Casa de la Justicia y Casa de la Mujer, ¿cuál es la diferencia?

¿Sabe a dónde acudir si dentro de su hogar se presenta un caso de violencia contra la mujer? Aquí le explicamos la diferencia entre las Casas de Justicia y Casas de las Mujeres Empoderadas. Por su parte, las Casas de Justicia son centros de orientación, referencia y prestación de servicios de solución de conflictos, mediante mecanismos de justicia formal y no formal. Mientras que las Casas de las Mujeres Empoderadas buscan impulsar el empoderamiento económico, educativo, político y la promoción del derecho a una vida libre de violencias.

Alrededor de un millón de mujeres se benefician del programa de Casas de las Mujeres Empoderadas, según Agencia Presidencial de Cooperación Internacional de Colombia. Estas articulan en un solo espacio las ofertas de entidades públicas, el sector privado, la academia, mecanismos de cooperación internacional y la sociedad civil para empoderar a las mujeres. Por lo tanto, son espacios que promueven la autonomía económica de las mujeres, una vida libre de violencias y fortalecimiento de habilidad de liderazgo.

En contexto: Radiografía de las Casas de Justicia: ¿qué son y cómo funcionan?

A estas Casas de las Mujeres pueden acudir mujeres víctimas de violencias, migrantes y víctimas del conflicto armado. A las Casas de Justicia, por su lado, acuden personas que tengan conflictos familiares, como controversias entre compañeros permanentes o cónyuges, por alimentos, o herencias (en caso de familiares fallecidos). También, cuando hay conflictos de bienes inmuebles con vecinos, como en su casa, apartamento, local o finca.

En estos centros de Justicia involucran también conflictos por deudas como falta de pago, controversias con bancos por tarjetas de crédito, cobro de intereses. Así como conflictos de trabajo en controversias con el empleador, problemas en el lugar de trabajo, reclamaciones por derechos laborales, o situaciones con el Estado como cobro de impuestos, trámites ante entidades públicas, reclamaciones por daños causados por el Estado, o relacionadas con el Sistema de Seguridad Social.

Lea también. Aquelarre, el laboratorio de diseño en Cauca que educa sobre derechos reproductivos

En estas Casas de Justicia pueden encontrarse la Comisaría de Familia, la Personería Municipal y la Inspección de Policía, una oficina de asuntos étnicos, una de desarrollo comunitario, centros de conciliación y los consultorios jurídicos de diferentes universidades. A su vez, pueden operar allí mismo: la Fiscalía, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf), la Defensoría del Pueblo, Medicina Legal, la Registraduría, la Unidad de Víctimas, la Agencia para la Reincorporación, Prosperidad Social y hasta la Policía.

De esta manera, dentro de las Casas de Justicia se pueden encontrar información guía para violencias basadas en género, pero la atención a mujeres víctimas se puede gestionar directamente con las Casas de las Mujeres Empoderadas.

¿Sabe qué es la justicia centrada en las personas? Visite Justicia Inclusiva de El Espectador

¿Sabe a dónde acudir si dentro de su hogar se presenta un caso de violencia contra la mujer? Aquí le explicamos la diferencia entre las Casas de Justicia y Casas de las Mujeres Empoderadas. Por su parte, las Casas de Justicia son centros de orientación, referencia y prestación de servicios de solución de conflictos, mediante mecanismos de justicia formal y no formal. Mientras que las Casas de las Mujeres Empoderadas buscan impulsar el empoderamiento económico, educativo, político y la promoción del derecho a una vida libre de violencias.

Alrededor de un millón de mujeres se benefician del programa de Casas de las Mujeres Empoderadas, según Agencia Presidencial de Cooperación Internacional de Colombia. Estas articulan en un solo espacio las ofertas de entidades públicas, el sector privado, la academia, mecanismos de cooperación internacional y la sociedad civil para empoderar a las mujeres. Por lo tanto, son espacios que promueven la autonomía económica de las mujeres, una vida libre de violencias y fortalecimiento de habilidad de liderazgo.

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En estos centros de Justicia involucran también conflictos por deudas como falta de pago, controversias con bancos por tarjetas de crédito, cobro de intereses. Así como conflictos de trabajo en controversias con el empleador, problemas en el lugar de trabajo, reclamaciones por derechos laborales, o situaciones con el Estado como cobro de impuestos, trámites ante entidades públicas, reclamaciones por daños causados por el Estado, o relacionadas con el Sistema de Seguridad Social.

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En estas Casas de Justicia pueden encontrarse la Comisaría de Familia, la Personería Municipal y la Inspección de Policía, una oficina de asuntos étnicos, una de desarrollo comunitario, centros de conciliación y los consultorios jurídicos de diferentes universidades. A su vez, pueden operar allí mismo: la Fiscalía, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf), la Defensoría del Pueblo, Medicina Legal, la Registraduría, la Unidad de Víctimas, la Agencia para la Reincorporación, Prosperidad Social y hasta la Policía.

De esta manera, dentro de las Casas de Justicia se pueden encontrar información guía para violencias basadas en género, pero la atención a mujeres víctimas se puede gestionar directamente con las Casas de las Mujeres Empoderadas.

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