En el vibrante corazón de Medellín florece un emblema que encapsula su esencia: la Cattleya trianae. La declarada flor de Medellín, no solo embellece los paisajes antioqueños con su majestuosa presencia, sino que también simboliza la rica herencia cultural e histórica de la región. Con sus delicados pétalos que despliegan una sinfonía de colores y su fragancia sutil, la Cattleya trianae es un tributo viviente a la biodiversidad y al espíritu indomable de la capital y sus habitantes.
Se trata de una orquídea que representa la biodiversidad y riqueza natural de la ciudad, además, fue declarada flor nacional de Colombia en 1936. Su vinculación con Medellín se profundiza a través de la Feria de las Flores, un evento emblemático de la ciudad que celebra la cultura y la identidad antioqueña. Durante esta feria, la Cattleya trianae es una de las especies más destacadas, que simboliza la belleza y el esplendor natural de la región.
Julián Urán, quien entre 2021 y 2023 coordinó el proyecto de siembra de la flor Cattleya trianae desde el Jardín Botánico de Medellín, señala que en la alcaldía anterior, la administración programó la siembra de 3.500 ejemplares de esta especie. “Desde el Jardín Botánico registramos que esta flor es nativa de tierras medellinenses, y de ahí que la consideramos un símbolo. Registramos en la entidad 3.431 sembradas en la ciudad hasta el 31 de diciembre de 2023″ aseguró.
Su nombre honra al botánico José Jerónimo Triana José Jerónimo Triana, quien fue un destacado botánico colombiano del siglo XIX, conocido por su extenso trabajo en la clasificación y descripción de la flora colombiana y suramericana. Triana fue uno de los primeros botánicos en realizar una exploración científica exhaustiva de las plantas en la región, lo que resultó en la identificación y catalogación de numerosas especies nuevas para la ciencia. “Si bien era bogotano, en el registro del jardín están muchas de sus investigaciones. También, nace de ahí el arraigo entre la ciudad y la flor”, aseguro Urán.
‘Flor de Mayo’ en Colombia, debido a que su floración suele coincidir con el mes de mayo, aunque puede florecer en otros meses dependiendo de las condiciones de cultivo. La Cattleya trianae tiene características distintivas y es conocida por su belleza, las flores son grandes, típicamente entre 15 a 20 cm de diámetro, pueden variar en color, pero generalmente presentan tonos de rosa, púrpura y blanco, las flores son fragantes, con un aroma dulce y agradable. Los pétalos son amplios y ondulados, a menudo rosados o lilas, siendo la parte más distintiva de la flor.
Los sépalos son más estrechos y puntiagudos, de un color similar a los pétalos pero generalmente más claros. Las hojas son alargadas y carnosas, con una forma oblongo-elíptica ,pueden medir entre 20 a 30 cm de largo y son de un verde brillante. Los pseudobulbos son cilíndricos y alargados, midiendo aproximadamente 10 a 15 cm de largo, cada pseudobulbo generalmente produce una o dos hojas. Las raíces son gruesas, blancas, y cubiertas con una capa de velamen, que ayuda a absorber la humedad y los nutrientes del aire. La Cattleya trianae es epífita, lo que significa que crece sobre otras plantas (usualmente árboles) y absorbe nutrientes del aire y la humedad ambiental. “Estas características hacen de la Cattleya trianae una orquídea espectacular y muy apreciada tanto en su hábitat natural como en cultivo. Para el Jardín Botánico de Medellín, representa la diversidad y riqueza natural” aseguró Urán.
De acuerdo con el experto, cuidar una Cattleya trianae requiere atención a varios aspectos clave para asegurarse de que la planta crezca y florezca adecuadamente. “Especialmente Medellín, conocida por su clima húmedo, proporciona un entorno natural adecuado, pero en interiores puede ser necesario aumentar la humedad alrededor de la planta” dijo Urán.
- Necesita luz brillante pero indirecta, una buena opción es colocarla cerca de una ventana orientada al este o al oeste, donde recibirá luz filtrada.
- Debe recibir alrededor de 10-12 horas de luz al día. Si no hay suficiente luz natural, se pueden usar luces de crecimiento.
- La temperatura diurna debe estar entre 20°C y 30°C. La nocturna entre 12°C y 15°C, “hay que evitar cambios bruscos de temperatura”, dijo Urán.
- Prefiere una humedad relativa del 50-70% “puede aumentar la humedad colocando la planta sobre una bandeja con piedras húmedas o utilizando un humidificador”, recomendó el experto. Es importante que haya buena circulación de aire para evitar problemas de hongos y bacterias.
- Se debe regar cuando el sustrato esté casi seco. A temperaturas altas, esto puede ser cada cuatro a siete días, mientras que en el frío puede ser cada 10-14 días. Riega a fondo, permitiendo que el agua drene completamente.
- No deje la planta en agua estancada.
- Utilice un sustrato especial para orquídeas, que puede incluir corteza de pino, carbón vegetal y perlita, este sustrato permite un buen drenaje y aireación. Cambie el sustrato cada 2-3 años o cuando se descomponga.
- Fertilice cada dos o tres semanas semanas durante la temporada de crecimiento, y debe estar balanceado para orquídeas, diluido a la mitad de la concentración recomendada.
Para estimular la floración, asegúrese de que la planta reciba suficiente luz y mantén la temperatura adecuada. “Un ligero descenso en la temperatura nocturna puede ayudar a inducir la floración” dijo Urán. Retire los pseudobulbos muertos o dañados para mantener la planta saludable y limpia las hojas con un paño húmedo para eliminar el polvo y permitir una mejor fotosíntesis. Por último, la forma más común de reproducir la Cattleya trianae es mediante la división de pseudobulbos, se debe hacer cuando la planta esté en reposo y asegúrate de que cada división tenga al menos tres o cuatro pseudobulbos.
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