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Ante el juez primero especializado de Cundinamarca, el coronel (r) Antonio González Henríquez aseguró que el 15 de julio de 1989 recibió una comunicación del director del DAS, general Miguel Maza Márquez para que se cambiara el jefe del cuerpo de escoltas del precandidato presidencial por el partido liberal Luis Carlos Galán Sarmiento.
En esa comunicación Maza Márquez le infirmó que Galán le había pedido al presidente de la República, Virgilio Barco le cambiara el escolta. Ante esta solicitud se inició la evaluación de unas hojas de vida para definir qué persona le podría brindar la seguridad al considerado hombre más amenazado del país, principalmente por los carteles del narcotráfico y grupos armados ilegales debido a sus propuestas electorales.
El oficial narró que incluso se reunió personalmente con Galán Sarmiento para comentarle los cambios de su esquema de protección, haciendo referencia al hecho que en dicho encuentro le manifestó que si tenía dudas o quejas sobre el nombramiento del teniente (r) Jacobo Torregrosa Melo como su jefe de seguridad se lo hiciera saber. Sin embargo nunca recibió una comunicación sobre ello.
“Soy inocente y esta es una injusticia muy grande”, precisó el coronel González quien cuestionó en repetidas oportunidades el hecho que esté siendo acusado de haber cambiado el escolta de Galán Sarmiento de manera arbitraria. Aseguró que revisó la hoja de vida de Torregrosa y su experiencia, contando con el aval del organismo de seguridad.
“Hoy iba a venir de negro (…) esto es un día de luto para un hombre honrado que le sirvió a este país, siento que se he ha hecho la infamia más grande, con el transcurso del tiempo, con la ayuda de mi abogado, demostraremos todo lo que se ha montado. Esto es un juicio político”, precisó el exjefe de la Oficina de Orden Público del DAS.
El coronel en retiro manifestó que el nombramiento de Torregrosa no se presentó porque fueran coterráneos ni conocidos, sino que por su hoja de vida contaba con la experiencia para este cargo. Ante esto aseguró que presentará las pruebas en este juicio que demostrarán que en su contra se han hecho falsas acusaciones y muchos testigos, haciendo referencia a la secretaria de Luis Carlos Galán, han faltado a la verdad en la investigación.
Según la Fiscalía General se presentó una irregularidad al ordenar el cambio de escolta de Galán Sarmiento al poner en dicho cargo a un cuestionado oficial, quien posteriormente fue destituido por el organismo de seguridad y condenado por delitos relacionados con el narcotráfico. Este cambio "inesperado" habría facilitado la ejecución del plan para atentar contra la vida del candidato presidencial quien fue acribillado en la noche del 18 de agosto de 1989 cuando se disponía a dar un discurso público en la plaza del municipio de Soacha (Cundinamarca).
El oficial es procesado además como coautor de los homicidios de Santiago Cuervo Jiménez, detective del Departamento Administrativo de Seguridad, DAS, quien al momento de los hechos hacía parte del esquema de protección de Galán Sarmiento, y del concejal de Soacha, Cundinamarca, Julio César Peñalosa Sánchez. Igualmente fueron acusados por la coautoría de la tentativa de homicidio de detective del DAS, Pedro Nel Bonilla Angulo.