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¿Para qué sirven la canela y los clavos de olor en las plantas?

Pueden beneficiar a su planta al ser usados al mismo tiempo, o por separado. Conozca el por qué y cómo puede usarlos en sus plantas.

La  Huerta
15 de junio de 2024 - 02:00 p. m.
La combinación de canela y clavos de olor puede ser una herramienta poderosa para el cuidado de diversas plantas, ayudando a prevenir enfermedades y repeler plagas de manera natural. Al seguir las recomendaciones y precauciones adecuadas, puede maximizar los beneficios y mantener sus plantas saludables y prósperas.
La combinación de canela y clavos de olor puede ser una herramienta poderosa para el cuidado de diversas plantas, ayudando a prevenir enfermedades y repeler plagas de manera natural. Al seguir las recomendaciones y precauciones adecuadas, puede maximizar los beneficios y mantener sus plantas saludables y prósperas.
Foto: Getty Images

A pesar de ser distintos, la canela y los clavos pueden beneficiar a las plantas si se usan al mismo tiempo en las plantas.“La combinación de canela y clavos de olor puede proporcionar un enfoque holístico y natural para el cuidado de las plantas. Mientras que la canela es excelente para la prevención de enfermedades y la promoción del enraizamiento, los clavos de olor ofrecen un control eficaz de plagas y protección antimicrobiana. Utilizar ambos en conjunto puede potenciar sus efectos y ofrecer una protección más amplia y robusta para las plantas”, explica Andrea Nieto, horticultora de la jardinería Piero Jardinero.

Dos ejemplos de cómo se pueden usar la canela y los clavos de olor son los siguientes:

Spray Antimicrobiano: Para su preparación, la canela en polvo y clavos de olor se usan triturados en agua caliente, dejándolos reposar hasta que el agua esté impregnada con sus propiedades. Este spray puede aplicarse en las hojas y el suelo para combatir enfermedades y repeler insectos.

Tratamiento de Semillas: Remojar las semillas en una solución de canela y clavos de olor antes de plantarlas puede ayudar a prevenir enfermedades, tales como la verticilosis, podredumbre blanda, pie negro, durante la germinación y el crecimiento inicial.

No obstante, Nieto expuso que hay que tener precauciones al momento de usar los clavos de olor y la canela al tiempo:

  • No los combine con pesticidas comerciales.
  • El pH del suelo se verá alterado al usar clavos de olor y canela, por lo cual, debe monitorearlo frecuentemente.
  • No es necesario aplicar canela o clavos de olor con demasiada frecuencia. Una aplicación cada tres semanas semanas suele ser suficiente para la mayoría de los problemas. El uso excesivo puede llevar a una acumulación de compuestos en el suelo, lo cual podría ser perjudicial.
  • Revise que las plantas no muestran síntomas de estrés, tales como el de tomar un color amarillento en sus hojas.
  • No guarde los restos de canela y clavos de olor en lugares húmedos, sólo en los secos, pues únicamente de esta forma conservarán sus nutrientes para las plantas.
  • Use guantes y gafas para proteger a su piel y ojos de posibles irritaciones

Nieto señala que hay que tener en cuenta que no todas las plantas tienen la misma reacción a los clavos de olor y canela. De acuerdo con ella, en estas especies el uso de esos elementos a tiempo puede ser muy beneficioso para las plantas.

Tomates: ayudan a prevenir infecciones fúngicas comunes en los tomates, como el mildiu y la pudrición del cuello, además de repeler insectos como pulgones y ácaros, que pueden dañar las hojas y los frutos.

Rosas: ayudan a tratar cortes y heridas de poda, previniendo infecciones y promoviendo una cicatrización rápida y actúan como un repelente natural contra pulgones y escarabajos, protegiendo los capullos y flores.

Plantas de Interior (como Helechos y Pothos): Ayudan a prevenir el moho y las infecciones fúngicas en ambientes húmedos, que son comunes en plantas de interior. Además, repelen plagas comunes de plantas de interior, como los ácaros y las moscas de la fruta.

Plantas de Hierbas (como Albahaca y Menta): Previenen infecciones fúngicas que pueden afectar a las hierbas, especialmente en condiciones de alta humedad, y ayudan a mantener a raya a las plagas, permitiendo que las hierbas crezcan vigorosamente sin ser dañadas por insectos.

Pepinos: pueden prevenir enfermedades como la antracnosis y el oídio, que son comunes en los pepinos y repelen insectos como los escarabajos del pepino, protegiendo las plantas y los frutos.

Orquídeas: son útiles para tratar las heridas en las raíces y tallos durante el trasplante, previniendo infecciones, y actúan como repelente de plagas que pueden dañar las delicadas flores y hojas de las orquídeas.

Fresas: Previenen la pudrición del fruto y otras infecciones fúngicas y mantienen alejadas a las plagas que atacan los frutos y las hojas, como los ácaros y los escarabajos.

Canela

La canela, obtenida de la corteza de los árboles del género Cinnamomum, es famosa por su sabor y aroma distintivo. Sin embargo, sus propiedades antifúngicas y antibacterianas son lo que la hace valiosa en la jardinería. Estas propiedades pueden ayudar a prevenir y tratar las siguientes enfermedades causadas por hongos y bacterias, expone Nieto:

Prevención de Moho y Hongos: Estos son problemas comunes en las plantas, especialmente en ambientes húmedos. Espolvorear canela en la superficie del suelo o en las áreas afectadas puede ayudar a prevenir la proliferación de estos patógenos. La canela actúa como una barrera protectora, inhibiendo el crecimiento de esporas de hongos.

Además, la canela también contribuye al enraizamiento que es “el desarrollo de las raíces de las plantas durante todo su ciclo de vida”. También puede estimular el crecimiento de raíces en esquejes, un proceso esencial para la propagación de plantas. Para utilizar la canela como enraizante natural, se debe sumergir el extremo del esqueje en polvo de canela antes de plantarlo en el suelo o en un medio de cultivo. La canela no solo fomenta el desarrollo de nuevas raíces, sino que también protege el esqueje de posibles infecciones durante el proceso de enraizamiento.

Clavos de olor

Los clavos de olor son conocidos por sus usos medicinales y culinarios. Sin embargo, su potencial en la jardinería es igualmente impresionante. Contienen eugenol, un compuesto con fuertes propiedades antimicrobianas e insecticidas.

Repelente de insectos: El eugenol es eficaz para repeler una variedad de insectos. Para preparar un repelente natural, se pueden triturar clavos de olor y mezclarlos con agua, creando un spray que puede aplicarse directamente sobre las plantas. Este repelente es especialmente útil contra insectos como los pulgones y los ácaros, y es distinto del que se hace conjuntamente con la canela.

Tratamiento de Suelo: También pueden prevenir la aparición de plagas subterráneas. Simplemente enterrar unos cuantos clavos de olor alrededor de la base de las plantas puede ayudar a mantener alejadas a las plagas.

Control de Enfermedades: Al igual que la canela, los clavos de olor tienen propiedades antimicrobianas que los hacen útiles en la prevención y el tratamiento de enfermedades de las plantas. Preparar una infusión con clavos de olor y aplicarla sobre las hojas y el suelo puede ayudar a combatir infecciones fúngicas y bacterianas.

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