Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
La Fiscalía y la Sala de Instrucción de la Corte Suprema indagan desde hace casi tres años lo que ha declarado la excongresista Aida Merlano sobre una posible vinculación de la familia Char en el esquema de compra de votos que la llevó a ella al Congreso. Sin embargo, según fuentes cercanas al proceso, la condenada excongresista, quien permanece en Venezuela, no ha entregado pruebas de corrupción a ninguna autoridad, más allá de su palabra.
(Lea también: Lo que ya se sabía, lo que no y lo que falta de las declaraciones de Aida Merlano)
Aida Merlano le aseguró a la Corte Suprema en una extensa declaración que los Char financiaron su campaña y toda la estratagema de corrupción electoral que la llevó, en 2018, a conseguir una curul en el Senado. Si bien la Sala de Instrucción de la Corte ya tiene en su poder fotos y chats que muestran la intimidad que existía entre la exrepresentante y el precandidato presidencial Alex Char, una fuente que tiene cómo saberlo dijo que eso fue todo lo que entregó Merlano.
La excongresista aseguró en su versión que tenía egresos, pagarés y cheques. Sin embargo, además de las fotos y conversaciones románticas, lo único que se conoce hoy es un video de cámaras de seguridad. Según ella, probaría que Alejandro Char le entregó $500 millones para su campaña a la Cámara en 2014. La grabación que se conoce hasta el momento no muestra a Char y, según la fuente, es la única que existe.
(Le puede interesar: Los lazos políticos de la casa Char con Aida Merlano)
En la Fiscalía han tenido el mismo problema. Si bien desde 2019 el ente investigador abrió una indagación para esclarecer los dichos de Aida Merlano, a la fecha no ha arrojado resultados. La excongresista tampoco ha allegado evidencias a ese proceso y, si bien recientemente le pidió al fiscal del caso que la escuche en ampliación de denuncia, en el búnker esperarán a que la Corte Suprema les allegue copia de lo que declaró y entregó la mujer en la Sala de Instrucción.
Además, para las personas al frente de la investigación parece que la excongresista no ha dicho nada nuevo frente a lo que ha declarado desde 2019. En últimas, el problema es que, si bien las declaraciones de Merlano hablan de todo un ramillete de delitos, desde coimas en contratos a compra de votos y hasta un intento de asesinarla, “los testimonios, por sí solos, no consiguen una condena”, según comentó una fuente cercana al proceso.
(Lea también: La “cadena de corrupción” en el Inpec tras la fuga de Aida Merlano)
Por ahora, en la Fiscalía están recopilando y analizando toda la información que ha salido en medios de comunicación, como la entrevista que dio Aida Merlano en la revista Cambio. Allí aseguró: “Yo solo espero que la Justicia sea igual para mí que para ellos. No son solo los Char. Pero quiero que paguen por mi secuestro, mi intento de homicidio y por la violación que hasta hoy ha dejado secuelas serias en mi vida emocional”.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.