Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
El jengibre, conocido principalmente por sus aplicaciones culinarias y medicinales, también puede desempeñar un papel importante en la jardinería. Este rizoma contribuye a mejorar la salud del suelo, estimula el crecimiento de las plantas y fortalece su resistencia a enfermedades. Su uso en el cuidado de las plantas ofrece una alternativa natural para optimizar su desarrollo y mantener su bienestar.
De acuerdo con un estudio titulado ‘Effects of Ginger Extract on Growth and Disease Resistance of Tomato and Pepper Plants’ (Efectos del extracto de jengibre sobre el crecimiento y la resistencia a enfermedades de plantas de tomate y pimiento), publicado en 2022 en Journal of Plant Nutrition, son varios los beneficios del jengibre en las plantas. El estudio utilizó varios métodos para investigar el impacto del extracto de jengibre en las plantas: prepararon el extracto de jengibre a partir de rizomas frescos, que se mezclaron con agua y se filtraron para obtener la solución utilizada en los experimentos, se aplicó al suelo en el que crecían las plantas, se establecieron parcelas de control sin tratamiento con extracto de jengibre para comparar los resultados y se midieron diversos parámetros de crecimiento, incluyendo la altura de las plantas, el número de hojas y el peso de los frutos. De acuerdo con el estudio, sus beneficios son:
🍂🌺 🌼Le podría interesar: La huerta que funciona como aula libre en el Magdalena
Mejora del crecimiento vegetal: Las plantas tratadas con extracto de jengibre crecieron un 30% más altas en comparación con las plantas de control. Las plantas tratadas también desarrollaron un 25% más de hojas. Además, alcanzaron una altura promedio de 60 cm en lugar de 45 cm, y las plantas de pimientos produjeron un follaje denso con un promedio de 15 hojas frente a 12 en el grupo de control.
Aumento de la producción de frutos: Las plantas tratadas produjeron un 40% más de frutos en comparación con las no tratadas. Los frutos también mostraron un tamaño ligeramente mayor. Las plantas produjeron un promedio de 25 frutos por planta, frente a 18 frutos en el grupo de control, y los frutos de pimiento aumentaron de 10 a 14 por planta.
Fortalecimiento de la resistencia a enfermedades: Se registró una reducción del 50% en la aparición de manchas foliares y un 60% menos de infecciones bacterianas. En las plantas tratadas, la incidencia de manchas foliares se redujo del 30% al 15%, y las infecciones bacterianas disminuyeron del 20% al 8% en comparación con las plantas no tratadas.
Mejora en la salud del suelo: El extracto de jengibre mejoró la calidad del suelo al aumentar la actividad microbiana, lo que favoreció la absorción de nutrientes. Se observó un incremento del 20% en la disponibilidad de nutrientes clave como nitrógeno y fósforo. Los niveles de nitrógeno en el suelo aumentaron de 1.2 g/kg a 1.5 g/kg, y el fósforo pasó de 0.8 g/kg a 1.0 g/kg en las parcelas tratadas con jengibre.
Incremento en la producción de antioxidantes: Las plantas tratadas con extracto de jengibre mostraron un aumento del 35% en los niveles de antioxidantes, lo que contribuyó a una mejor resistencia al estrés ambiental como temperaturas extremas y sequías. Los niveles de antioxidantes en las hojas de las plantas tratadas se elevaron de 2.5 mg/g a 3.4 mg/g, mejorando la capacidad de las plantas para resistir condiciones adversas y promover una salud general óptima.
Paso a paso para utilizarlo
El estudio ‘Application Methods and Benefits of Ginger Extract in Plant Cultivation’, realizado por investigadores de la Universidad de Agricultura de China y publicado en el Journal of Horticultural Science, expone que el paso a paso para utilizarlo varía según el tipo de planta:
- Plantas de hortalizas (como tomates y pimientos): Para hortalizas, se recomienda aplicar el extracto de jengibre al suelo y utilizar la aplicación foliar. La combinación de estas técnicas puede ayudar a estimular el crecimiento y mejorar la resistencia a enfermedades comunes en estas plantas. Utilice extractos diluidos al 1:5 para el riego y al 1:10 para el rociado foliar. La frecuencia puede ser semanal para el riego y cada 10-14 días para el rociado.
