El Espectador le explica el caso de Nicolás Petro Burgos
El diputado y también hijo del presidente Gustavo Petro, aunque no aceptó cargos, se comprometió a colaborar con la justicia después de escuchar paso a paso los argumentos que tiene la Fiscalía. ¿Qué sigue?
Edwin Bohórquez Aya
Es miércoles, día de El Espectador le explica. ¿Por qué Nicolás Petro Burgos, diputado por la Asamblea del Departamento del Atlántico, fue capturado por la Fiscalía? ¿Qué tenía que ver su exesposa, Daysuris Vásquez, también detenida por el ente investigador, en este caso que tiene en el ojo del huracán al hijo del presidente Gustavo Petro? ¿Por qué aparecen los nombres de Alfonso del Cristo Hilsaca Eljadue, más conocido como el Turco Hilsaca, relacionado con masacres en alianza con paramilitares; y el de Santander Lópesierra, nombrado en expedientes judiciales como el Hombre Marlboro; en medio de este proceso? Pues este boletín es un resumen, construido con la ayuda de las redacciones de Judicial y Política, de un caso que va tomando forma y en el que, a pesar de que Petro Burgos no aceptó cargos este martes, sí se comprometió a colaborar con la Fiscalía al ofrecer “nuevos hechos y situaciones que ayudarán a la justicia”. Recuerden entrar a todos los enlaces que dejaremos a continuación. Comencemos.
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Es miércoles, día de El Espectador le explica. ¿Por qué Nicolás Petro Burgos, diputado por la Asamblea del Departamento del Atlántico, fue capturado por la Fiscalía? ¿Qué tenía que ver su exesposa, Daysuris Vásquez, también detenida por el ente investigador, en este caso que tiene en el ojo del huracán al hijo del presidente Gustavo Petro? ¿Por qué aparecen los nombres de Alfonso del Cristo Hilsaca Eljadue, más conocido como el Turco Hilsaca, relacionado con masacres en alianza con paramilitares; y el de Santander Lópesierra, nombrado en expedientes judiciales como el Hombre Marlboro; en medio de este proceso? Pues este boletín es un resumen, construido con la ayuda de las redacciones de Judicial y Política, de un caso que va tomando forma y en el que, a pesar de que Petro Burgos no aceptó cargos este martes, sí se comprometió a colaborar con la Fiscalía al ofrecer “nuevos hechos y situaciones que ayudarán a la justicia”. Recuerden entrar a todos los enlaces que dejaremos a continuación. Comencemos.
Vamos con la noticia antes de explicar el contexto. “A las 6 de la mañana de este sábado 29 de julio, la Fiscalía capturó a Nicolás Petro, hijo del presidente Gustavo Petro, y a su expareja, Daysuris Vásquez. El primero tendrá que responder por los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito, mientras la segunda será imputada por lavado de activos y violación de datos personales”. Sí, directo y claro. Así fue el primer párrafo de una de las noticias políticas y judiciales más importantes de este país y con la que abría nuestra edición digital cuando muchos hasta ahora estaban despertando. El mismo primer mandatario escribió en su cuenta de red social: “Como persona y padre me duele mucho tanta autodestrucción y el que uno de mis hijos pase por la cárcel; como presidente de la República, aseguro que la Fiscalía tenga todas las garantías de mi parte para proceder, de acuerdo a la ley. A mi hijo le deseo suerte y fuerza. Que estos sucesos forjen su carácter y pueda reflexionar sobre sus propios errores. Como afirmé ante el fiscal general, no intervendré ni presionaré sus decisiones; que el derecho guíe libremente el proceso”. Pero, ¿cómo llegamos hasta aquí?
Ahora sí, vamos un poco atrás para poder entender de dónde venimos. La primera hoja de esta historia pública se escribió el 2 de marzo de este año, cuando Gustavo Petro Urrego le hizo una petición a la Fiscalía que sorprendió a todo el país: “El 7 de agosto pasado hice un compromiso con los colombianos y colombianas. Tengo la responsabilidad de ser leal al voto que muchos de ustedes depositaron en mí. Debido a la información que se rumora en la opinión pública sobre mi hermano y mi hijo mayor, le pido a la Fiscalía General de la Nación adelantar todas las investigaciones necesarias y determinar posibles responsabilidades”, escribió en un comunicado de prensa.
