Ocho plantas resistentes al sol que embellecerán su jardín
Estas plantas son resistentes al sol, perfectas para tenerlas en el exterior, y además no son exigentes en los cuidados.
Las plantas brindan una amplia gama de opciones que se ajustan a todos los gustos, desde flores exuberantes hasta variedades de follaje elegantes, capaces de transformar cualquier espacio exterior en un auténtico oasis verde. Elegir las plantas adecuadas es crucial no solo para crear un entorno excepcional, sino también para garantizar su supervivencia ante los desafíos climáticos.
Y es que una elección adecuada puede ser la clave entre un jardín vibrante y uno que lucha por prosperar. Por ello, antes de plantar, es fundamental considerar factores como la resistencia al sol, la tolerancia a temperaturas extremas, la capacidad para soportar la sequía y la adaptabilidad a diferentes tipos de suelo, ya que todos estos elementos influyen en el éxito del jardín.
En la Huerta le traemos una serié de opciones resistentes que requieren menos mantenimiento, perfectas para lograr un entorno bello, sin complicaciones.
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Astromelias
La Alstroemeria, también conocida como Astromelia, lirio del Perú o lirio de los Incas, es un género de plantas originarias de los Andes de Sudamérica. Esta planta tuberosa perenne se destaca por sus tallos erectos y flores que vienen en una variedad de colores, como blanco, rosa, amarillo, morado y naranja.
Esta planta se caracteriza por su notable tolerancia a la exposición solar, requiriendo abundante luz para lograr una floración óptima. Sin embargo, a pesar de esta afinidad, prospera mejor en ambientes frescos y húmedos, lo que la distingue de especies amantes del calor. De hecho, tiene temperatura específica, ya que prefiere climas donde las temperaturas diurnas ronden los 20°C, mientras que por la noche se siente cómoda con temperaturas entre 4°C y 10°C.
Flor de muerto:
Comúnmente conocida como cempasuchil o flor de muerto, la Tagetes erecta es una planta originaria de América Central y del Sur, apreciada por sus vibrantes colores amarillos y anaranjados, así como por sus propiedades repelentes de plagas, lo que la convierte en una opción ideal para el cultivo en huertos y jardines. Su nombre proviene del náhuatl “Cempohualxochitl”, que significa “flor de 20 pétalos”, y en la época prehispánica, los mexicas la asociaban con el sol.
Esta especie de la familia Asteraceae puede alcanzar alturas de entre 30 y 90 cm, con hojas pinnadas de color verde oscuro y flores grandes en forma de cabeza que van del amarillo brillante al naranja intenso. Para prosperar, necesita pleno sol, por ello debe asegurarse de que reciba al menos 6 horas de luz solar directa al día, con una temperatura ideal entre 26 °C y 32 °C.
Kalonchoe
El género Kalanchoe, de la familia Crasulaceae, incluye más de 125 especies reconocibles por sus hojas carnosas de un verde intenso y brillante, y una amplia gama de flores en tonos que varían desde rosa y naranja hasta blanco, rojo fucsia, amarillo e incluso combinaciones bicolores. Originarias de las regiones tropicales de África, especialmente Madagascar, estas plantas se destacan por su notable resistencia a la sequía.
En exteriores, las Kalanchoe se desempeñan excepcionalmente bien en zonas soleadas del jardín, terrazas o balcones. Pueden tolerar el sol directo, especialmente en climas más templados, aunque en regiones con climas calientes es aconsejable proporcionarles algo de sombra durante las horas más intensas del día para evitar quemaduras en las hojas.
Para su cultivo en interiores, estas plantas se adaptan sorprendentemente bien, siempre y cuando se les proporcione suficiente luz. Un lugar ideal sería cerca de una ventana orientada al sur o al este, donde puedan recibir abundante luz. En caso de que la iluminación natural sea insuficiente, se pueden utilizar luces de crecimiento para complementar sus necesidades lumínicas.