- Plantas ornamentales (como rosas y plantas de interior): En plantas ornamentales, la aplicación foliar suele ser más efectiva, ya que muchas de estas plantas tienen sistemas radiculares menos profundos o son sensibles a cambios en el suelo. Utilice una dilución menor, como 1:10 para el riego y 1:20 para el rociado foliar, para evitar posibles daños a las hojas delicadas. La aplicación foliar puede realizarse cada 2-3 semanas para mantener una apariencia saludable y vigorosa.
- Plantas frutales (como manzanas y cítricos): Las plantas frutales pueden beneficiarse tanto de aplicaciones al suelo como foliares, pero es crucial no sobrecargar el suelo con extracto de jengibre, ya que esto puede afectar el desarrollo de las raíces. Use una solución más diluida, como 1:10 para el riego y 1:15 para el rociado foliar. La aplicación al suelo puede ser mensual, mientras que la foliar puede realizarse cada 2-4 semanas, dependiendo del estado de la planta.
- Plantas Aromáticas y Medicinales (como albahaca y menta): Para estas plantas, la aplicación foliar es generalmente preferida, ya que muchas tienen raíces superficiales y pueden ser sensibles a cambios en el sustrato. Utilice diluciones de 1:15 para riego y 1:20 para el rociado foliar para evitar efectos adversos. Aplique cada 10-14 días para mantener una salud óptima y promover un crecimiento robusto.
Aunque el jengibre no es conocido por tener un efecto drástico sobre el suelo como algunas otras plantas, sus raíces y hojas pueden influir en el ecosistema del suelo de varias maneras. De acuerdo con Miguel Monsalve, uno de los coordinadores de jardinería de la Universidad Externado de Colombia, “el jengibre tiene compuestos bioactivos, como gingerol y shogaol, que pueden tener efectos antifúngicos. Estos compuestos alteran la composición microbiana del suelo al inhibir el crecimiento de ciertos patógenos del suelo, lo que podría beneficiar a otras plantas cercanas al reducir la presión de enfermedades. Al descomponerse, las hojas y raíces del jengibre aportan materia orgánica al suelo, enriqueciéndolo al aumentar su capacidad de retención de agua y su contenido de nutrientes, lo que a su vez puede favorecer a otros organismos del suelo, como lombrices y microorganismos benéficos” dijo Monsalve en entrevista con El Espectador.
Además, hay que tener en cuenta que el jengibre prospera en suelos bien drenados con una textura arenosa o limosa. Los suelos arcillosos y mal drenados pueden retener demasiada humedad, lo que aumenta el riesgo de que al utilizase ocasione enfermedades radiculares como la pudrición.
Riesgos de utilizar el jengibre en las plantas
Según Monsaleve, el uso de jengibre en la jardinería puede presentar algunos riesgos, aunque estos no son generalmente graves, están relacionados principalmente con la interacción del jengibre con otras plantas y el ecosistema del suelo.
Efectos sobre la microbiota del suelo: Aunque el jengibre tiene compuestos bioactivos que pueden ser beneficiosos al reducir patógenos del suelo, estos mismos compuestos también pueden alterar la microbiota del suelo de manera que no siempre sea beneficiosa para todas las plantas. Un cambio en la composición microbiana del suelo puede afectar la disponibilidad de nutrientes y la salud general del ecosistema edáfico.
Enfermedades y plagas: El jengibre puede ser susceptible a ciertas enfermedades y plagas, como la pudrición de rizomas y la infestación de nematodos. Si el jengibre no se maneja adecuadamente, estas enfermedades y plagas pueden propagarse a otras plantas en el área. Es importante practicar una buena gestión de cultivos y monitorear regularmente las plantas para detectar y controlar problemas antes de que se vuelvan graves.
Propagación de patógenos: El uso de rizomas de jengibre infectados para la siembra puede propagar patógenos a nuevas áreas. Es fundamental asegurarse de que los rizomas sean sanos y estén libres de enfermedades antes de plantarlos. Además, el manejo adecuado de residuos vegetales y la rotación de cultivos pueden ayudar a prevenir la propagación de enfermedades.
Alteración del pH del suelo: Aunque el jengibre prefiere suelos ligeramente ácidos a neutros, su presencia no debería alterar drásticamente el pH del suelo. Sin embargo, si se cultiva en grandes cantidades y se acumula una cantidad significativa de materia orgánica en descomposición, esto podría tener un impacto menor en el pH del suelo a lo largo del tiempo. Es importante monitorear el pH del suelo y ajustar las prácticas de manejo según sea necesario.
🌳 ☘️ 🌿 Encuentre en La Huerta toda la información sobre plantas, jardinería, cultivos y siembra. 🍂🌺 🌼