"¿Sabe qué voy a hacer? Defender a su presidente": Roberto Prieto
En manos de las autoridades están los registros de las llamadas que sostuvo el exgerente de la campaña presidencial de Juan Manuel Santos con el propio mandatario, asesores y funcionarios del gobierno, a raíz del escándalo de Odebrecht.
Redacción Judicial
José Roberto Prieto Uribe pasa sus días detenido en la cárcel La Modelo, en Bogotá, mientras la Fiscalía avanza en investigaciones en su contra por sus supuestos vínculos en actos de corrupción que rodearon el proceso de adjudicación del contrato de la Ruta del Sol III y por, supuestamente, haber sabido del aporte de dineros de la multinacional Odebrecht a la campaña de Santos en 2010. En medio del trabajo del ente investigador, los fiscales pidieron a un juez que avalara la interceptación del teléfono de Prieto, exgerente de la campaña de Santos. El resultado de este trabajo son una serie de audios que han salido a la luz pública en los últimos meses.
(En contexto: Las interceptaciones a Roberto Prieto)
Varias de esas grabaciones fueron divulgadas hoy por La W Radio. En ellas, se escucha hablar a Prieto con dos asesores de la Casa de Nariño, con un empresario involucrado en el escándalo y con el propio presidente Santos. En esa charla, del 10 de marzo de 2017, el primer mandatario le pregunta sobre el esposo de María Valencia y sobre si sabe algo del ingreso de dineros de Odebrecht a la campaña. Prieto responde: “Sí, yo sé algo de eso. Yo llegué a la campaña en abril y lo que yo sé es que hubo una reunión donde estuvieron Juan Claudio Morales, Orlando Sardi, Consuelo Caldas, Eduardo Zambrano y Luiz Bueno, presidente de Odebrecht, y convinieron un aporte para la campaña”.
Prieto le explica al presidente que a él no le tocó esa reunión y que la plata de la multinacional se utilizó para pagar unos afiches publicitarios para la campaña. En esa misma conversación, Santos le pregunta por Félix Otto Rodríguez, entonces marido María Valencia. Prieto le responde que él (Rodríguez) hacía los afiches y que los distribuía. Luego, el primer mandatario le pregunta que si ese aporte se reportó en las cuentas de la campaña y Prieto le contesta que no. “Cuando se sentaron, todos tenían conocimiento de que era una empresa privada y, como tal, no se podía”, explica Prieto.
(Le podría interesar: Juan Claudio Morales desmiente a Roberto Prieto sobre dineros de Odebrecht en campaña de Santos)
Varios de los audios divulgados hoy por La W, datan de la época en la que Prieto decidió hablar por primera vez en medios de comunicación para contar su versión de la historia. La entrevista la dio a primera hora del 14 de marzo del año pasado en la cabina de Blu Radio. Pero antes de que llegara a la cita, el empresario habló con Ricardo Riveira, secretario privado del presidente Juan Manuel Santos, quien lo llamó para preguntarle sobre su anuncio de participar en la entrevista radial. Prieto le contesta alterado: “¿Sabe qué voy a hacer? Lo que no ha hecho este hijueputa gobierno: defender a su presidente”. Y agregó: “Soy independiente y hago lo que me dé la hijueputa gana, y me voy a defender”.
Prieto, todavía ofuscado, insiste: “Me tienen ‘culiao’. Me tienen como un bandido y como un delincuente. Ustedes tienen que tener huevo y calzones porque están en la presidencia escondidos y yo estoy en la hijueputa calle estigmatizado como un delincuente. ¿Sabe qué voy a hacer? A defenderme y a defender a su presidente. Lo que no ha hecho nadie”. Después de esta llamada, Prieto habló en radio y allí confesó que había una irregularidad en cuanto al dinero que había entrado a la campaña. “Así como le digo que sí fui irregular, el comité (financiero) tiene que salir a aceptar que la génesis de eso fue irregular y que hicimos quedar mal al presidente”, agregó Prieto durante la entrevista.
(En contexto: Roberto Prieto, un poderoso tras las rejas)
Una vez terminó su intervención radial, el empresario sostuvo varias llamadas. Una de ellas la sostuvo con una mujer a la que llamó Claudia y que, según La W, se trataría de Claudia Castro, la asesora de la primera dama, María Clemencia Rodríguez. En esa llamada, Prieto le dice a su interlocutora que lo único que hizo durante la entrevista fue explicar que Santos no tuvo nada que ver con los temas financieros y mucho menos con los negocios con Odebrecht. “Aquí salió una persona como yo, de alto calibre, a decir que el presidente no tenía ni idea, porque el presidente se encarga de conseguir votos y porque confía en su gente”, dice Prieto.