Crisantemo
El crisantemo, conocido científicamente como Chrysanthemum es un género de plantas perennes perteneciente a la familia Asteraceae, originario de Asia oriental, principalmente de China. Estas flores, conocidas también como “flores de noviembre”, se caracterizan por su amplia variedad de formas y colores, pues tienen una gama de tonos que incluye blanco, amarillo, naranja, rojo, rosa y púrpura.
Pueden alcanzar hasta 1,5 metros de altura y se adaptan bien a diversos climas. En cuanto a sus necesidades de luz, requieren al menos 5-6 horas de luz solar directa al día, prefiriendo lugares soleados pero tolerando también la sombra parcial.
Verbena
La verbena es una planta ornamental perteneciente a la familia Verbenaceae, con más de 250 especies conocidas. Estas se caracterizan por su resistencia y belleza, alcanzando alturas de 25 a 100 cm dependiendo de la especie. Además, sus flores, que pueden ser de colores variados como violeta, rosa, rojo o blanco, se agrupan en espigas y tienen una corola en forma de embudo.
En cuanto a sus cuidados, la verbena necesita abundante luz para desarrollarse plenamente, aunque en climas cálidos es recomendable evitar la exposición directa al sol durante las horas más intensas del día. Esta planta es conocida por ser adaptable y resistente, prosperando mejor en suelos ligeros y bien drenados, lo que favorece su crecimiento saludable y una floración abundante. Es importante mantener el suelo moderadamente húmedo, pero sin encharcamientos, para prevenir problemas en sus raíces.
Gazania
La gazania es un género de plantas perteneciente a la familia Asteraceae, originario del sur de África. Es conocida por su durabilidad y facilidad de cuidado, floreciendo casi todo el año en climas cálidos además que se destaca por tener flores vibrantes y distintivas, similares a las margaritas, que vienen en una variedad de colores como amarillo, naranja, rojo, rosa y blanco, a menudo con patrones distintivos.
Estas plantas se adaptan bien a diferentes condiciones climáticas, siendo especialmente tolerantes a la sequía. Requieren pleno sol para florecer adecuadamente y pueden soportar heladas esporádicas de hasta -5ºC.
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Caléndula
La caléndula, también conocida como maravilla o botón de oro, es una planta mediterránea herbácea de fácil cuidado y rápido crecimiento, apreciada en cosmética, medicina tradicional y gastronomía. Con una altura promedio de 65 cm y hojas ovaladas de hasta 10 cm, se caracteriza por sus flores amarillas o anaranjadas que se abren al amanecer y se cierran de noche. Su nombre proviene del latín “calendae”, reflejando su capacidad de florecer todos los meses.
Se caracterizan porque pueden soportar temperaturas de hasta -3°C. Sin embargo, requiere mucho sol para mantener una floración óptima. Por otro lado, es crucial proporcionarle suficiente espacio para el desarrollo de sus raíces, ya sea en interiores, cerca de una ventana bien iluminada o en exteriores.
Girasol
El girasol, conocido científicamente como Helianthus annuus, es una planta herbácea anual originaria de Centro y Norteamérica, cultivada en todo el mundo por sus usos alimenticios y ornamentales. Requiere una exposición constante al sol directo, necesitando como mínimo seis horas de luz solar diaria para un crecimiento adecuado, con unas temperaturas que ronden entre los 20 y 27 grados centígrados, aunque pueden tolerar temperaturas más altas con un riego más frecuente.
Como su nombre lo sugiere, los girasoles en su etapa juvenil presentan una notable característica: siguen el movimiento del sol, un fenómeno conocido como heliotropismo. Al amanecer, las flores se orientan hacia el este y, a medida que avanza el día, se desplazan hacia el oeste, volviendo a reorientarse hacia el este durante la noche. Este movimiento, impulsado por un ritmo circadiano sincronizado con la luz solar, persiste incluso en días nublados o bajo condiciones de iluminación constante. Sin embargo, al alcanzar la madurez, los girasoles dejan de seguir al sol y se orientan de manera permanente hacia el este.
