En una entrevista para Caracol Radio, Augusto Rodríguez Ballesteros, director de la UNP hablo sobre la captura de los disidentes del Estado Mayor Central (EMC) comandada por alias Calarcá, que se transportaban de forma irregular en vehículos de la Unidad. De acuerdo con el informe de las autoridades, quienes iban a bordo se identificaron como parte de la disidencia de Alexander Mendoza, alias Calarcá, jefe de una de las estructuras del EMC, y que sigue en la mesa de diálogo como parte de la delegación de esa guerrilla que está en el proceso de paz.
Sobre la captura que fue realizada por un retén militar en la vía que conduce de Medellín al municipio de Anorí (Antioquia), Rodríguez expresó que lo había llamado el ministro de defensa, Iván Velásquez, a “decirme que pasó un grupo de militares que estaban cumpliendo con una misión en el departamento de Antioquia, en el área de Cisneros, porque habían detenido una caravana, al parecer de la UNP, para hacer la requisa y la identificación de personas correspondiente. Entonces averigüé rápidamente y supimos que era un esquema de protección para el grupo Estado Mayor Central que sale en disidencia del señor Iván “Mordisco”.
Aunque en las siete camionetas, que llevaban 34 personas, se encontraba algunas no autorizadas, el director recalcó que esta detención fue irregular, pues los vehículos de la UNP deben ser conducidos hasta instalaciones militares o policiales para hacer sus respectivas requisas, ya que en carretera podría resultar siendo un falso reten.
Este escándalo generó cuestionamientos sobre el cumplimiento de los protocolos establecidos en el proceso de paz, pues uno de los ocupantes era alias Firu, líder de la estructura 36 de esa disidencia, quien tiene actualmente orden de captura en la Fiscalía por homicidio. La UNP aclaró que es prohibido la movilización de personas con orden de captura en sus vehículos.
También, entre los otros ocupantes se encontraban Andrey Avendaño, también delegado del grupo en la mesa de diálogos; alias Ramiro, líder de la estructura 18 y alias Érika, compañera sentimental de alias Calarcá. Todos con órdenes de captura vigente. Asimismo, en los vehículos se transportaba varios celulares, memorias USB, más de $60 millones en efectivo, y también cargaban oro al interior de las camionetas.
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