Claudia le contesta en esa misma conversación que dijo toda la verdad y que consideraba que en la entrevista se había inmolado a favor del presidente. “A usted le deberían dar las gracias”, expresa la mujer. Para Prieto, sus declaraciones en radio y que después retomaron varios medios de comunicación, sirvieron para dejar “limpio al presidente”, y para “sacarlo del peor bollo de su vida”. Otra de las conversaciones que están dentro del expediente de Prieto es la que sostuvo con un hombre de nombre Aurelio quien, según La W sería el exministro de agricultura, Aurelio Irragori.
(En contexto: Roberto Prieto habría recibido $ 300 millones por gestionar recursos extra para la Ruta del Sol III)
En esa llamada, Prieto le cuenta a su interlocutor que no ha estado bien de ánimos, que la situación ha sido muy dura y que se siente acorralado. Sin embargo, le explica que se está tratando de defender con sus abogados de todas las acusaciones en su contra y que él no tiene nada que ver con la entrada de dinero de Odebrecht a la campaña porque ni siquiera estaba dentro del equipo de gerencia cuando se registró el pago.
Prieto fue enviado a prisión a finales de mayo de este año. La investigación que lo tiene contra las cuerdas tiene que ver con las actuaciones ilegales que se utilizaron para adjudicar algunos tramos del proyecto de la Ruta del Sol. En este caso, el sector tres, entregado en 2010 a Yuma Concesionaria S.A., liderada por la empresa Impregilo Spa sucursal de Colombia. Según la Fiscalía, Prieto habría recurrido al tráfico de influencias ante la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) para lograr una adición al contrato Ruta del Sol III, para la construcción del puente Plato (Magdalena).
(Le puede interesar: Las maniobras engañosas de José Roberto Prieto)
Según las pesquisas del ente investigador, su interés en la adición al contrato era para que la empresa Consultores Unidos S.A., de Eduardo Zambrano, quedara con el negocio. El empresario está también procesado por supuestamente haber puesto a empresa al servicio de las acciones ilegales de Odrebrecht -tal cual él mismo confesó-. Prieto ha dicho, en varias ocasiones, que nada tiene que ver con las irregularidades que la Fiscalía explicó en la audiencia de imputación de cargos, el pasado 8 de mayo.
El ente investigador le imputó cinco delitos: tráfico de influencias de particulares, interés indebido en la celebración de contratos, enriquecimiento ilícito de particulares, falsedad en documento privado y falso testimonio. Durante la audiencia, la Fiscalía explicó que Prieto, que era una persona reconocida por estar vinculado a campañas presidenciales, usó esa condición para ejercer supuestas presiones en favor de Yuma Concesionaria. A cambio de ello, habría recibido $650 millones, que fueron cobrados por medio de una factura ficticia expedida por la empresa Megaland S.A.S.
Nota del editor: El título de esta nota fue modificado porque las comillas que contenía un título inicial no estaban en la información.
José Roberto Prieto Uribe pasa sus días detenido en la cárcel La Modelo, en Bogotá, mientras la Fiscalía avanza en investigaciones en su contra por sus supuestos vínculos en actos de corrupción que rodearon el proceso de adjudicación del contrato de la Ruta del Sol III y por, supuestamente, haber sabido del aporte de dineros de la multinacional Odebrecht a la campaña de Santos en 2010. En medio del trabajo del ente investigador, los fiscales pidieron a un juez que avalara la interceptación del teléfono de Prieto, exgerente de la campaña de Santos. El resultado de este trabajo son una serie de audios que han salido a la luz pública en los últimos meses.
(En contexto: Las interceptaciones a Roberto Prieto)
Varias de esas grabaciones fueron divulgadas hoy por La W Radio. En ellas, se escucha hablar a Prieto con dos asesores de la Casa de Nariño, con un empresario involucrado en el escándalo y con el propio presidente Santos. En esa charla, del 10 de marzo de 2017, el primer mandatario le pregunta sobre el esposo de María Valencia y sobre si sabe algo del ingreso de dineros de Odebrecht a la campaña. Prieto responde: “Sí, yo sé algo de eso. Yo llegué a la campaña en abril y lo que yo sé es que hubo una reunión donde estuvieron Juan Claudio Morales, Orlando Sardi, Consuelo Caldas, Eduardo Zambrano y Luiz Bueno, presidente de Odebrecht, y convinieron un aporte para la campaña”.
Prieto le explica al presidente que a él no le tocó esa reunión y que la plata de la multinacional se utilizó para pagar unos afiches publicitarios para la campaña. En esa misma conversación, Santos le pregunta por Félix Otto Rodríguez, entonces marido María Valencia. Prieto le responde que él (Rodríguez) hacía los afiches y que los distribuía. Luego, el primer mandatario le pregunta que si ese aporte se reportó en las cuentas de la campaña y Prieto le contesta que no. “Cuando se sentaron, todos tenían conocimiento de que era una empresa privada y, como tal, no se podía”, explica Prieto.