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Las plantas brindan una amplia gama de opciones que se ajustan a todos los gustos, desde flores exuberantes hasta variedades de follaje elegantes, capaces de transformar cualquier espacio exterior en un auténtico oasis verde. Elegir las plantas adecuadas es crucial no solo para crear un entorno excepcional, sino también para garantizar su supervivencia ante los desafíos climáticos.
Y es que una elección adecuada puede ser la clave entre un jardín vibrante y uno que lucha por prosperar. Por ello, antes de plantar, es fundamental considerar factores como la resistencia al sol, la tolerancia a temperaturas extremas, la capacidad para soportar la sequía y la adaptabilidad a diferentes tipos de suelo, ya que todos estos elementos influyen en el éxito del jardín.
En la Huerta le traemos una serié de opciones resistentes que requieren menos mantenimiento, perfectas para lograr un entorno bello, sin complicaciones.
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Astromelias
La Alstroemeria, también conocida como Astromelia, lirio del Perú o lirio de los Incas, es un género de plantas originarias de los Andes de Sudamérica. Esta planta tuberosa perenne se destaca por sus tallos erectos y flores que vienen en una variedad de colores, como blanco, rosa, amarillo, morado y naranja.
Esta planta se caracteriza por su notable tolerancia a la exposición solar, requiriendo abundante luz para lograr una floración óptima. Sin embargo, a pesar de esta afinidad, prospera mejor en ambientes frescos y húmedos, lo que la distingue de especies amantes del calor. De hecho, tiene temperatura específica, ya que prefiere climas donde las temperaturas diurnas ronden los 20°C, mientras que por la noche se siente cómoda con temperaturas entre 4°C y 10°C.
Flor de muerto:
Comúnmente conocida como cempasuchil o flor de muerto, la Tagetes erecta es una planta originaria de América Central y del Sur, apreciada por sus vibrantes colores amarillos y anaranjados, así como por sus propiedades repelentes de plagas, lo que la convierte en una opción ideal para el cultivo en huertos y jardines. Su nombre proviene del náhuatl “Cempohualxochitl”, que significa “flor de 20 pétalos”, y en la época prehispánica, los mexicas la asociaban con el sol.
Esta especie de la familia Asteraceae puede alcanzar alturas de entre 30 y 90 cm, con hojas pinnadas de color verde oscuro y flores grandes en forma de cabeza que van del amarillo brillante al naranja intenso. Para prosperar, necesita pleno sol, por ello debe asegurarse de que reciba al menos 6 horas de luz solar directa al día, con una temperatura ideal entre 26 °C y 32 °C.
Kalonchoe
El género Kalanchoe, de la familia Crasulaceae, incluye más de 125 especies reconocibles por sus hojas carnosas de un verde intenso y brillante, y una amplia gama de flores en tonos que varían desde rosa y naranja hasta blanco, rojo fucsia, amarillo e incluso combinaciones bicolores. Originarias de las regiones tropicales de África, especialmente Madagascar, estas plantas se destacan por su notable resistencia a la sequía.
En exteriores, las Kalanchoe se desempeñan excepcionalmente bien en zonas soleadas del jardín, terrazas o balcones. Pueden tolerar el sol directo, especialmente en climas más templados, aunque en regiones con climas calientes es aconsejable proporcionarles algo de sombra durante las horas más intensas del día para evitar quemaduras en las hojas.
Para su cultivo en interiores, estas plantas se adaptan sorprendentemente bien, siempre y cuando se les proporcione suficiente luz. Un lugar ideal sería cerca de una ventana orientada al sur o al este, donde puedan recibir abundante luz. En caso de que la iluminación natural sea insuficiente, se pueden utilizar luces de crecimiento para complementar sus necesidades lumínicas.
