La alianza entre Jardín Botánico de Bogotá y Alemania para reforzar investigación

En un paso hacia la cooperación internacional en ciencia y conservación, recientemente se llevó a cabo un significativo encuentro en el Jardín Botánico de Bogotá. La directora de esta institución, María Claudia García Davila, recibió al viceministro del Ministerio Federal de Educación e Investigación de Alemania, Jens Brandenburg el pasado 20 de junio, para hablar sobre el interés mutuo de fortalecer lazos entre Colombia y Alemania, y destacar el papel crucial que juegan instituciones como los Jardines Botánicos en la investigación científica y la conservación de la biodiversidad.

En entrevista con El Espectador, la directora del Jardín Botánico de Bogotá, María Claudia García, compartió detalles sobre los objetivos que se buscan con esta colaboración para ambos países y lo que se viene para la institución en materia de investigación.

¿Cómo surgió la oportunidad de colaborar con el Ministerio Federal de Educación e Investigación de Alemania?

El Ministerio alemán se acercó al Jardín Botánico de Bogotá debido a nuestros convenios existentes con el Jardín Botánico de Berlín y la Agencia Alemana de Cooperación, entonces buscábamos una conversación más global sobre la colaboración en educación, investigación y ciencia entre Alemania y Colombia. Eso hizo que tuviéramos reuniones con una diputada alemana, la embajadora, y la visita del viceministro y su equipo. De hecho, durante estas reuniones, contamos con la presencia de Susan Schulz, directora para América de temas de cooperación científica y tecnológica y establecimos contacto para desarrollar una agenda estratégica con acciones específicas que implementaremos durante los próximos tres años y medio de la actual administración que busca generar 163 productos de investigación durante esta administración. Esperamos que muchos de estos se realicen en colaboración con Alemania.

¿Qué implicó ese trabajo anterior con el Jardín Botánico de Berlín y la Agencia de Cooperación Alemana (GIZ)?

Bueno, nosotros hemos trabajado en un convenio específico de intercambio con el Jardín Botánico de Berlín, que hemos desarrollado desde 2021 y continuaremos fortaleciendo, en donde hacemos y participamos en eventos académicos, publicaciones científicas conjuntas y el intercambio de personal para fortalecer nuestros conocimientos en ecología urbana y botánica. Además, tenemos también un convenio recién firmado con la Agencia Alemana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (GIZ), donde realizaremos una expedición botánica en La Macarena a través del programa ProBosque, para trabajar con comunidades locales que han estado colaborando con la GIZ para transformar sus prácticas agropecuarias en prácticas sostenibles y de conservación del bosque. Capacitaremos a estas comunidades en ciencia ciudadana, técnicas de agricultura, propagación de especies, y conservación, fortaleciendo su papel como guardianes del bosque amazónico.

Por otro lado, también nos reunimos con la embajadora de Alemania en Colombia y con una miembro del Parlamento alemán responsable de temas de ciencia y tecnología para la región de América. En estas reuniones, discutimos el fortalecimiento del Jardín Botánico en el contexto de la implementación de la Ley de Ciencia, Tecnología e Innovación y las recomendaciones de la Misión de Sabios sobre bioeconomía y la importancia de fortalecer nuestros centros de investigación.

¿Cuáles fueron los puntos claves que se acordaron en la reunión?

En nuestra reunión, exploramos el interés común entre Colombia y Alemania en desarrollar investigaciones e innovaciones tecnológicas para enfrentar los desafíos del cambio climático y es por ello que nos enfocamos en áreas como agricultura urbana, biotecnología, bioprospección y soluciones basadas en la naturaleza. Como funcionarios públicos y ciudadanos del mundo, tenemos la responsabilidad de actuar decisivamente para mitigar y adaptarnos al cambio climático. Además, con la próxima COP 16 en Cali, nos hemos comprometido con metas de conservación, incluyendo estrategias de conservación ex situ. Es por ello que los jardines botánicos juegan un papel crucial en esto, porque se debe fortalecer el conocimiento, las colecciones, los bancos de semillas y de germoplasma en el cuidado ambiental. Nosotros específicamente lo que estamos haciendo es que, con el Plan Distrital de Desarrollo de “Bogotá Camina Seguro” tenemos objetivos relevantes para la conservación y la ciencia, es por ello que buscamos fortalecer un ecosistema de ciencia, tecnología e innovación, con énfasis en medio ambiente y biodiversidad. Además, tenemos el mandato de consolidar el Jardín Botánico como centro de investigación ambiental en Colombia.

