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Por medio de un video, el exsubdirector de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), Sneyder Pinilla, dio a conocer que está dispuesto a presentarse ante la Corte Suprema de Justicia a declarar si esta lo considera necesario. Además, compartió que el día de hoy se presentó a su cita ante la Fiscalía. Sin embargo, hasta el momento, el alto tribunal no ha citado al exfuncionario.
En el video, el funcionario nuevamente pidió perdón por los hechos relacionados con el presunto escándalo de corrupción al interior de la UNGRD. También agradeció a la fiscal general Luz Adriana Camargo por el esquema de seguridad que le fue entregado y solicitó que esta protección se amplíe a su hijo y a su núcleo familiar. El exfuncionario asegura que actualmente se encuentra en el centro de varios señalamientos a nivel nacional y que “no es fácil hablar de las personas que están en la matriz”.
Durante su declaración agregó varias promesas de reparación, una de carácter económico y otra “moral”. Para la primera de ellas sugirió que devolverá los “recursos de los cuales se pudo haber apropiado” durante su paso por la Unidad y para la segunda, plantea que dirá toda la verdad. “No puede ser que solamente yo, que soy solo un eslabón de la cadena, caiga en este escándalo de corrupción y en este concierto para delinquir que hice mientras hice parte de la UNGRD” Puntualizó.
Sneyder Pinilla, en medios de comunicación, reveló que un contrato para la compra de carrotanques de abastecimiento de agua para La Guajira, y que tuvo sobrecostos por más de $20.000 millones, terminó siendo utilizado para engrosar los bolsillos de altos funcionarios públicos. En este caso, $3.000 millones para Iván Name, presidente del Senado, y en $1.000 millones paran Andrés Calle, presidente de la Cámara.
Dichas entregas, según el relato de Pinilla, se llevaron a cabo entre septiembre y octubre del año pasado, después de varias reuniones que, manifiesta, se llevaron a cabo con Olmedo López, exdirector de la UNGRD, con el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, y la consejera para las regiones, Sandra Ortiz. ¿El propósito? Al parecer, lograr una ayuda para gestionar las iniciativas de gobierno en el Congreso.
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