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Dos décadas de silencio y verdades sepultadas fueron desenterradas esta semana por la Unidad de Búsqueda (UBPD). En la vereda Alto Cumaral, en Meta, la Unidad hizo el levantamiento de tres personas que, gracias a firmantes de paz del sector, pudieron ser localizadas en una “zona rural y de complejo acceso del municipio de El Dorado”, informó la entidad.
El hallazgo de los tres cuerpos se da en los últimos meses de 2023, en los cuales la Unidad ha logrado varios avances para encontrar personas que desaparecieron hace años, algunos incluso hace décadas, en medio de la guerra. Por ejemplo, en noviembre, la entidad logró reunir a una familia que fue fragmentada por el conflicto y que duró distanciada y sin noticias de los familiares por 40 años.
La Unidad de Búsqueda informó que tienen una confirmación preliminar para identificar dos de las tres personas que encontraron en Meta. Sin embargo, ahora depende del Instituto de Medicina Legal para tener certeza total de los nombres y “quien posterior a los estudios pertinentes establezca la identidad”, aseguró la Unidad.
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Según un comunicado de la Unidad, los tres cuerpos podrían corresponder a “personas que perdieron la vida en acciones bélicas en el marco del conflicto armado hace más de 20 años”. No obstante, la entidad no explicó posibles causas de la desaparición ni si los cuerpos fueron trasladados desde otras regiones para ser desaparecidos en El Dorado (Meta).
En los hallazgos, la Unidad encontró que uno de los cuerpos corresponde al de un adolescente conocido como “Mincho”; un joven que “falleció en combates cerca a la vereda y fue trasladado hasta su lugar de inhumación”, asegura el comunicado.
“Es una alegría infinita. Después de tanto tiempo venir y encontrarlo en este momento. Gracias a la UBPD. Fueron 22 años de desaparición y después de esto ya tendremos la tranquilidad de poder darle una sepultura digna”, dijo el hermano del adolescente.
Otro de los cuerpos fue identificado como el de una mujer llamada Amparo. Su cuerpo tenía muestras de haber fallecido a causa de un artefacto explosivo; “fue trasladada hasta una finca cercana a El Dorado, donde recibió atención médica y luego se produjo el deceso”, informó la Unidad.
“En ese momento, uno de sus compañeros se acercó para intentar recuperarla y sacarla del lugar, pero no lo consiguió y perdió la vida luego de pisar una mina antipersona. Esta persona es a quien corresponde el tercer cuerpo recuperado y de quien actualmente se adelantan investigaciones para establecer su identidad”, explica el documento emitido por la Unidad.
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La investigación para dar con el paradero de los tres cuerpos inició en febrero de este año. La Unidad trabajó de la mano con firmantes del Acuerdo de Paz, quienes dieron insumos e información para lograr conocer las veredas, identidades y hechos en los cuales varias de estas personas desaparecieron.
“La firma del Acuerdo de Paz se convirtió en una oportunidad para muchas familias que tienen seres queridos desaparecidos. Después de siete meses de investigación hemos logrado adelantar acciones humanitarias de prospección y recuperación de cuerpos que pueden corresponder a tres personas de quienes teníamos solicitud de búsqueda”, aseguró Diana Paola Riveros, coordinadora de la Unidad de Búsqueda en Meta.
Los forenses, antropólogos y expertos de la Unidad de Búsqueda tuvieron problemas para lograr estos hallazgos. Por ejemplo, dicen que hubo “dificultad para el acceso, ya que se trata de un lugar rural con vías de acceso precarias y las condiciones de seguridad en el sector”.
Luego de la identificación plena, la entidad entregará los cuerpos a sus familiares para que logren hacer la sepultura y encontrar respuestas a las incógnitas que mantuvieron durante dos décadas.
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