Crisantemo
El crisantemo, conocido científicamente como Chrysanthemum es un género de plantas perennes perteneciente a la familia Asteraceae, originario de Asia oriental, principalmente de China. Estas flores, conocidas también como “flores de noviembre”, se caracterizan por su amplia variedad de formas y colores, pues tienen una gama de tonos que incluye blanco, amarillo, naranja, rojo, rosa y púrpura.
Pueden alcanzar hasta 1,5 metros de altura y se adaptan bien a diversos climas. En cuanto a sus necesidades de luz, requieren al menos 5-6 horas de luz solar directa al día, prefiriendo lugares soleados pero tolerando también la sombra parcial.
Verbena
La verbena es una planta ornamental perteneciente a la familia Verbenaceae, con más de 250 especies conocidas. Estas se caracterizan por su resistencia y belleza, alcanzando alturas de 25 a 100 cm dependiendo de la especie. Además, sus flores, que pueden ser de colores variados como violeta, rosa, rojo o blanco, se agrupan en espigas y tienen una corola en forma de embudo.
En cuanto a sus cuidados, la verbena necesita abundante luz para desarrollarse plenamente, aunque en climas cálidos es recomendable evitar la exposición directa al sol durante las horas más intensas del día. Esta planta es conocida por ser adaptable y resistente, prosperando mejor en suelos ligeros y bien drenados, lo que favorece su crecimiento saludable y una floración abundante. Es importante mantener el suelo moderadamente húmedo, pero sin encharcamientos, para prevenir problemas en sus raíces.
Gazania
La gazania es un género de plantas perteneciente a la familia Asteraceae, originario del sur de África. Es conocida por su durabilidad y facilidad de cuidado, floreciendo casi todo el año en climas cálidos además que se destaca por tener flores vibrantes y distintivas, similares a las margaritas, que vienen en una variedad de colores como amarillo, naranja, rojo, rosa y blanco, a menudo con patrones distintivos.
Estas plantas se adaptan bien a diferentes condiciones climáticas, siendo especialmente tolerantes a la sequía. Requieren pleno sol para florecer adecuadamente y pueden soportar heladas esporádicas de hasta -5ºC.
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Caléndula
La caléndula, también conocida como maravilla o botón de oro, es una planta mediterránea herbácea de fácil cuidado y rápido crecimiento, apreciada en cosmética, medicina tradicional y gastronomía. Con una altura promedio de 65 cm y hojas ovaladas de hasta 10 cm, se caracteriza por sus flores amarillas o anaranjadas que se abren al amanecer y se cierran de noche. Su nombre proviene del latín “calendae”, reflejando su capacidad de florecer todos los meses.
Se caracterizan porque pueden soportar temperaturas de hasta -3°C. Sin embargo, requiere mucho sol para mantener una floración óptima. Por otro lado, es crucial proporcionarle suficiente espacio para el desarrollo de sus raíces, ya sea en interiores, cerca de una ventana bien iluminada o en exteriores.
Girasol
El girasol, conocido científicamente como Helianthus annuus, es una planta herbácea anual originaria de Centro y Norteamérica, cultivada en todo el mundo por sus usos alimenticios y ornamentales. Requiere una exposición constante al sol directo, necesitando como mínimo seis horas de luz solar diaria para un crecimiento adecuado, con unas temperaturas que ronden entre los 20 y 27 grados centígrados, aunque pueden tolerar temperaturas más altas con un riego más frecuente.
Como su nombre lo sugiere, los girasoles en su etapa juvenil presentan una notable característica: siguen el movimiento del sol, un fenómeno conocido como heliotropismo. Al amanecer, las flores se orientan hacia el este y, a medida que avanza el día, se desplazan hacia el oeste, volviendo a reorientarse hacia el este durante la noche. Este movimiento, impulsado por un ritmo circadiano sincronizado con la luz solar, persiste incluso en días nublados o bajo condiciones de iluminación constante. Sin embargo, al alcanzar la madurez, los girasoles dejan de seguir al sol y se orientan de manera permanente hacia el este.
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