El excandidato presidencial y exalcalde de Bucaramanga, Rodolfo Hernández Suárez fue condenado a 64 meses de prisión por el delito de interés indebido en celebración de contratos. Así lo determinó el juez décimo penal del circuito con funciones de conocimiento de Bucaramanga que en marzo pasado ya había declarado la culpabilidad del político.
La noticia de hoy es que, por haber firmado a dedo un millonario contrato que benefició a su hijo, Hernández deberá pagar 5 años y tres meses de prisión, una pena que el juez le permitirá cumplir en casa por cárcel, no solo porque no representa un riesgo para la sociedad, sino también por su edad y su delicado estado de salud, pues hace unos meses fue diagnosticado con un cáncer terminal.
Además de la condena de prisión, el juzgado multó al excandidato y tendrá que pagar 66.66 salarios mínimos, un poco más de $86 millones. Asimismo, el fallo en su contra también incluye una inhabilidad de 80 meses para ejercer cargos públicos.
Esta es el fallo completo:
El fallo en contra de Hernández quedó plasmado en un documento de 40 páginas en la que el juez argumentó las razones por las que encontró culpable al excandicato presidencial. Lo que logró probar la Fiscalía es que el exmandatario local intervino para que el contrato de consultoría 096 de 2016 fuera adjudicado a la empresa Vitalogic RSU.
El contrato entre la compañía y la Empresa Municipal de Aseo de Bucaramanga tenía como objetivo la implementación de nuevas tecnologías en el relleno sanitario de El Carrasco. Según el ente investigador, el hijo de Hernández pactó la repartición de comisiones por la adjudicación de ese contrato a la empresa Vitalogic RSU.
El documento, dice el ente investigador, contó con las firmas del asesor de la Empresa de Aseo de Bucaramanga, Jorge Hernán Alarcón, y el contratista de Vitalogic, Carlos Gutiérrez. “Antes de que se iniciara la licitación, ya el alcalde Hernández había designado unas ‘calaveras’ como vulgarmente las llama; es decir, unas personas para que realizaran los pliegos de la licitación y la misma fuera adjudicada a la empresa de su preferencia”, se lee en el expediente.
Todo lo anterior tenía un fin: que el hijo de Rodolfo Hernández, Luis Carlos Hernández, recibiera un pago de US$100 millones, algo que por ahora no ha probado la justicia, pues el caso contra el empresario sigue en firme. La defensa del excandidato anunció que apelará la condena y ahora tendrá cinco días para radicarla ante el Tribunal Superior de Bucaramanga.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.