(Le podría interesar: Juan Claudio Morales desmiente a Roberto Prieto sobre dineros de Odebrecht en campaña de Santos)
Varios de los audios divulgados hoy por La W, datan de la época en la que Prieto decidió hablar por primera vez en medios de comunicación para contar su versión de la historia. La entrevista la dio a primera hora del 14 de marzo del año pasado en la cabina de Blu Radio. Pero antes de que llegara a la cita, el empresario habló con Ricardo Riveira, secretario privado del presidente Juan Manuel Santos, quien lo llamó para preguntarle sobre su anuncio de participar en la entrevista radial. Prieto le contesta alterado: “¿Sabe qué voy a hacer? Lo que no ha hecho este hijueputa gobierno: defender a su presidente”. Y agregó: “Soy independiente y hago lo que me dé la hijueputa gana, y me voy a defender”.
Prieto, todavía ofuscado, insiste: “Me tienen ‘culiao’. Me tienen como un bandido y como un delincuente. Ustedes tienen que tener huevo y calzones porque están en la presidencia escondidos y yo estoy en la hijueputa calle estigmatizado como un delincuente. ¿Sabe qué voy a hacer? A defenderme y a defender a su presidente. Lo que no ha hecho nadie”. Después de esta llamada, Prieto habló en radio y allí confesó que había una irregularidad en cuanto al dinero que había entrado a la campaña. “Así como le digo que sí fui irregular, el comité (financiero) tiene que salir a aceptar que la génesis de eso fue irregular y que hicimos quedar mal al presidente”, agregó Prieto durante la entrevista.
(En contexto: Roberto Prieto, un poderoso tras las rejas)
Una vez terminó su intervención radial, el empresario sostuvo varias llamadas. Una de ellas la sostuvo con una mujer a la que llamó Claudia y que, según La W, se trataría de Claudia Castro, la asesora de la primera dama, María Clemencia Rodríguez. En esa llamada, Prieto le dice a su interlocutora que lo único que hizo durante la entrevista fue explicar que Santos no tuvo nada que ver con los temas financieros y mucho menos con los negocios con Odebrecht. “Aquí salió una persona como yo, de alto calibre, a decir que el presidente no tenía ni idea, porque el presidente se encarga de conseguir votos y porque confía en su gente”, dice Prieto.
Claudia le contesta en esa misma conversación que dijo toda la verdad y que consideraba que en la entrevista se había inmolado a favor del presidente. “A usted le deberían dar las gracias”, expresa la mujer. Para Prieto, sus declaraciones en radio y que después retomaron varios medios de comunicación, sirvieron para dejar “limpio al presidente”, y para “sacarlo del peor bollo de su vida”. Otra de las conversaciones que están dentro del expediente de Prieto es la que sostuvo con un hombre de nombre Aurelio quien, según La W sería el exministro de agricultura, Aurelio Irragori.
(En contexto: Roberto Prieto habría recibido $ 300 millones por gestionar recursos extra para la Ruta del Sol III)
En esa llamada, Prieto le cuenta a su interlocutor que no ha estado bien de ánimos, que la situación ha sido muy dura y que se siente acorralado. Sin embargo, le explica que se está tratando de defender con sus abogados de todas las acusaciones en su contra y que él no tiene nada que ver con la entrada de dinero de Odebrecht a la campaña porque ni siquiera estaba dentro del equipo de gerencia cuando se registró el pago.
Prieto fue enviado a prisión a finales de mayo de este año. La investigación que lo tiene contra las cuerdas tiene que ver con las actuaciones ilegales que se utilizaron para adjudicar algunos tramos del proyecto de la Ruta del Sol. En este caso, el sector tres, entregado en 2010 a Yuma Concesionaria S.A., liderada por la empresa Impregilo Spa sucursal de Colombia. Según la Fiscalía, Prieto habría recurrido al tráfico de influencias ante la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) para lograr una adición al contrato Ruta del Sol III, para la construcción del puente Plato (Magdalena).
(Le puede interesar: Las maniobras engañosas de José Roberto Prieto)
Según las pesquisas del ente investigador, su interés en la adición al contrato era para que la empresa Consultores Unidos S.A., de Eduardo Zambrano, quedara con el negocio. El empresario está también procesado por supuestamente haber puesto a empresa al servicio de las acciones ilegales de Odrebrecht -tal cual él mismo confesó-. Prieto ha dicho, en varias ocasiones, que nada tiene que ver con las irregularidades que la Fiscalía explicó en la audiencia de imputación de cargos, el pasado 8 de mayo.
El ente investigador le imputó cinco delitos: tráfico de influencias de particulares, interés indebido en la celebración de contratos, enriquecimiento ilícito de particulares, falsedad en documento privado y falso testimonio. Durante la audiencia, la Fiscalía explicó que Prieto, que era una persona reconocida por estar vinculado a campañas presidenciales, usó esa condición para ejercer supuestas presiones en favor de Yuma Concesionaria. A cambio de ello, habría recibido $650 millones, que fueron cobrados por medio de una factura ficticia expedida por la empresa Megaland S.A.S.
Nota del editor: El título de esta nota fue modificado porque las comillas que contenía un título inicial no estaban en la información.