Desde hace más de 20 años un oso panda gigante no tocaba tierra estadounidense. Sin embargo, la semana pasada dos de estos animales fueron trasladados desde China hasta el zoológico de San Diego, como parte de un acuerdo cooperativo para la protección de esta especie firmado entre China y Estados Unidos.
A finales de los años 50, China inició la llamada “diplomacia de los pandas”, una táctica que, sobre el papel, se presenta como una oportunidad para desarrollar un sistema cooperativo internacional a favor de la conservación del oso panda.
Las gigantes criaturas que hacen parte del acuerdo llevan el nombre de Yun Chuan y Xin Bao y fueron movilizadas mientras su país vuelve a usar osos blancos y negros como estrategia política. Así que se despidieron de su primer hogar en una ceremonia que se realizó el miércoles cerca de la Base del Panda Gigante de Bifengxia al suroeste de China.
Al evento asistieron representantes de los dos países involucrados. Luego, las cajas de los pandas fueron cargadas en un camión que se dirigió al aeropuerto de Chengdu, la capital provincial.
Todd Gloria, funcionario del lugar que cuidará a los animales en Estados Unidos, dijo que estaba “encantado” con el traslado de los animales y con la cooperación que ha habido con China en materia de pandas durante casi 30 años.
“Esto continúa nuestra larga historia de ser actores realmente positivos en la conservación de los animales en general, pero particularmente de los animales en peligro de extinción, como solían ser los pandas”, dijo en una entrevista a NBC.
La partida de los pandas fue secreto, hasta ahora, para evitar a las multitudes, incluidos fanáticos, cuyo entusiasmo por los osos puede llegar a ser obsesivo. Por su parte, funcionarios del Zoológico de San Diego dijeron que los osos, que estarán en sus manos por 10 años, no serán visibles para el público durante varias semanas mientras se instalan.
¿Qué se sabe de estos osos panda?
Yun Chuan es un macho de 4 años, “bastante extrovertido y animado. Le gusta interactuar con los cuidadores y, a menudo, corre cuando escucha sus pasos”, dijo Huang Shan, cuidador de pandas gigantes en las instalaciones de Ya’an.
Mientras que Xin Bao, una hembra de 3 es “un poco más introvertida, pero muy inteligente y alerta”, dijo Huang, quien agregó que “presta mucha atención a sonidos como el canto de los pájaros y el zumbido de los insectos”.
Los dos pandas “parecen gustarse”, comentó el experto, ya que pasaron “bastante tiempo” interactuando a través de un túnel de comunicación durante su cuarentena previa a la salida. Durante su período de cuarentena en China, las criaturas recibieron atención médica y capacitación, incluido el aprendizaje de comandos en inglés.
El equipo chino pasará unos tres meses en San Diego ayudando a los pandas a instalarse. En Estados Unidos, sin embargo, tendrán que acostumbrarse a variedades de bambú diferentes a las de Sichuan, lo que puede resultar especialmente difícil para Yun Chuan, que es quisquilloso con la comida.
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