necoclí, Nuevo Antioquia, Rionegro y San Pedro de Urabá.
Los Úsuga David tienen un origen campesino. Prueba de ello, además de las declaraciones de Otoniel, es el predio que en 1999 le adjudicó a Juan de Dios Úsuga el extinto Instituto Colombiano de la Reforma Agraria (Incora). La finca fue entregada por la Nación para su explotación y registra su permanencia en Turbo (Antioquia), el mismo lugar donde el 15 de septiembre de 1971 nació el jefe del Clan del Golfo.
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Con esa prueba, la defensa de Juan de Dios Úsuga quiso probar sus actividades campesinas y la manera en que adquirió, entre 2009 y 2011, cinco fincas en Necoclí (Antioquia). No obstante, el Juzgado encontró que la adquisición de esos bienes coincide con la expansión del Clan por el Urabá y que el adulto mayor no pudo probar que sus actividades de agricultura, ganadería y comercio informal le dieron fondos suficientes para obtener las tierras. La defensa de Úsuga respondió al Juzgado que su representado, incluso, está inscrito en la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegan).
Ana Celsa David de Úsuga, madre de Otoniel, también perdió una cuenta en Bancolombia, una cuenta en Caja Social, un lote en Carepa (Antioquia) y un lujoso apartamento, con su respectivo garaje, en el barrio Robledo en Medellín. David de Úsuga aseguró pertenecer al Comité de Ganaderos de Necoclí y que sus antiguas propiedades son fruto de un arduo trabajo en el campo. El Juzgado encontró que, a pesar de que en 2012 inició a comprar los numerosos bienes, en su cuenta de banco solo tenía $5 millones.
Lea: La receta criminal del Clan del Golfo: los factores detrás de su poderío
María Rubiela Úsuga David, hermana de Otoniel, logró quedarse con un lote en Necoclí. La Fiscalía argumentó que se hizo públicamente con la propiedad en 2008 y que no tenía como reportar que, para esa fecha, tuviese actividades comerciales u obligaciones financieras que soporten la adquisición. María Rubiela Úsuga también cuenta con una certificación por parte de Fedegan, expedida el 15 de septiembre de 2015.
El expediente soporta que, a la fecha, María Rubiela Úsuga es una ciudadana común. Para 1996, está acreditado que trabajaba en el chance para la empresa de apuestas Gana S.A. “Ellos llegaron al pueblo y pusieron una tiendecita, después la acabaron no sé porque, y a doña Rubiela la conocí trabajando en la agencia de chances, trabajó como 6 o 7 años”, dijo un testigo. Obtuvo su vivienda en 2004, dos años antes de que se fundara la primera organización que dio vida al Clan del Golfo (Los Urabeños). La señora María Úsuga quedó libre en el expediente y es una empresaria del Urabá que trabaja en aves de corral, carnes, pescados y productos de mar.
En video: Plan Pistola: Clan del Golfo asesinó a más de 20 policías en 2022
Si en el Urabá usted conoce la “Tienda Económica Doña Dilma”, debe saber que pertenece a Ana Dilma Úsuga David, otras de las hermanas de Otoniel. Desde 2011, es proveedora de leche para la Lechería San Pedro de Urabá y socia en venta de ganado bovino y porcino con el comerciante Mario Guerra Elerechis. El Juzgado halló que su potencial como comerciante inició en 2007, justo cuando el Clan del Golfo nacía con el nombre de “Los Urabeños”. Perdió un lote en San Pedro de Urabá, dos motos Yamaha y un lujoso apartamento en el barrio Los Colores, en Medellín.
Por otro lado, los conocidos de Ana María Gómez David quizás se preguntaron como es que ella, con apenas 23 años, en 2012, ya era propietaria de un apartamento, un garaje y un cuarto útil en el edificio Barú, también en el barrio Los Colores. Diez años después, la respuesta es clara: se benefició de las rentas criminales del Clan del Golfo, dado que su madre, Lody Amparo David, es prima de Nini Johana Úsuga, alias La Negra y hermana de Otoniel. Y por si fuese poco, su padre, Joaquín Orlando Gómez, alias Joaco, está procesado por concierto para delinquir, lavado de activos y porte de armas, como posible miembro del Clan del Golfo.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.