Horas más tarde la protagonista era Daysuris Vásquez o Day Vásquez, como la empezó a referenciar el país, y quien para ese momento ya era la expareja de Nicolás Petro. Ella aseguró en una entrevista en la revista Semana, que fue testigo de la entrega de dinero del “controvertido empresario el Turco Hilsaca y el exnarcotraficante alias el Hombre Malboro” a Nicolás Petro. ¿Qué dijo en detalle? Que quien para ese momento era su pareja sentimental, recibió “dineros de personas que han tenido un pasado un poco oscuro. Del señor (Samuel) Santander Lópesierra (alias el Hombre Marlboro). Estuvo extraditado 20 años (condenado por narcotráfico y conspiración). Eso lo sabe todo el mundo y ahora aspira a la Alcaldía, si no estoy mal, de Maicao (La Guajira). Nicolás le recibió dinero a ese señor, más de $600 millones para la campaña del papá. Eso nunca llegó legalmente a la campaña porque él se quedó con ese dinero, y así otros. A un señor de Cartagena, el Turco Hilsaca, creo que se llama; también le recibió en mi apartamento”.
“En 2019, Petro Burgos aspiró a la Gobernación del Atlántico, por el partido de Gustavo Petro, Colombia Humana, y obtuvo el 18,56% de los votos (191.302). Fue derrotado por Elsa Noguera, quien se hizo con el 66,67 % de los votos (687.101). Los resultados le permitieron ocupar una curul en la Asamblea Departamental, cargo que ejerce actualmente”: Redacción Política de El Espectador
Se refería a que supuestamente Nicolás Petro recibió $ 400 millones que, según ella, tampoco entraron a la campaña, y que “provenían de uno de los personajes más controvertidos de Cartagena: Alfonso el Turco Hilsaca, procesado en 2009 por el asesinato de un comerciante, investigado por nexos con la banda criminal los Rastrojos y hasta llamado a indagatoria por la masacre de la Torre del Reloj, en Cartagena, en la que fueron asesinadas cuatro prostitutas, en 2003″, nos recordó la redacción Judicial.
Fue enfática en que tenía pruebas, audios, chats para corroborar su denuncia. Que también sabía de dineros que Petro Burgos le había recibido a empresarios de Cúcuta y hasta una camioneta de lujo a un “megacontratista” de Villavicencio. La razón, según Vásquez, era que todos esos ingresos serían usados para comprar una casa de $1600 millones. Pero también se rumoraba que ese dinero tendría como objetivo conseguir beneficios o “favores” en medio de la llamada “paz total”, para que personas con prontuario se pudieran colar y así obtener beneficios judiciales. “En un comunicado público, Nicolás Petro aseguró que nunca ha estado vinculado al proceso de paz total, “ni antes, ni durante, ni posterior a la campaña electoral” y negó haberse reunido o recibido “ningún tipo de favor” de personajes cuestionables”, escribieron los colegas de la sección Judicial.
Y entonces, como si se estuviera escribiendo una crónica roja de expediente judicial, empezaron a aparecer nombres, declaraciones, rostros en la pared donde el aparato investigador empezó a construir el caso y a hacer conexiones:
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La Fiscalía, al día siguiente, informó que ya había tomado cartas en el asunto: “Se conformó un grupo de fiscales, investigadores y expertos que se dirigieron a Barranquilla (Atlántico) y ya iniciaron las primeras diligencias con la señora denunciante Day Vásquez, que públicamente ha suministrado información sobre el tema”, informaron en un comunicado. Además, “aseguró que están haciéndole un estudio de seguridad a la expareja de Nicolás Petro para determinar si es necesario proveerle protección, luego de que la mujer asegurara que teme por su vida”, explicaron los colegas de la redacción Judicial.
Entonces, ¿en qué página iba la historia? La Procuraduría había anunciado investigación, la Fiscalía también y el Consejo Nacional Electoral entró en escena. Su tarea estaba enfocada en indagar si los dineros en cuestión entraron o no a la campaña presidencial de Gustavo Petro. El Turco Hilsaca dijo que no había entregado nada ni a la campaña ni a Nicolás Petro. Máximo Noriega era otro salpicado, pues según Day Vásquez “la plata que entregaban se la daban a Noriega. El señor (Samuel Santander Lópesierra) nunca le entregó nada directamente a Nicolás, todo fue a través de él. Que yo sepa hizo más de tres entregas de dinero”. Noriega fue concejal de Barranquilla y fue una de las personas que trabajó impulsando la candidatura del presidente Gustavo Petro en el Atlántico.
