Policía dice que joven decapitado en Tuluá sería víctima de bandas de microtráfico
El comandante de la Policía en el Valle del Cauca señaló que existen audios que le darían fuerza a esa hipótesis sobre el homicidio de Santiago Ochoa. Además, señaló que la Fiscalía General será la encargada de determinar en qué circunstancias se perpetró el hecho.
El comandante de la Policía en el Valle del Cauca, coronel Jorge Urquijo Sandoval, señaló que el asesinato de Santiago Ochoa, el joven que fue decapitado en Tuluá, tendría que ver con bandas locales de trafico de drogas. “Las investigaciones van por buen camino, hay personas que ya hemos identificado. Nos referimos al joven Santiago Ochoa como una víctima de las actividades delincuenciales relacionadas con tráfico de estupefacientes”, afirmó el oficial en entrevista con Blu Radio.
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El uniformado, que es responsable de una de las zonas del país más convulsas en las últimas semanas, aseguró en diálogo con esa emisora que los responsables del crimen estaría la banda de Los Viejos o algunos de sus reductos que se han dispersado. “La única autoridad que se debe pronunciar con conclusiones contundentes es la Fiscalía, estamos apoyando las investigaciones. La hipótesis que estamos manejando es que se pudo tratar de un crimen de delincuencia común, sobre tráfico de estupefacientes”, sostuvo el oficial.
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Sobre este el asesinato del joven Ochoa también se pronunció el ministro de Defensa, Diego Molano, quié aseguró: “Que salgan a decir que el Esmad decapitó a un hombre sin ninguna prueba, sin ninguna información válida, sólo por manchar el hombre y el nombre de la Policía. Aquí uno puede actuar de cualquier forma, uno puede tener muchas diferencias ideológicas, pero lo que no puede afectar es una institución y el nombre de los policías de Colombia cuando siempre actúan por bien”.
Y agregó que “es muy fácil en las redes sociales decir mentiras que cabalgan rápido y vuelan por las redes sociales en segundos, pero a los funcionarios públicos, a la Policía Nacional le toca actuar con la verdad, buscando legitimidad, demostrando con hechos y siempre ha actuado nuestra Policía Nacional, por lo tanto respaldamos esta institución y condenamos los actos irresponsables que utilizan la mentira y la desinformación para afectar el buen nombre de nuestra Policía Nacional”: Ministro Diego Molano.
En lo que va de 2021 también se reportaron otros asesinatos de jóvenes y menores de 18 años que son reclutados por los grupos criminales del microtráfico, pero el hecho que más impactó se reportó a mediados de enero de 2021: la Policía informó que se encontró la cabeza de un hombre de 20 años con cuatro tiros. La víctima había sido decapitada con un machete, en hechos que aún no han sido esclarecidos. Sin embargo, no es la primera vez que se reportan decapitados en Tuluá. En junio de 2019 se encontraron otros dos cuerpos en ese mismo estado, en medio de la guerra entre las bandas criminales de La Inmaculada y la Santa Cruz.
En 2012 también se encontraron otros cuatro cuerpos sin cabeza, todos en hechos relacionados con las vendettas mafiosas de las bandas locales por el tráfico de drogas y las extorsiones, principalmente. En ese momento, las bandas criminales de Los Rastrojos (herederos del cartel del norte del Valle) y Los Paisas libraban su guerra aparte. Otro reciente episodio que también marca el influjo que tiene un sector de los tulueños con la mafia fue el asesinato de alias Beto Rentería en el municipio en septiembre de 2020. El hombre, antigua cabeza de ese cartel y enemigo de los hermanos Rodríguez Orejuela, había sido capturado en 2010 y regresó al país en 2018 sin que nadie se percatara.
El comandante de la Policía en el Valle del Cauca, coronel Jorge Urquijo Sandoval, señaló que el asesinato de Santiago Ochoa, el joven que fue decapitado en Tuluá, tendría que ver con bandas locales de trafico de drogas. “Las investigaciones van por buen camino, hay personas que ya hemos identificado. Nos referimos al joven Santiago Ochoa como una víctima de las actividades delincuenciales relacionadas con tráfico de estupefacientes”, afirmó el oficial en entrevista con Blu Radio.
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El uniformado, que es responsable de una de las zonas del país más convulsas en las últimas semanas, aseguró en diálogo con esa emisora que los responsables del crimen estaría la banda de Los Viejos o algunos de sus reductos que se han dispersado. “La única autoridad que se debe pronunciar con conclusiones contundentes es la Fiscalía, estamos apoyando las investigaciones. La hipótesis que estamos manejando es que se pudo tratar de un crimen de delincuencia común, sobre tráfico de estupefacientes”, sostuvo el oficial.
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Y agregó que “es muy fácil en las redes sociales decir mentiras que cabalgan rápido y vuelan por las redes sociales en segundos, pero a los funcionarios públicos, a la Policía Nacional le toca actuar con la verdad, buscando legitimidad, demostrando con hechos y siempre ha actuado nuestra Policía Nacional, por lo tanto respaldamos esta institución y condenamos los actos irresponsables que utilizan la mentira y la desinformación para afectar el buen nombre de nuestra Policía Nacional”: Ministro Diego Molano.
En lo que va de 2021 también se reportaron otros asesinatos de jóvenes y menores de 18 años que son reclutados por los grupos criminales del microtráfico, pero el hecho que más impactó se reportó a mediados de enero de 2021: la Policía informó que se encontró la cabeza de un hombre de 20 años con cuatro tiros. La víctima había sido decapitada con un machete, en hechos que aún no han sido esclarecidos. Sin embargo, no es la primera vez que se reportan decapitados en Tuluá. En junio de 2019 se encontraron otros dos cuerpos en ese mismo estado, en medio de la guerra entre las bandas criminales de La Inmaculada y la Santa Cruz.
En 2012 también se encontraron otros cuatro cuerpos sin cabeza, todos en hechos relacionados con las vendettas mafiosas de las bandas locales por el tráfico de drogas y las extorsiones, principalmente. En ese momento, las bandas criminales de Los Rastrojos (herederos del cartel del norte del Valle) y Los Paisas libraban su guerra aparte. Otro reciente episodio que también marca el influjo que tiene un sector de los tulueños con la mafia fue el asesinato de alias Beto Rentería en el municipio en septiembre de 2020. El hombre, antigua cabeza de ese cartel y enemigo de los hermanos Rodríguez Orejuela, había sido capturado en 2010 y regresó al país en 2018 sin que nadie se percatara.