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Un caso de presunto maltrato animal tiene consternada a la comunidad de La Paz, en Bolivia. El Ministerio Público de ese país intervino y allanó un presunto refugio de animales, donde se encontraron 11 gatos muertos en un refrigerador y otros cuatro en estado de putrefacción en el baño del inmueble. La Fiscalía ha iniciado una investigación por biocidio y maltrato animal.
Según informó el medio de comunicación RTP Bolivia, el hecho ocurrió en una vivienda ubicada en la zona de Cotahuma, donde en un primer momento se encontraron a 19 perros y 25 gatos. Sin embargo, tras revisar las dependencias, las autoridades descubrieron los cuerpos de 11 felinos que estaban congelados en un refrigerador, mientras que otros se encontraban en avanzado estado de descomposición en el baño.
Una mujer que ocupaba la vivienda junto a los animales fue detenida por ser sospechosa de los delitos de biocidio y maltrato animal. De acuerdo con las autoridades, la presunta responsable de los hechos no pudo explicar qué hacía con los 11 animales congelados y los que estaban vivos.
En una conferencia de prensa realizada el pasado jueves, 5 de diciembre, el fiscal encargado del caso, Ronald Jurado, informó que la casa fungía supuestamente como un refugio de animales, aunque no contaba con ninguno de los permisos necesarios, ni tampoco tenía las condiciones adecuadas.
“Entendemos que los propietarios no vivirían acá y esta vivienda estaría siendo alquilada por la señora”, reveló Jurado. “Estamos comenzando con la investigación, pero ella es, hasta el momento, la principal sospechosa. Vamos a pedir que apliquen medidas cautelares, lo que esperamos que se logre mañana”, anunció.
El fiscal también aseguró que, aunque por el momento no hay nada comprobado, este sería uno de los casos de biocidio más graves de este año en La Paz. El caso fue denunciado el lunes, aparentemente por vecinos y defensores de los derechos de los animales. El miércoles se consiguió la autorización para que la Policía y el fiscal Jurado pudiesen allanar la mencionada vivienda.
Por su parte, según revelaron las autoridades, los 44 animales vivos que se encontraban en la vivienda (19 caninos y 25 felinos) fueron trasladados a Zoonosis por la Policía Forestal y de Medio Ambiente (Pofoma) para recibir atención veterinaria.
Jurado explicó que los caninos y felinos se encontraban en mal estado. “Vivían hacinados en un espacio pequeño. Algunos presentaban lesiones”, añadió.
Se esperará que Zoonosis termine la evaluación y logre tratar las enfermedades de los animales. Una vez logrado eso, Jurado abrió la posibilidad de que ciudadanos responsables puedan adoptar algunos de los animales. “No se tiene la capacidad para alojar, indefinidamente, a tal cantidad de perros y gatos”, reconoció.
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