El 4 de marzo, porque el escándalo iba creciendo como bola de nieve, Colombia se enteró de la existencia de chats en donde Nicolás Petro, al parecer, se refería a conversaciones con varios ministros del Gobierno en busca de puestos de trabajo en entidades públicas. “Prada me dio unos cupos”, se leía. Justo en ese instante el ministro del Interior era Alfonso Prada. El diputado por la Asamblea del Departamento del Atlántico también tenía conversaciones con “directores de departamentos, gobernadores y políticos, para, según los relatos, buscar distintos beneficios como contratos”.
Al día siguiente el hijo del presidente Gustavo Petro tuvo que tomar decisiones políticas y dio “un paso al lado de los procesos de la Colombia Humana, el Pacto Histórico y la campaña de Máximo Noriega a la Gobernación del Atlántico, hasta ratificar mi inocencia”. El mismo Nicolás Petro habló, en comunicado de prensa, del delicado tema de la plata: “Los dineros en cuestión no tienen procedencia ni de la mafia, ni de la corrupción, ni de ninguna actividad ilícita, eso lo corroboraré ante la justicia, como corresponde”.
Para el 7 de marzo Samuel Santander Lópesierra Gutiérrez, alias el Hombre Marlboro, zar del contrabando de licor y cigarrillos en los 90, condenado por narcotráfico en Estados Unidos, en un audio filtrado a medios de comunicación, dijo no tener cercanía con Petro papá. “Estos periodistas son unos terroristas, el 95% de la votación que tiene el presidente no lo conocen, yo jamás he hablado con él, yo estoy dentro de ese 95% de personas que votamos por convicción, porque creemos en el proyecto político, yo jamás he tenido ningún acercamiento con nuestro candidato”, dice en el audio revelado por RCN Radio. Day Vásquez, casi en paralelo, denunciaba amenazas en contra de su familia.
El presidente Gustavo Petro respondió al escándalo y habló de la relación con su hijo Nicolás. Apareció en el mapa el delito lavado de activos y ya era investigado por la Fiscalía. El protagonista de esta historia le respondía al fiscal general asegurando que no tenía garantías debido a las diferencias de su padre con Francisco Barbosa, y la Corte Suprema dejó claro sí existían tales garantías y consideró infundada la recusación:
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Y con este contexto llegamos a la noticia del sábado en la mañana, cuando la Fiscalía capturó a Nicolás Petro Burgos, “en medio de una investigación por los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito”. Ese día, también fue detenida su expareja, Daysuris Vásquez. ¿Qué seguía? Ambos “serán puestos a disposición de un Juez Penal Municipal con Función de Control de Garantías, a quien se le solicitará impartir legalidad a los procedimientos de allanamiento, captura e incautación de elementos materiales probatorios. De igual manera, se formulará imputación por los delitos ya citados y se solicitará una medida restrictiva de la libertad”, explicó la Fiscalía.
Petro Burgos era capturado por dos delitos: lavado de activos y enriquecimiento ilícito. Lo que se conocía hasta ese momento era que el político habría recibido dinero que supuestamente iba para la campaña de su padre, pero que se lo habría quedado para beneficio propio. Dinero de exnarcos. En el caso de Day Vásquez, se le acusa de lavado de activos y de violación de datos personales, pues además de reconocer públicamente que efectivamente recibieron dineros, los investigadores indagaban si ilegalmente accedió a información personal de una tercera persona también en busca de beneficio propio. Esa tercera persona sería la hoy pareja de Nicolás Petro.
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La redacción de Política nos recordó que “el hijo mayor del presidente ha estado en líos con la Procuraduría y el Consejo Nacional Electoral por ocultar dineros que entraron a su campaña a la gobernación del Atlántico en 2019″. Y también enlistaron los que han sido considerados escándalos en su vida política: “En enero de este año se filtró una fotografía donde se veía a Nicolás Petro Burgos junto a Musa Abraham Besaile, hijo del exsenador del Partido de la U condenado por parapolítica, Musa Besaile”. Y luego, “en redes sociales circularon videos en los que se veía al hijo del primer mandatario ofreciendo una gran fiesta con personas cercanas a la casa Gerlein (salpicado en el escándalo de Aida Merlano) y al “Ñoño” Elías”. Para sumar, “el Consejo Nacional Electoral lo sancionó el 14 de marzo de este año, tras haber detectado que el ahora diputado, cuando intentó llegar a la gobernación del Atlántico en 2019, no reportó ante las autoridades el ingreso de $ 176 millones a su campaña”.