Alemania tiene mucho que ofrecer en términos de desarrollo científico. El Jardín Botánico de Berlín, con sus 200 años de historia en conservación de especímenes, es un ejemplo de su potencia en biología molecular y equipamiento de laboratorio avanzado. También tienen mucho que enseñarnos en horticultura. De hecho, algunos de nuestros funcionarios participaron en un intercambio en el Jardín Botánico de Berlín, aprendiendo técnicas de arte, cultura y manejo de abonos.

¿Cuáles son los retos o principales retos que frente al Jardín Botánico en materia de investigación y conservación de la flora?

El Jardín Botánico de Bogotá enfrenta el desafío de convertirse en un centro de ciencia, tecnología e innovación de primer nivel, según lo establecido en el Plan Distrital de Desarrollo. Nuestro objetivo es ser competitivos internacionalmente y proporcionar conocimiento básico y aplicado para abordar la triple crisis ambiental: climática, de biodiversidad y de contaminación.

¿Cómo piensan abordar estos retos con esta alianza?

Para lograr esto, estamos enfocándonos en tres líneas principales de investigación:

1. Biotecnología y bioprospección: Avanzamos significativamente en estas áreas para desarrollar soluciones innovadoras.
2. Cambio climático: Estudiamos tanto los impactos del cambio climático en la flora de Bogotá, los páramos y el bosque alto andino, como en especies de otros pisos térmicos que conservamos en nuestro tropicario. Además, investigamos soluciones de adaptación, manejo de plagas emergentes, propagación de especies para restauración de ecosistemas, y captura de carbono por la vegetación urbana.
3. Uso sostenible y agricultura urbana: Desarrollamos alternativas de seguridad alimentaria frente a la crisis ambiental, con el objetivo de aumentar nuestras huertas urbanas de 12,000 a 25,000.

¿Cuál es el próximo paso?

En cuanto a nuestra colaboración con el Ministerio de Investigación y Educación de Alemania, hemos dado el primer paso al acercar las voluntades entre ambas instituciones. Nuestro próximo paso es diseñar acciones específicas para desarrollar conjuntamente. Posteriormente, determinaremos el presupuesto, los indicadores y los mecanismos de seguimiento. Prevemos establecer un comité de seguimiento conjunto y realizar una rendición de cuentas y socialización de la información, aspectos que Alemania considera cruciales en sus cooperaciones. Aunque estamos en la etapa inicial, esperamos que esta colaboración se extienda al menos hasta 2028, construyendo una alianza sólida y duradera para enfrentar los desafíos ambientales y científicos que tenemos por delante.

Estamos convencidos de que al fortalecer la colaboración entre instituciones y países, multiplicamos exponencialmente nuestras capacidades para generar impactos reales y significativos. Nuestro compromiso es producir ciencia útil y aplicable que beneficie directamente a los ciudadanos, pero reconocemos que el verdadero potencial de transformación se alcanza a través del trabajo en equipo. Por ello esta colaboración no solo nos permite compartir conocimientos y recursos, sino que también nos inspira a pensar de manera más global y actuar de forma más estratégica. Juntos, podemos desarrollar enfoques integrales que aborden simultáneamente múltiples aspectos de los retos ambientales, desde la investigación básica hasta la implementación de soluciones prácticas.

