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Por medio de redes sociales, la subintendente de la Policía Sandra Marín, adscrita a la Policía Metropolitana de Barranquilla, denunció un presunto caso de acoso laboral y psicológico por parte de un superior de la institución. La uniformada aseguró que, tras no haber accedido a las propuestas sexuales de un coronel, estaría siendo víctima de acoso.
“He venido sufriendo acoso laboral, acoso psicológico; mis hijas se encuentran afectadas por esto, tanto ha sido todo lo que me está ocurriendo que me he tenido que retirar de la Policía, solicitar mi retiro”, aseguró la uniformada Marín a través de un video.
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Según la información que se conoce al momento, quien estaría ejerciendo el acoso en contra de la uniformada es el teniente coronel Wilson Fernando Carvajal, actual comandante operativo de la Policía en la capital de Atlántico.
“He buscado a los agentes competentes como la Defensoría, la Oficina de la Mujer, la Defensoría del Pueblo, la Procuraduría. Hace un tiempo he estado acosada por un señor coronel que me propuso acostarme con él”, dijo.
Ante su negativa, el teniente coronel Carvajal envió a la oficial que ejercía como su jefe directa para que ejerciera el acoso laboral. “De todas estas cosas que estoy diciendo, tengo cada una, pruebas, testigos, documentos, fotos, videos”, aseguró Marín.
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Las respuestas de la Policía
Tras la amplia difusión de la denuncia en redes sociales, la Policía Metropolitana de Barranquilla se pronunció sobre el caso. El coronel Edwin Urrego, comandante la institución en esa ciudad, aseguró que ya activaron la ruta sugerida para atender ese tipo de situaciones de acoso.
“Se ha ordenado de manera inmediata la activación de la ruta de violencia contra la mujer y de género, así como de apoyo psicosocial”, aseguró el coronel.
También señaló que desde el pasado 7 de noviembre hay un proceso de traslado de la uniformada a la ciudad de Cali (Valle de Cauca), que no se ha ejecutado por solicitud de ella misma. “No se ha hecho efectivo toda vez que ha solicitado una derogación por caso especial”, señaló.
Al respecto, la subintendente Marín expresó en redes sociales que el traslado a la ciudad de Cali tiene importantes implicaciones familiares que no han sido resueltas, toda vez que tiene a su cargo a su madre y dos hijas menores de edad.
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Este no es el primer caso de denuncias de uniformadas sobre situaciones de acoso por parte de sus superiores. En mayo de este año se conoció que un fiscal seccional de Cundinamarca formuló cargos por el delito de acoso sexual a dos militares.
Se tratan del mayor Jhonier Cardona Ramírez, acusado por cinco agentes de Policía de haberse sobrepasado con “tocamientos abusivos y propuestas indecentes, aprovechándose de su cargo como comandante del distrito de Ubaté, Cundinamarca”.
El segundo proceso se dio en contra del subintendente Luis Darío Niño Alfonso, comandante de la estación de Policía de Fúquene, en el mismo departamento. Dos uniformadas lo señalaron de acosarlas sexualmente y amenazarlas con traslados injustificados en caso de no acceder a sus pretensiones.
Frente al caso de Marín, el coronel Urrego concluyó rechazando el hecho y asegurando que con la activación de la ruta de atención inicia también la investigación pertinente para aclarar el presunto caso de acoso en contra de la uniformada.
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