¿Por qué aumentaron los cultivos de coca en 2021?: Esto dice la ONU
El año pasado se rompió la tendencia en la que venía Colombia de reducción de cultivos de uso ilícito y también aumentó la producción de cocaína, según la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito. La escasa implementación del Acuerdo de Paz es uno de los factores de este incremento exponencial.
En 2021, los cultivos de uso ilícito en Colombia aumentaron un 43% alcanzando máximos históricos, según reportó la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, UNODC. El mismo informe, que publica anualmente esta agencia multilateral, concluyó que el año pasado también aumentó la producción de cocaína en el país. ¿A qué se debió este incremento exponencial en el último año del gobierno de Iván Duque?
Las conclusiones del informe, que no alcanza a medir lo que va del gobierno de Gustavo Petro, rajan a Colombia en la tendencia que el país traía desde 2017: la reducción en las hectáreas cultivadas de coca. El informe sostiene que cuatro factores explican por qué el país había logrado reducir los cultivos de coca en los cuatro años previos a 2021 y asegura que otros tres factores explican el abrupto cambio del año pasado.
¿Cómo había logrado Colombia reducir los cultivos de coca?
Hasta 2020, la ONU había reconocido la “intervención sostenida” de Colombia contra los cultivos de uso ilícito. Entre ellos estaba, por ejemplo, la erradicación forzada manual o el plan de sustitución de cultivos que nació con el Acuerdo de Paz firmado con la antigua guerrilla de las Farc en 2016.
Precisamente, la ONU ha dicho en el pasado que otros dos factores que impulsaron la reducción de cultivos de coca fueron la implementación del Acuerdo de Paz y la salida de uno de los grupos armados que controlaba gran parte del negocio del narcotráfico. Y, finalmente, que con el Acuerdo se había fomentado la sustitución voluntaria de cultivos.
Hasta que las cifras mostraron un aumento nunca antes visto de la coca en 2021.
¿Por qué aumentaron los cultivos de coca?
El primer factor que explica el cambio de las cifras en 2021 es la reducción de la intervención. Es decir, en el último año del gobierno de Iván Duque se redujeron los esfuerzos para combatir los cultivos de coca.
Esto se nota, sobre todo, con la forma primordial de eliminar cultivos: la erradicación forzosa manual. En estos operativos, la Fuerza Pública acordona un sembrado de coca y arranca planta por planta con la mano y algunas herramientas. En 2021 esta forma de erradicación se redujo en un 21%.
Según las cifras de la ONU, en 2020 Colombia erradicó de manera manual 130.147 hectáreas de cultivos de coca. El año siguiente solo erradicó 103.257 hectáreas. Asimismo, en 2020 las operaciones se concentraron en el 35% del país. El año pasado solo se intervino el 31% del país.
El segundo factor que para la ONU explica el aumento de los cultivos de coca es el posicionamiento de nuevos grupos criminales. Este ha sido un proceso que se ha dado a largo plazo: de tres actores predominantes que controlaban este eslabón del negocio del narcotráfico, se pasó a alrededor de 60 en 2021.
Y, finalmente, la pandemia del COVID-19 profundizó la pobreza y la falta de oportunidades en muchos lugares de Colombia, a la vez que fue uno de los factores de devaluación del peso frente al dólar. Hoy, entonces, es mucho más atractivo cultivar coca o dedicarse a transformarla en pasta porque entra más dinero. Según el informe, el empleo que generan los cultivos de coca asciende a $53 millones y el que genera la venta de pasta asciende a $79 millones.
¿Qué se puede hacer?
El informe de la ONU le recomienda al gobierno actual, entonces, una serie de medidas con las que se podría frenar el incremento de los cultivos de coca. Entre ellas están: focalizar las acciones en zonas que todavía tienen pocos cultivos, ayudar a comunidades étnicas a salir del negocio de la mata de coca, así como impulsar una transformación de los territorios en donde persisten los cultivos para que se desarrollen comercialmente.
En 2021, los cultivos de uso ilícito en Colombia aumentaron un 43% alcanzando máximos históricos, según reportó la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, UNODC. El mismo informe, que publica anualmente esta agencia multilateral, concluyó que el año pasado también aumentó la producción de cocaína en el país. ¿A qué se debió este incremento exponencial en el último año del gobierno de Iván Duque?
Las conclusiones del informe, que no alcanza a medir lo que va del gobierno de Gustavo Petro, rajan a Colombia en la tendencia que el país traía desde 2017: la reducción en las hectáreas cultivadas de coca. El informe sostiene que cuatro factores explican por qué el país había logrado reducir los cultivos de coca en los cuatro años previos a 2021 y asegura que otros tres factores explican el abrupto cambio del año pasado.
¿Cómo había logrado Colombia reducir los cultivos de coca?
Hasta 2020, la ONU había reconocido la “intervención sostenida” de Colombia contra los cultivos de uso ilícito. Entre ellos estaba, por ejemplo, la erradicación forzada manual o el plan de sustitución de cultivos que nació con el Acuerdo de Paz firmado con la antigua guerrilla de las Farc en 2016.
Precisamente, la ONU ha dicho en el pasado que otros dos factores que impulsaron la reducción de cultivos de coca fueron la implementación del Acuerdo de Paz y la salida de uno de los grupos armados que controlaba gran parte del negocio del narcotráfico. Y, finalmente, que con el Acuerdo se había fomentado la sustitución voluntaria de cultivos.
Hasta que las cifras mostraron un aumento nunca antes visto de la coca en 2021.
¿Por qué aumentaron los cultivos de coca?
El primer factor que explica el cambio de las cifras en 2021 es la reducción de la intervención. Es decir, en el último año del gobierno de Iván Duque se redujeron los esfuerzos para combatir los cultivos de coca.
Esto se nota, sobre todo, con la forma primordial de eliminar cultivos: la erradicación forzosa manual. En estos operativos, la Fuerza Pública acordona un sembrado de coca y arranca planta por planta con la mano y algunas herramientas. En 2021 esta forma de erradicación se redujo en un 21%.
Según las cifras de la ONU, en 2020 Colombia erradicó de manera manual 130.147 hectáreas de cultivos de coca. El año siguiente solo erradicó 103.257 hectáreas. Asimismo, en 2020 las operaciones se concentraron en el 35% del país. El año pasado solo se intervino el 31% del país.
El segundo factor que para la ONU explica el aumento de los cultivos de coca es el posicionamiento de nuevos grupos criminales. Este ha sido un proceso que se ha dado a largo plazo: de tres actores predominantes que controlaban este eslabón del negocio del narcotráfico, se pasó a alrededor de 60 en 2021.
Y, finalmente, la pandemia del COVID-19 profundizó la pobreza y la falta de oportunidades en muchos lugares de Colombia, a la vez que fue uno de los factores de devaluación del peso frente al dólar. Hoy, entonces, es mucho más atractivo cultivar coca o dedicarse a transformarla en pasta porque entra más dinero. Según el informe, el empleo que generan los cultivos de coca asciende a $53 millones y el que genera la venta de pasta asciende a $79 millones.
¿Qué se puede hacer?
El informe de la ONU le recomienda al gobierno actual, entonces, una serie de medidas con las que se podría frenar el incremento de los cultivos de coca. Entre ellas están: focalizar las acciones en zonas que todavía tienen pocos cultivos, ayudar a comunidades étnicas a salir del negocio de la mata de coca, así como impulsar una transformación de los territorios en donde persisten los cultivos para que se desarrollen comercialmente.