Mientras que avanzaba la imputación de cargos, se sabía que Máximo Noriega, salpicado en este escándalo judicial, seguía buscando su aval para poder inscribir su candidatura a la gobernación del Atlántico. La defensa de Nicolás Petro insistía en que no tenía garantías mientras era trasladado a la capital del país. Los capturados “fueron legalizados por el Juzgado 75 Penal de Control de Garantías de Bogotá” y se empezaron a conocer detalles: “Al momento de la detención de Petro Burgos y el allanamiento a su casa en Barranquilla, la Fiscalía encontró en el inmueble $25 millones en efectivo, que ahora la defensa del diputado del Atlántico por Colombia Humana pide que sean devueltos”. Argumentan que son para el cuidado del embarazo de su actual pareja Laura Ojeda. Pero la Fiscalía cree que ese dinero puede estar relacionado con los delitos por los que lo están investigando. A la par, Daysuris del Carmen Vásquez Castro, la otra capturada, sí estaría negociando con la Fiscalía. Se sabía que la audiencia de imputación quedaba programada por el juez 75 de Control de Garantías para el martes 1° de agosto a las 8:00 a.m. en donde se vincularía formalmente a Petro Burgos y Vásquez a la investigación, mientras la defensa de Petro Burgos pedía que no se hiciera en el mismo lugar con Day Vásquez y tampoco en el corazón de la Fiscalía.
Muchos protagonistas de la política nacional se lanzaron a opinar sobre el proceso en contra del hijo del presidente, cómo esto afectaba al Pacto Histórico y por supuesto al Gobierno, además de ser un hecho que toca directamente a la familia presidencial. La oposición también reaccionó.
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De acuerdo con el abogado de la defensa de Nicolás Petro, Juan Trujillo, los funcionarios de la Fiscalía que capturaron a Nicolás Petro “lo habrían grabado a él y a su actual pareja, Laura Ojeda, desnudos el pasado fin de semana, durante las diligencias de allanamiento”. Lo que se escucha en un audio con la voz de Ojeda es: “Tengo ocho meses y en cualquier momento puedo dar a luz. No tuvieron en cuenta. Según ellos tocaron, pero no tocaron. Forzaron la puerta y entraron a la habitación. En ese momento estaba durmiendo, estaba desnuda y Nicolás estaba en el baño. Se iba a duchar y ellos entraron grabando. Grabaron a Nicolás también desnudo. Me grabaron a mí durmiendo. Cuando yo dije: ¿Qué pasa? Que detuvieran las grabaciones. Sin embargo, no dejaron de grabar y me tuve que cambiar prácticamente delante de ellos”.
Claudia Patiño, esposa de Máximo Noriega, se inscribía como candidata a la Gobernación del Atlántico, pues la Colombia Humana le revocó a el aval a su esposo; Juan Fernando Petro, nos contaba la sección Política, quien también está siendo investigado por la justicia, “se pronunció sobre la captura de su sobrino y confirmó que jugó un papel protagónico en la campaña de Gustavo Petro en Barranquilla”; Yesid Reyes Alvarado se preguntaba si estaba bien capturar a alguien para imputarle un delito, y el editorial de El Espectador recordaba que lo más importante en este caso del hijo del presidente es que las instituciones puedan actuar de manera autónoma y sin intervenciones indebidas.
Y así llegamos a la audiencia de imputación de cargos. “El fiscal del caso, Mario Burgos, señaló que el actual diputado por el Atlántico tuvo gastos en establecimientos de comercio, desde su cuenta de ahorros, “por $157′229.686 en marcas como Ferragamo y Carolina Herrera”. Pero, en otras palabras y para los ciudadanos de a pie, ¿qué era lo que les decía a los investigadores ese monto? “El fiscal Burgos hizo hincapié en que Nicolás Petro es un funcionario público y trabaja para la Asamblea del Atlántico como diputado. Después de investigar la actividad económica del hijo del presidente, la Fiscalía encontró que su única fuente de ingresos era el sueldo que recibía de la Asamblea, que entre 2021 y 2023, tuvo un promedio de $20 millones mensuales. Sin embargo, Nicolás Petro, en las cuentas del ente investigador, ostentaba la vida de quien tiene ingresos mensuales por hasta $200 millones”. Ahí está el asunto. Diez veces más de lo que ganaba.