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En un paso hacia la cooperación internacional en ciencia y conservación, recientemente se llevó a cabo un significativo encuentro en el Jardín Botánico de Bogotá. La directora de esta institución, María Claudia García Davila, recibió al viceministro del Ministerio Federal de Educación e Investigación de Alemania, Jens Brandenburg el pasado 20 de junio, para hablar sobre el interés mutuo de fortalecer lazos entre Colombia y Alemania, y destacar el papel crucial que juegan instituciones como los Jardines Botánicos en la investigación científica y la conservación de la biodiversidad.

En entrevista con El Espectador, la directora del Jardín Botánico de Bogotá, María Claudia García, compartió detalles sobre los objetivos que se buscan con esta colaboración para ambos países y lo que se viene para la institución en materia de investigación.

¿Cómo surgió la oportunidad de colaborar con el Ministerio Federal de Educación e Investigación de Alemania?

El Ministerio alemán se acercó al Jardín Botánico de Bogotá debido a nuestros convenios existentes con el Jardín Botánico de Berlín y la Agencia Alemana de Cooperación, entonces buscábamos una conversación más global sobre la colaboración en educación, investigación y ciencia entre Alemania y Colombia. Eso hizo que tuviéramos reuniones con una diputada alemana, la embajadora, y la visita del viceministro y su equipo. De hecho, durante estas reuniones, contamos con la presencia de Susan Schulz, directora para América de temas de cooperación científica y tecnológica y establecimos contacto para desarrollar una agenda estratégica con acciones específicas que implementaremos durante los próximos tres años y medio de la actual administración que busca generar 163 productos de investigación durante esta administración. Esperamos que muchos de estos se realicen en colaboración con Alemania.

¿Qué implicó ese trabajo anterior con el Jardín Botánico de Berlín y la Agencia de Cooperación Alemana (GIZ)?

Bueno, nosotros hemos trabajado en un convenio específico de intercambio con el Jardín Botánico de Berlín, que hemos desarrollado desde 2021 y continuaremos fortaleciendo, en donde hacemos y participamos en eventos académicos, publicaciones científicas conjuntas y el intercambio de personal para fortalecer nuestros conocimientos en ecología urbana y botánica. Además, tenemos también un convenio recién firmado con la Agencia Alemana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (GIZ), donde realizaremos una expedición botánica en La Macarena a través del programa ProBosque, para trabajar con comunidades locales que han estado colaborando con la GIZ para transformar sus prácticas agropecuarias en prácticas sostenibles y de conservación del bosque. Capacitaremos a estas comunidades en ciencia ciudadana, técnicas de agricultura, propagación de especies, y conservación, fortaleciendo su papel como guardianes del bosque amazónico.

Por otro lado, también nos reunimos con la embajadora de Alemania en Colombia y con una miembro del Parlamento alemán responsable de temas de ciencia y tecnología para la región de América. En estas reuniones, discutimos el fortalecimiento del Jardín Botánico en el contexto de la implementación de la Ley de Ciencia, Tecnología e Innovación y las recomendaciones de la Misión de Sabios sobre bioeconomía y la importancia de fortalecer nuestros centros de investigación.

¿Cuáles fueron los puntos claves que se acordaron en la reunión?

En nuestra reunión, exploramos el interés común entre Colombia y Alemania en desarrollar investigaciones e innovaciones tecnológicas para enfrentar los desafíos del cambio climático y es por ello que nos enfocamos en áreas como agricultura urbana, biotecnología, bioprospección y soluciones basadas en la naturaleza. Como funcionarios públicos y ciudadanos del mundo, tenemos la responsabilidad de actuar decisivamente para mitigar y adaptarnos al cambio climático. Además, con la próxima COP 16 en Cali, nos hemos comprometido con metas de conservación, incluyendo estrategias de conservación ex situ. Es por ello que los jardines botánicos juegan un papel crucial en esto, porque se debe fortalecer el conocimiento, las colecciones, los bancos de semillas y de germoplasma en el cuidado ambiental. Nosotros específicamente lo que estamos haciendo es que, con el Plan Distrital de Desarrollo de “Bogotá Camina Seguro” tenemos objetivos relevantes para la conservación y la ciencia, es por ello que buscamos fortalecer un ecosistema de ciencia, tecnología e innovación, con énfasis en medio ambiente y biodiversidad. Además, tenemos el mandato de consolidar el Jardín Botánico como centro de investigación ambiental en Colombia.