Juan de Dios Úsuga Orrego es el papá de quien llegó a ser el hombre más buscado del país: Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, líder del Clan del Golfo y preso en Estados Unidos por narcotráfico. No solo le dio la vida a quien comanda el grupo organizado con mayor presencia en Colombia, también le dio el nombre a Juan de Dios Úsuga David, alias Giovanni y hermano de Otoniel. Se trata de quien en 2008 reunió a exparamilitares del Urabá antioqueño para conformar las Agc, que terminaran por convertirse en todo un clan que se apoderó de la tranquilidad en el pacífico y la costa caribe nacional.
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Los Úsuga David tienen un origen campesino. Prueba de ello, además de las declaraciones de Otoniel, es el predio que en 1999 le adjudicó a Juan de Dios Úsuga el extinto Instituto Colombiano de la Reforma Agraria (Incora). La finca fue entregada por la Nación para su explotación y registra su permanencia en Turbo (Antioquia), el mismo lugar donde el 15 de septiembre de 1971 nació el jefe del Clan del Golfo.
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Con esa prueba, la defensa de Juan de Dios Úsuga quiso probar sus actividades campesinas y la manera en que adquirió, entre 2009 y 2011, cinco fincas en Necoclí (Antioquia). No obstante, el Juzgado encontró que la adquisición de esos bienes coincide con la expansión del Clan por el Urabá y que el adulto mayor no pudo probar que sus actividades de agricultura, ganadería y comercio informal le dieron fondos suficientes para obtener las tierras. La defensa de Úsuga respondió al Juzgado que su representado, incluso, está inscrito en la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegan).
Ana Celsa David de Úsuga, madre de Otoniel, también perdió una cuenta en Bancolombia, una cuenta en Caja Social, un lote en Carepa (Antioquia) y un lujoso apartamento, con su respectivo garaje, en el barrio Robledo en Medellín. David de Úsuga aseguró pertenecer al Comité de Ganaderos de Necoclí y que sus antiguas propiedades son fruto de un arduo trabajo en el campo. El Juzgado encontró que, a pesar de que en 2012 inició a comprar los numerosos bienes, en su cuenta de banco solo tenía $5 millones.
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María Rubiela Úsuga David, hermana de Otoniel, logró quedarse con un lote en Necoclí. La Fiscalía argumentó que se hizo públicamente con la propiedad en 2008 y que no tenía como reportar que, para esa fecha, tuviese actividades comerciales u obligaciones financieras que soporten la adquisición. María Rubiela Úsuga también cuenta con una certificación por parte de Fedegan, expedida el 15 de septiembre de 2015.
El expediente soporta que, a la fecha, María Rubiela Úsuga es una ciudadana común. Para 1996, está acreditado que trabajaba en el chance para la empresa de apuestas Gana S.A. “Ellos llegaron al pueblo y pusieron una tiendecita, después la acabaron no sé porque, y a doña Rubiela la conocí trabajando en la agencia de chances, trabajó como 6 o 7 años”, dijo un testigo. Obtuvo su vivienda en 2004, dos años antes de que se fundara la primera organización que dio vida al Clan del Golfo (Los Urabeños). La señora María Úsuga quedó libre en el expediente y es una empresaria del Urabá que trabaja en aves de corral, carnes, pescados y productos de mar.
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Por otro lado, los conocidos de Ana María Gómez David quizás se preguntaron como es que ella, con apenas 23 años, en 2012, ya era propietaria de un apartamento, un garaje y un cuarto útil en el edificio Barú, también en el barrio Los Colores. Diez años después, la respuesta es clara: se benefició de las rentas criminales del Clan del Golfo, dado que su madre, Lody Amparo David, es prima de Nini Johana Úsuga, alias La Negra y hermana de Otoniel. Y por si fuese poco, su padre, Joaquín Orlando Gómez, alias Joaco, está procesado por concierto para delinquir, lavado de activos y porte de armas, como posible miembro del Clan del Golfo.
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