Otros movimientos elevados despertaron el interés de la Fiscalía. En el 2022 recibió ingresos por un total de $251 millones, pero tendría gastos por hasta $1.600 millones. Cuando detallaron, salió a flote el pago de un arriendo de un apartamento por $23 millones y también la renta de una mansión en el condominio La Herradura, de Puerto Colombia (Atlántico), que costó $56 millones. Pero la cosa iba más allá. Habría pagado la cuota inicial de dicha casa, un monto valorado en $696 millones. Además de otras dos compras importantes que habría hecho: una casa por $334 millones en Tubará (Atlántico) y un carro Mercedes Benz por un valor de $200 millones.
¿Qué se dijo sobre el lavado de activos? “Para sustentar los bienes adquiridos y por adquirir, imputó la Fiscalía, Nicolás Petro habría intentado blanquear los cientos de millones recibidos. Por ejemplo, la casa en el municipio de Tubará habría sido colocada a nombre de Cesar Emilio Vásquez, tío de Day Vásquez. Fue la misma persona que, en los papeles, intentó comprar la mansión de $1.600 millones en el condominio de Barranquilla. Y el Mercedes Benz de $200 millones al parecer quedó a nombre de una ciudadana de nombre Blanca Isabel Gutiérrez Zuleta”, explicaron los colegas que siguieron minuto a minuto la audiencia. A Day Vásquez la acusaron de “espiar a Laura Ojeda, la nueva pareja de Nicolás Petro. Vásquez, imputada también por lavado de activos, habría hecho toda una carrera en 2022 para averiguar desde cuándo su exesposo habría iniciado a hablar con Ojeda. Para ello, imputó Burgos, hackeó el celular de la nueva pareja de Petro y accedió a la totalidad de sus datos biográficos, de su actividad laboral, de sus antecedentes penales, así como registros de llamadas entrantes y salientes”.
Para el ente acusador, no se sabe de dónde salieron $1.053′911.056, porque no hay reportes que los relacionen. Este dinero, dice la Fiscalía, “no es fruto de su trabajo, sino de los constantes ingresos que evidenció Daysuris Vásquez Castro. Ingresos clandestinos e irregulares de dinero desde 2021 hasta finales de 2022, que hoy en día se actualizan con el dinero encontrado en su casa”.
Aunque el fiscal les advirtió que aceptar responsabilidad les permitiría acceder a una reducción de su posible condena a la mitad, también les recordó que si llegaban a ser vencidos en juicio, podrían pasar años privados de su libertad o bajo libertad condicional, no sin antes también argumentar que Day Vásquez “tiene interés de seguir ayudando con la investigación, dado que tendría información sobre dineros irregulares que habrían entrado a campañas políticas y a negocios bajo cuerda con contratistas”. Entre tanto, Nicolás Petro dijo que no aceptaba cargos, pero….
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“Lo hago por mi familia y por mi bebé que viene en camino”: Nicolás Petro
“Quiero anunciar a Colombia que hemos decidido iniciar un proceso de colaboración donde me referiré a nuevos hechos y situaciones que ayudarán a la justicia. Lo hago por mi familia y por mi bebé, que viene en camino. Muchas gracias, señor juez”, señaló Nicolás Petro Burgos.
Sí, que Nicolás Petro tomara la decisión de colaborar fue un giro inesperado, argumentando que lo hace por su familia, su bebé. Por ahora lo que no se ha podido establecer en toda esta ecuación es si este flujo de dinero tendría relación o no con el supuesto pago de exnarcos para beneficiarse de la paz total. Lo han negado. Lo que sí parece evidente es que, por la exposición de motivos de la Fiscalía, los dineros que habría recibido Nicolás Petro se quedaron, como lo dijo Day Vásquez desde el comienzo, en los propios bolsillos de su entonces pareja sentimental y con quien hoy está respondiendo ante la justicia. Aunque todo puede cambiar, como ya nos ha demostrado este proceso.