Alemania tiene mucho que ofrecer en términos de desarrollo científico. El Jardín Botánico de Berlín, con sus 200 años de historia en conservación de especímenes, es un ejemplo de su potencia en biología molecular y equipamiento de laboratorio avanzado. También tienen mucho que enseñarnos en horticultura. De hecho, algunos de nuestros funcionarios participaron en un intercambio en el Jardín Botánico de Berlín, aprendiendo técnicas de arte, cultura y manejo de abonos.

¿Cuáles son los retos o principales retos que frente al Jardín Botánico en materia de investigación y conservación de la flora?

El Jardín Botánico de Bogotá enfrenta el desafío de convertirse en un centro de ciencia, tecnología e innovación de primer nivel, según lo establecido en el Plan Distrital de Desarrollo. Nuestro objetivo es ser competitivos internacionalmente y proporcionar conocimiento básico y aplicado para abordar la triple crisis ambiental: climática, de biodiversidad y de contaminación.

¿Cómo piensan abordar estos retos con esta alianza?

Para lograr esto, estamos enfocándonos en tres líneas principales de investigación:

1. Biotecnología y bioprospección: Avanzamos significativamente en estas áreas para desarrollar soluciones innovadoras.
2. Cambio climático: Estudiamos tanto los impactos del cambio climático en la flora de Bogotá, los páramos y el bosque alto andino, como en especies de otros pisos térmicos que conservamos en nuestro tropicario. Además, investigamos soluciones de adaptación, manejo de plagas emergentes, propagación de especies para restauración de ecosistemas, y captura de carbono por la vegetación urbana.
3. Uso sostenible y agricultura urbana: Desarrollamos alternativas de seguridad alimentaria frente a la crisis ambiental, con el objetivo de aumentar nuestras huertas urbanas de 12,000 a 25,000.

¿Cuál es el próximo paso?

En cuanto a nuestra colaboración con el Ministerio de Investigación y Educación de Alemania, hemos dado el primer paso al acercar las voluntades entre ambas instituciones. Nuestro próximo paso es diseñar acciones específicas para desarrollar conjuntamente. Posteriormente, determinaremos el presupuesto, los indicadores y los mecanismos de seguimiento. Prevemos establecer un comité de seguimiento conjunto y realizar una rendición de cuentas y socialización de la información, aspectos que Alemania considera cruciales en sus cooperaciones. Aunque estamos en la etapa inicial, esperamos que esta colaboración se extienda al menos hasta 2028, construyendo una alianza sólida y duradera para enfrentar los desafíos ambientales y científicos que tenemos por delante.

Estamos convencidos de que al fortalecer la colaboración entre instituciones y países, multiplicamos exponencialmente nuestras capacidades para generar impactos reales y significativos. Nuestro compromiso es producir ciencia útil y aplicable que beneficie directamente a los ciudadanos, pero reconocemos que el verdadero potencial de transformación se alcanza a través del trabajo en equipo. Por ello esta colaboración no solo nos permite compartir conocimientos y recursos, sino que también nos inspira a pensar de manera más global y actuar de forma más estratégica. Juntos, podemos desarrollar enfoques integrales que aborden simultáneamente múltiples aspectos de los retos ambientales, desde la investigación básica hasta la implementación de soluciones prácticas.

🌳 ☘️ 🌿 Encuentre en La Huerta toda la información sobre plantas, jardinería, cultivos y siembra. 🍂🌺 🌼