“No aceptamos el chantaje”: Petro ante hechos violentos en Tuluá

El presidente Gustavo Petro aseguró en su cuenta de Twitter que el Gobierno no se dejará chantajear por la banda delincuencial La Inmaculada, responsable al parecer de los hechos de violencia que se presentaron la noche de este sábado 10 de febrero en el municipio de Tuluá (Valle del Cauca). En estos hechos, hubo atentados contra dos agentes de tránsito (uno falleció) y varios vehículos fueron incinerados.

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Según han reportado las autoridades, estos hechos los estaría cometiendo esta banda criminal en respuesta a la captura de Mauricio Marín Silva, alias Nacho, quien sería el máximo cabecilla esa organización y quien además es hermano de Pipe, quien está preso y también sería uno de los líderes. Por eso el presidente Gustavo Petro escribió. “La banda la inmaculada ha retado a la sociedad. Sus jefes están presos. No aceptamos el chantaje”.

Ante la situación, el alcalde, Gustavo Vélez, tomó la decisión de declarar toque de queda desde las 11 de la noche y de militarizar la ciudad, mientras que 120 uniformados llegaron al municipio para reforzar la seguridad. Además, en las próximas horas se adelantará un consejo de seguridad en el municipio.

“Hemos tomado la decisión de militarizar la ciudad y de hacer el decreto de toque de queda para que, a partir de las 11 de la noche, opere en el municipio. Hemos tenido el apoyo de las instituciones: Gobierno Nacional; Gobierno departamental, a través de la gobernadora, Dilian Francisca Toro; y de la Policía y del Ejército. Seguimos trabajando para superar estos obstáculos que nos generan intranquilidad a los ciudadanos”, apuntó en su cuenta de X.

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Por su parte, la gobernadora del departamento, Dilian Francisca Toro, envió este mensaje a la ciudadanía en horas de la noche: “Los delincuentes están reaccionando violentamente en Tuluá por la captura de sus cabecillas y las medidas que hemos tomado. No van a pasar por encima de las instituciones, estoy coordinando con Gustavo Vélez, la Policía del Valle del Cauca y la Tercera División del Ejército Nacional para que, de inmediato, garanticemos el orden público en Tuluá. A la ciudadanía, le pedimos que permanezcan en sus casas porque se ha decretado el toque de queda a partir de las 11 pm del 10 de febrero y que denuncien cualquier actividad que tienda a alterar el orden público ¡Juntos ganaremos la batalla a los delincuentes!”.

Mauricio Marín Silva alias Nacho y había sido capturado en 2019, en Buga (Valle del Cauca), luego de que lo imputaron por los delitos de tráfico de estupefacientes, homicidio y concierto para delinquir. Sin embargo, fue dejado en libertad en diciembre del 2022 por vencimiento de términos. Tras quedar en libertad, alias “Nacho” habría tomado el mando de la organización criminal, encargándose de sus operaciones. Además, Marín Silva es acusado de “la ejecución de homicidios connotados como mecanismo para ejercer presión al Gobierno Nacional y a la administración municipal de Tuluá, y asegurar su vinculación en un eventual proceso de diálogo socio jurídico”, indicó la Policía.

Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.

El presidente Gustavo Petro aseguró en su cuenta de Twitter que el Gobierno no se dejará chantajear por la banda delincuencial La Inmaculada, responsable al parecer de los hechos de violencia que se presentaron la noche de este sábado 10 de febrero en el municipio de Tuluá (Valle del Cauca). En estos hechos, hubo atentados contra dos agentes de tránsito (uno falleció) y varios vehículos fueron incinerados.

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Según han reportado las autoridades, estos hechos los estaría cometiendo esta banda criminal en respuesta a la captura de Mauricio Marín Silva, alias Nacho, quien sería el máximo cabecilla esa organización y quien además es hermano de Pipe, quien está preso y también sería uno de los líderes. Por eso el presidente Gustavo Petro escribió. “La banda la inmaculada ha retado a la sociedad. Sus jefes están presos. No aceptamos el chantaje”.

Ante la situación, el alcalde, Gustavo Vélez, tomó la decisión de declarar toque de queda desde las 11 de la noche y de militarizar la ciudad, mientras que 120 uniformados llegaron al municipio para reforzar la seguridad. Además, en las próximas horas se adelantará un consejo de seguridad en el municipio.

“Hemos tomado la decisión de militarizar la ciudad y de hacer el decreto de toque de queda para que, a partir de las 11 de la noche, opere en el municipio. Hemos tenido el apoyo de las instituciones: Gobierno Nacional; Gobierno departamental, a través de la gobernadora, Dilian Francisca Toro; y de la Policía y del Ejército. Seguimos trabajando para superar estos obstáculos que nos generan intranquilidad a los ciudadanos”, apuntó en su cuenta de X.

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Por su parte, la gobernadora del departamento, Dilian Francisca Toro, envió este mensaje a la ciudadanía en horas de la noche: “Los delincuentes están reaccionando violentamente en Tuluá por la captura de sus cabecillas y las medidas que hemos tomado. No van a pasar por encima de las instituciones, estoy coordinando con Gustavo Vélez, la Policía del Valle del Cauca y la Tercera División del Ejército Nacional para que, de inmediato, garanticemos el orden público en Tuluá. A la ciudadanía, le pedimos que permanezcan en sus casas porque se ha decretado el toque de queda a partir de las 11 pm del 10 de febrero y que denuncien cualquier actividad que tienda a alterar el orden público ¡Juntos ganaremos la batalla a los delincuentes!”.

Mauricio Marín Silva alias Nacho y había sido capturado en 2019, en Buga (Valle del Cauca), luego de que lo imputaron por los delitos de tráfico de estupefacientes, homicidio y concierto para delinquir. Sin embargo, fue dejado en libertad en diciembre del 2022 por vencimiento de términos. Tras quedar en libertad, alias “Nacho” habría tomado el mando de la organización criminal, encargándose de sus operaciones. Además, Marín Silva es acusado de “la ejecución de homicidios connotados como mecanismo para ejercer presión al Gobierno Nacional y a la administración municipal de Tuluá, y asegurar su vinculación en un eventual proceso de diálogo socio jurídico”, indicó la Policía.

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