Zopiclona: la hipótesis tras el medicamento hallado en el cuerpo de Mauricio Leal
En el cuerpo del estilista se encontraron siete pastillas de un fuerte somnífero. Sin embargo, según la Fiscalía, él solo habría ingerido una. Detrás del medicamento habría más indicios de cómo lo habría matado su hermano, Jhonier Leal.
En la necropsia que le practicaron al estilista Mauricio Leal le encontraron nueve tabletas de un fármaco conocido como zopiclona. Sin embargo, el fiscal del caso, reveló en audiencia que tienen la hipótesis de que el reconocido peluquero solamente había tomado una tableta y que las demás se las habría introducido su hermano, Jhonier Leal, momentos antes de matarlo a él y a su madre. En la teoría de la Fiscalía sobre el caso es central una caja de este medicamento que fue hallada en la escena del crimen, el cuarto de la madre de los Leal, Marleny Hernández, en una lujosa casa de La Calera.
(Lea también: Los detalles del caso del estilista Mauricio Leal que reveló su excuñada)
Con unos efectos similares a los de las benzodiazepinas, aunque distinto en su composición, la zopiclona es utilizada como un somnífero y para reducir la ansiedad. Comienza a producir efectos entre 15 y 30 minutos después de ser consumido y es metabolizado por el cuerpo en entre 3 a 6 horas. En la necropsia que Medicina Legal le practicó al cuerpo de Mauricio Leal se lee: “En la muestra de sangre analizada se detectó: Acetaminofén, Hidrocodona, zopiclona; en la muestra de orina analizada se detectó acetaminofén, hidromorfona, hidrocodona, zopiclona”.
Sin embargo, según el fiscal del caso, Mauricio Leal solo habría tomado una de las pastillas de zopiclona que fueron halladas en su cuerpo. Las demás, al parecer, se las suministró Jhonier Leal. Con una sobredosis de este medicamento se puede experimentar confusión y dificultades de memoria y, según la Fiscalía, el hermano se la suministró al estilista de los famosos para luego obligarlo a redactar una confusa carta en la que le dejaba todo a sus sobrinos y a Jhonier Leal. Esa carta fue la que inicialmente llevó a creer que este doble homicidio había sido un suicidio.
(Lea también: “Jamás hubiera puesto una mano sobre mi madre o hermano”: Jhonier Leal)
“Los amo. Perdónenme. No aguanto más. A mis sobrinos y hermano dejo todo. Con todo mi amor. Perdóname mamá. 11-24″, se alcanza a leer en la carta, escrita en media hoja de papel bond. “Esa carta sí la escribió él”, dijo el fiscal. La Fiscalía explicó que, tras un análisis grafológico del papel, en la que se comparó la misiva con otros escritos de Mauricio Leal se concluyó que, si bien la letra de la carta sí era suya, había varias inconsistencias que llevaban a pensar que no lo había escrito en total calma o por su voluntad. “Jhonier Leal estaba presionando a su hermano, causándole heridas con el fin que dejara dicho escrito”, añadió el fiscal del caso.
Además, el 22 de noviembre de 2021, cuando los investigadores de la Fiscalía llegaron hasta la casa de los Leal a analizar la escena del crimen encontraron, al lado de los cuerpos, una caja de zopiclona vacía y un frasco de ibuprofeno. Los envases de los medicamentos estaban entre las sábanas blancas que cubrían los cuerpos de Mauricio Leal y su madre sobre la cama de ella. “Estos dos elementos se encontraban vacíos y sin adherencia de alguna mancha roja, por un lado, razón por lo que llevaron a cabo barrido lofoscópico con reactivo magnético negro y reactivo pulverulento negro con resultados negativos”, se lee en uno de los informes que está en poder del ente investigador.
(Lea también: Caso Mauricio Leal: estos son los elementos que implicarían a Jhonier en el crimen)
Es decir, a los expertos que estaban en el lugar les llamó la atención que, a pesar de que las sábanas blancas estaban cubiertas de sangre, pues Leal y su madre murieron por heridas de cuchillo, los dos envases de medicamentos estaban limpios. Sin embargo, cuando aplicaron el protocolo de búsqueda de huellas dactilares, no encontraron indicio alguno. “Llama la atención que, dentro de la conducta observada en la escena, esta caja no tenga manchas de sangre y se encuentre sobre la colcha”, insistieron los investigadores en uno de los informes.
Fue así que la Fiscalía concluyó que no tendría sentido, de tratarse de un suicidio, que Mauricio Leal hubiera ingerido tantas pastillas después de apuñalarse a sí mismo, pues habría dejado al menos huellas de sangre en el envase del medicamento. Según dijo en audiencia del 17 de enero el fiscal del caso, Mario Burgos, el hermano de Mauricio Leal e hijo Marleny Hernández, Jhonier Leal, habría usado guantes al asesinarlos para esconder su rastro, lo que explicaría que no hubiera sangre ni huellas dactilares en el envase de zopiclona.