El caso va a seguir creciendo porque los dos acusados le entregarán información, se cree, de valor a la Fiscalía. Que ahí se podría establecer si llegaron o no dineros a la campaña presidencial. “Nicolás Petro Burgos aceptó cooperar con la justicia. Información sobre corrupción política en la costa Caribe y movimientos de dinero en la campaña de Gustavo Petro son el salvavidas con el que él y su expareja buscan negociar con la Fiscalía”, escribió Jhordan C. Rodríguez. “Fuentes cercanas al caso le contaron a El Espectador que el miembro de la familia presidencial revelaría información sobre una supuesta red corrupta en la contratación en la Asamblea del Atlántico que envuelve a grandes clanes políticos de la costa Caribe”. También escribió allí que “fuentes cercanas a Vásquez le aseguraron a este diario que, aunque en marzo de este año ella dijo públicamente que el dinero de exnarcos nunca entró a la campaña de Gustavo Petro, realmente sí habría sido utilizada para pagar gastos logísticos, un rubro que normalmente no entra en las cuentas oficiales de campaña, pues se usa para alquiler de sillas y otros asuntos por el estilo”.
Para agregarle otro capítulo a esta complicada historia, se conoció un audio entre Andrea Petro, hija mayor del presidente Gustavo Petro, y Nicolás Petro Burgos: “Soy la única que se está quemando hasta el puto lomo para que no te metan en la cárcel Nicolás”. Andrea Petro ya reconoció en sus redes sociales la existencia de esta comunicación. “Madura un poquito, madura de verdad. Jódete solo. Lo siento, pero ahora te jodes solo. Yo te quise sacar de ese hueco en el que te metiste, no quisiste y ahora te jodes todo”, se escucha en otra de las frases de la mujer. La misma Andrea Petro, en una red social, escribió: “Grave que se metan en una conversación personal entre mi hermano y yo donde discutíamos y publiquen de manera poco convencional la discusión. Era privado. Nunca más volví a hablar desde ese día con mi hermano y eso parte el corazón. Yo a él lo amo y lo sabe”.
Entre apoyo al presidente y críticas: el mundo político reacciona a caso Nicolás Petro
¿En qué vamos? En que justo este miércoles renunció el abogado principal de Nicolás Petro por lo que consideró era una “diferencia de criterios que impiden que siga al frente del caso”, escribió el mismo abogado, Juan Trujillo. “Todo indica que Nicolás Petro será representado por David Teleki, quien era abogado suplente de Trujillo. Se espera que, en una próxima audiencia en la Fiscalía, durante esta semana, Nicolás Petro concrete su compromiso de colaborar con la justicia y entregue nombres de implicados en delitos relacionados con los que le imputaron”, escribió la sección Judicial.
También en que, de acuerdo con Daniel Coronell, un agente encubierto que al parecer era del esquema de seguridad de Nicolás Petro Burgos, fue el encargado de recopilar información para dejarla a disposición de la Fiscalía, entre ella fotos, videos y grabaciones; la misma entidad de investigación lo negó: “No es cierto que se haya utilizado la técnica especializada de agente encubierto dentro del esquema de seguridad del señor Petro Burgos. Todas las actuaciones establecidas en este proceso se enmarcan en procedimientos legales y constitucionales vigentes”. Según fuentes consultadas por El Espectador, hubo seguimientos, pero no agente encubierto, pues son dos figuras distintas.
Nicolás Petro: el escándalo que puso a tambalear el petrismo de cara a elecciones
Este miércoles el presidente Gustavo Petro, al presentar ante la Corte Suprema su terna para suceder a Francisco Barbosa en la Fiscalía General, también le pidió al alto tribunal que cuando llegue la nueva cabeza del ente investigador, se nombre un fiscal ad hoc para adelantar la investigación de su hijo o cualquier tipo de proceso que pueda existir en contra de los miembros de su familia. Es decir, explicaron los colegas de Judicial, un fiscal que no haya sido postulado por él con el fin, según las palabras del primer mandatario, de que “no haya duda de la transparencia de las investigaciones”.
Se sabe, por ahora, que el fiscal Burgos iba a solicitar una medida intramural para los dos acusados. Pero existe la posibilidad de que se llegue a una negociación y eso haga cambiar de opción. Este jueves se reanudará la audiencia -que pueden seguir en vivo en este enlace-, el país está atento a conocer qué información nueva aportarán tanto Nicolás Petro Burgos como Daysuris Vásquez, si llegaron dineros oscuros a la campaña de Gustavo Petro, si es verdad que se buscaban cupos en la paz total, si el hijo del presidente actuó solo y para su propio beneficio económico. Lo más importante de todo es que la justicia cumpla con su trabajo y que el país pueda conocer toda la verdad.
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