Una comunidad entera de Chocó fue desplazada por combates entre grupos armados
Se trata de 180 personas que viven en la isla de Cruz, ubicada en zona rural del municipio de Medio San Juan. Esto se sabe.
La violencia en el país no da tregua. 180 personas que conforman 67 familias y que viven en Isla de Cruz, ubicada en zona rural del municipio del Medio San Juan, Chocó, fueron desplazadas de su territorio producto de los combates que se presentan en ese lugar entre el Frente de Guerra Occidental Ómar Gómez del ELN y el Clan del Golfo.
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La alerta fue emitida por la Defensoría del Pueblo, que explicó que para proteger su vida, esas familias se desplazaron el pasado 16 de octubre hasta el corregimiento Dipurdú, también jurisdicción del Medio San Juan en el suroriente del departamento.
Los combates se presentan, según la entidad de Derechos Humanos, porque ambos grupos armados ilegales buscan consolidar el control territorial en la zona para robustecer el negocio de sus economías ilícitas, como el tráfico de cocaína y el cobro de extorsiones al comercio.
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“A los grupos armados ilegales, les recuerdo que bajo ninguna circunstancia tienen que afectar a las comunidades, ni en las cabeceras municipales, ni en las zonas rurales. El ELN y el Clan del Golfo deben acatar integralmente el derecho internacional humanitario. La población civil debe estar al margen de las hostilidades”, explicó la Defensoría por medio de un comunicado.
Ante la situación que se presentando, la entidad informó además que este 20 y 21 de octubre, una comisión de la Defensoría viajará hasta Dipurdú para verificar la situación humanitaria-
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El pasado 11 de octubre la Defensoría del Pueblo alertó sobre el confinamiento de al menos 120 familias en el municipio de Santa Rosa del Sur, ante los enfrentamientos que se han registrado entre grupos armados ilegales que buscan el control de la zona y que ya han generado el desplazamiento de las comunidades de dos corregimientos.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.
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La alerta fue emitida por la Defensoría del Pueblo, que explicó que para proteger su vida, esas familias se desplazaron el pasado 16 de octubre hasta el corregimiento Dipurdú, también jurisdicción del Medio San Juan en el suroriente del departamento.
Los combates se presentan, según la entidad de Derechos Humanos, porque ambos grupos armados ilegales buscan consolidar el control territorial en la zona para robustecer el negocio de sus economías ilícitas, como el tráfico de cocaína y el cobro de extorsiones al comercio.
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“A los grupos armados ilegales, les recuerdo que bajo ninguna circunstancia tienen que afectar a las comunidades, ni en las cabeceras municipales, ni en las zonas rurales. El ELN y el Clan del Golfo deben acatar integralmente el derecho internacional humanitario. La población civil debe estar al margen de las hostilidades”, explicó la Defensoría por medio de un comunicado.
Ante la situación que se presentando, la entidad informó además que este 20 y 21 de octubre, una comisión de la Defensoría viajará hasta Dipurdú para verificar la situación humanitaria-
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