(Lea: Familia de Jhonier Leal se niega a aceptar que esté involucrado en doble asesinato)
Jhonier Leal no aceptó los cargos de homicidio agravado y ocultamiento, alteración y destrucción de pruebas que le imputó la Fiscalía. En audiencia dijo: “Jamás hubiese sido capaz de poner una mano encima de mi madre y de mi hermano, por ende, no acepto la imputación de cargos”. Luego de que se defina si lo envían o no a la cárcel, el ente investigador tendrá que continuar con la investigación formal para decidir si lo llama o no a juicio.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.
En la necropsia que le practicaron al estilista Mauricio Leal le encontraron nueve tabletas de un fármaco conocido como zopiclona. Sin embargo, el fiscal del caso, reveló en audiencia que tienen la hipótesis de que el reconocido peluquero solamente había tomado una tableta y que las demás se las habría introducido su hermano, Jhonier Leal, momentos antes de matarlo a él y a su madre. En la teoría de la Fiscalía sobre el caso es central una caja de este medicamento que fue hallada en la escena del crimen, el cuarto de la madre de los Leal, Marleny Hernández, en una lujosa casa de La Calera.
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Con unos efectos similares a los de las benzodiazepinas, aunque distinto en su composición, la zopiclona es utilizada como un somnífero y para reducir la ansiedad. Comienza a producir efectos entre 15 y 30 minutos después de ser consumido y es metabolizado por el cuerpo en entre 3 a 6 horas. En la necropsia que Medicina Legal le practicó al cuerpo de Mauricio Leal se lee: “En la muestra de sangre analizada se detectó: Acetaminofén, Hidrocodona, zopiclona; en la muestra de orina analizada se detectó acetaminofén, hidromorfona, hidrocodona, zopiclona”.
Sin embargo, según el fiscal del caso, Mauricio Leal solo habría tomado una de las pastillas de zopiclona que fueron halladas en su cuerpo. Las demás, al parecer, se las suministró Jhonier Leal. Con una sobredosis de este medicamento se puede experimentar confusión y dificultades de memoria y, según la Fiscalía, el hermano se la suministró al estilista de los famosos para luego obligarlo a redactar una confusa carta en la que le dejaba todo a sus sobrinos y a Jhonier Leal. Esa carta fue la que inicialmente llevó a creer que este doble homicidio había sido un suicidio.
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“Los amo. Perdónenme. No aguanto más. A mis sobrinos y hermano dejo todo. Con todo mi amor. Perdóname mamá. 11-24″, se alcanza a leer en la carta, escrita en media hoja de papel bond. “Esa carta sí la escribió él”, dijo el fiscal. La Fiscalía explicó que, tras un análisis grafológico del papel, en la que se comparó la misiva con otros escritos de Mauricio Leal se concluyó que, si bien la letra de la carta sí era suya, había varias inconsistencias que llevaban a pensar que no lo había escrito en total calma o por su voluntad. “Jhonier Leal estaba presionando a su hermano, causándole heridas con el fin que dejara dicho escrito”, añadió el fiscal del caso.
Además, el 22 de noviembre de 2021, cuando los investigadores de la Fiscalía llegaron hasta la casa de los Leal a analizar la escena del crimen encontraron, al lado de los cuerpos, una caja de zopiclona vacía y un frasco de ibuprofeno. Los envases de los medicamentos estaban entre las sábanas blancas que cubrían los cuerpos de Mauricio Leal y su madre sobre la cama de ella. “Estos dos elementos se encontraban vacíos y sin adherencia de alguna mancha roja, por un lado, razón por lo que llevaron a cabo barrido lofoscópico con reactivo magnético negro y reactivo pulverulento negro con resultados negativos”, se lee en uno de los informes que está en poder del ente investigador.
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Es decir, a los expertos que estaban en el lugar les llamó la atención que, a pesar de que las sábanas blancas estaban cubiertas de sangre, pues Leal y su madre murieron por heridas de cuchillo, los dos envases de medicamentos estaban limpios. Sin embargo, cuando aplicaron el protocolo de búsqueda de huellas dactilares, no encontraron indicio alguno. “Llama la atención que, dentro de la conducta observada en la escena, esta caja no tenga manchas de sangre y se encuentre sobre la colcha”, insistieron los investigadores en uno de los informes.
Fue así que la Fiscalía concluyó que no tendría sentido, de tratarse de un suicidio, que Mauricio Leal hubiera ingerido tantas pastillas después de apuñalarse a sí mismo, pues habría dejado al menos huellas de sangre en el envase del medicamento. Según dijo en audiencia del 17 de enero el fiscal del caso, Mario Burgos, el hermano de Mauricio Leal e hijo Marleny Hernández, Jhonier Leal, habría usado guantes al asesinarlos para esconder su rastro, lo que explicaría que no hubiera sangre ni huellas dactilares en el envase de zopiclona.
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Jhonier Leal no aceptó los cargos de homicidio agravado y ocultamiento, alteración y destrucción de pruebas que le imputó la Fiscalía. En audiencia dijo: “Jamás hubiese sido capaz de poner una mano encima de mi madre y de mi hermano, por ende, no acepto la imputación de cargos”. Luego de que se defina si lo envían o no a la cárcel, el ente investigador tendrá que continuar con la investigación formal para decidir si lo llama o no a juicio.
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