Permacultura: una sistema que ayuda a las huertas

Los beneficios que trae son sostenibilidad y autosuficiencia, mejora de la salud del suelo, conservación del agua, diversidad y resiliencia, y estética y paisajismo funcional

Foto: Radio Nacional de Colombia

La Permacultura es un sistema de diseño agrícola y social que se centra en el desarrollo sostenible de los sistemas humanos en armonía con la naturaleza. Fue desarrollada en los años 70 por Bill Mollison y David Holmgren como una respuesta a los desafíos ambientales y sociales emergentes, promoviendo la integración de patrones naturales y la diversidad biológica en la planificación de sistemas agrícolas y comunitarios.

De acuerdo con Permaculture Institute, se enfatiza la observación cuidadosa de la naturaleza y de los sistemas humanos existentes antes de intervenir en ellos. Las respuestas y diseños deben surgir de estas observaciones para maximizar la eficiencia y la sostenibilidad. La Permacultura se guía por tres principios éticos fundamentales: cuidado de la Tierra, promoviendo la reducción del impacto ambiental, cuidado de las personas con promoción de la equidad y la justicia social, y reparto justo de los excedentes distribución justa de recursos y productos. “Los sistemas permaculturales están diseñados de manera integrada, considerando tanto aspectos biológicos como sociales, económicos y culturales. Esto significa que se busca maximizar las interacciones beneficiosas entre todos los componentes del sistema” expone la organización en su sitio web, agregando que “se fomenta la diversidad biológica y funcional en los sistemas permaculturales, lo que aumenta su estabilidad y capacidad de adaptación frente a cambios y perturbaciones”.

Beneficios de la Permacultura en las huertas y flores

Gabriel Rubiano, consultor en Permacultura y quien ha trabajado proporcionando asesoramiento experto a comunidades o empresas interesadas en implementar prácticas y diseños permaculturales, señala algunos beneficios de este sistema en las huertas y flores

Sostenibilidad y autosuficiencia: La Permacultura promueve el uso de técnicas agrícolas que minimizan el impacto ambiental y reducen la dependencia de insumos externos, como fertilizantes sintéticos y pesticidas. Fomenta la producción local de alimentos, mejorando la seguridad alimentaria y reduciendo la huella de carbono asociada con el transporte de alimentos.

Mejora de la salud del suelo: Emplea prácticas como la rotación de cultivos, el mulching (cubierta del suelo) y la compostaje para aumentar la materia orgánica del suelo, mejorar su estructura y fertilidad. Esto conduce a suelos más sanos y vivos, que son fundamentales para el crecimiento vigoroso de plantas y la captura eficiente de agua y nutrientes.

Conservación del agua: Utiliza métodos como la captación de agua de lluvia, la construcción de swales (zanjas en contorno) y el diseño de sistemas de riego eficientes para conservar y distribuir el agua de manera óptima. Minimiza la evaporación y la escorrentía, manteniendo un suministro constante de agua para las plantas.

Diversidad y resiliencia: Fomenta la plantación de una variedad de cultivos y especies, lo que no solo aumenta la biodiversidad, sino que también mejora la resistencia a plagas y enfermedades. Los policultivos y las asociaciones beneficiosas entre plantas promueven interacciones positivas y reducen la necesidad de pesticidas.

Estética y paisajismo funcional: Integra principios de diseño permacultural para crear huertas estéticamente agradables que también sean funcionales y productivas. Utiliza plantas ornamentales y comestibles en combinaciones armoniosas que complementan el entorno natural y atraen polinizadores y fauna beneficiosa.

¿Cuál es el proceso de la Permacultura?

Según Rubiano, este es el proceso que lleva a cabo la Permacultura para su implementación:

1. Observación directa y detallada: Los permacultores pasan tiempo observando la naturaleza en diferentes escalas y en diferentes momentos del año. Esa observación se realiza detallando la estructura de la vegetación y la interacción entre especies, los ciclos del agua (evaporación, condensación, precipitación, escorrentía) y los nutrientes.
2. Análisis de patrones y procesos: Identificar patrones repetitivos y procesos clave que ocurren en los ecosistemas naturales. Estos incluyen ciclos de nutrientes, sucesión ecológica (proceso gradual y ordenado de cambio en la composición y estructura de las comunidades biológicas en un área determinada a lo largo del tiempo, relaciones de simbiosis entre especies), y la forma en que los elementos del paisaje interactúan entre sí.
3. Aplicación de principios ecológicos: La Permacultura utiliza los principios de diversidad, redundancia funcional y eficiencia energética, derivados de la ecología y la biología para entender cómo los ecosistemas mantienen la estabilidad y la productividad.
4. Modelos y herramientas de diseño: Se utilizan modelos conceptuales y herramientas prácticas para aplicar los patrones observados en el diseño de sistemas permaculturales. Estos incluyen el diseño en capas, la zonificación, y técnicas específicas de gestión del suelo y del agua que imitan procesos naturales.
5. Adaptación a condiciones locales: Por último, la Permacultura reconoce que los patrones pueden variar según las condiciones locales, como el clima, el tipo de suelo y la topografía. Por lo tanto, se adapta y ajusta los diseños según estas variables para maximizar la resiliencia y la productividad del sistema.

Métodos de implementación

Rubiano describe los siguientes métodos de implementación:

Diseño en capas y zonificación: La Permacultura emplea el diseño en capas para maximizar la eficiencia y la productividad del espacio. Esto implica colocar plantas en estratos verticales y horizontales, imitando los patrones encontrados en la naturaleza. La zonificación consiste en dividir el espacio en zonas según la frecuencia de uso y las necesidades de mantenimiento, colocando elementos más intensivos en mano de obra cerca del hogar y elementos más extensivos hacia las zonas periféricas.

Agricultura y jardinería ecológica: La Permacultura promueve métodos de cultivo que imitan los ecosistemas naturales, como la agricultura sin labranza, la rotación de cultivos, la asociación de cultivos y el uso de coberturas vegetales para mantener la fertilidad del suelo y reducir la erosión.

Agua y gestión de recursos hídricos: Se enfoca en técnicas de captación y gestión del agua, como la construcción de sistemas de captación de agua de lluvia, estanques y swales (zanjas en contorno), que ayudan a almacenar y redistribuir el agua de manera eficiente dentro del paisaje.

Manejo de desechos y compostaje: Se fomenta el compostaje y el reciclaje de materiales orgánicos para mantener la fertilidad del suelo y reducir la dependencia de fertilizantes sintéticos. Además, se promueve el manejo adecuado de residuos sólidos y líquidos para minimizar el impacto ambiental.

Diseño de bosques comestibles y sistemas agroforestales: La Permacultura incorpora la plantación de árboles y arbustos productivos en patrones que imitan los bosques naturales, creando sistemas agroforestales y bosques comestibles que proporcionan alimentos, combustible, materiales y hábitats para la fauna.

Arquitectura ecológica y diseño de hábitat humano: Se aplica en el diseño y la construcción de estructuras que utilizan materiales naturales y locales, técnicas de diseño pasivo para la regulación térmica y lumínica, y la integración de sistemas de agua y energía renovable.

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