La historia del gatito al que sus compañeros de refugio le salvaron la vida
Earnie y sus amigos felinos son la muestra de como el amor puede ayudar a sanar.
Earnie, un gatito de menos de un año, fue abandonado en una clínica veterinaria. Tras una cirugía para salvarle la vida por un bloqueo urinario, el refugio Alley Cat Rescue, ubicado en Maryland, Estados Unidos, lo acogió. Con el apoyo de voluntarios solidarios, este felino de ojos azules comenzó un nuevo capítulo en un hogar temporal.
Allí conoció a Persimmon, una gatita muy amigable y alegre que instantáneamente se acerco a él, llenándolo de mimos y caricias. Earnie quedó fascinado con Persimmon, no se separaba de ella en todo el día. “Lo reclamó como compañero de abrazos y lo ayudó en su recuperación con sus dulces ronroneos y amor”, comentaron los voluntarios en las redes sociales del refugio.
Su familia de acogida notó rápidamente cuánto adoraba a otros gatos por lo que Earnie se recuperó rápidamente de la cirugía y volvió a ser el mismo felino juguetón y travieso.
Le encantan las cajas de cartón, pues en ellas toma largas siestas. No hay un momento en el que Earnie se sienta solo, con Persimmon y los voluntarios atendiendo sus necesidades, casi se puede ver una sonrisa en su cara.
Persimmon no fue la única en ayudar. Copper, una gata atigrada, comenzó a acercarse a Earnie para completar este grupo de cariño. “Ama a otros gatitos y a todos los que conoce les da dulces cabezazos. Parece que está protegiendo a Earnie aquí, y a él le encanta, a pesar de que Copper es más pequeña que él. Ella da energía de ‘mamá gata’”, explicaron los voluntarios en redes sociales.
Earnie se ha convertido en el compañero de siesta favorito del refugio, encajando en cualquier espacio ya ocupado por otro gato. A sus amigos felinos les cae bien y no les importa que se les eche encima.
“Él sabe que es amado y protegido en Alley Cat Rescue. Puede que necesite un poco más de atención médica, y está bien. Otros gatitos lo aman, él los ama y nosotros también lo amamos”, afirman en el refugio.
Ahora, hace parte del equipo felino de la oficina, Earnie “asiste” a humanos, acostándose frente a la computadora con un compañero felino. Los mimos abundan en cualquier lugar en el que esté Earnie.
La naturaleza amigable y afectuosa de Earnie se ha ido contagiando a otros gatitos. El felino está mejorando, rodeado de amigos cariñosos y solidarios. Ahora, patrulla la oficina con su pandilla felina, ofreciendo suaves abrazos y cabezazos, llenando el refugio de ronroneos a lo largo del día.
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Earnie, un gatito de menos de un año, fue abandonado en una clínica veterinaria. Tras una cirugía para salvarle la vida por un bloqueo urinario, el refugio Alley Cat Rescue, ubicado en Maryland, Estados Unidos, lo acogió. Con el apoyo de voluntarios solidarios, este felino de ojos azules comenzó un nuevo capítulo en un hogar temporal.
Allí conoció a Persimmon, una gatita muy amigable y alegre que instantáneamente se acerco a él, llenándolo de mimos y caricias. Earnie quedó fascinado con Persimmon, no se separaba de ella en todo el día. “Lo reclamó como compañero de abrazos y lo ayudó en su recuperación con sus dulces ronroneos y amor”, comentaron los voluntarios en las redes sociales del refugio.
Su familia de acogida notó rápidamente cuánto adoraba a otros gatos por lo que Earnie se recuperó rápidamente de la cirugía y volvió a ser el mismo felino juguetón y travieso.
Le encantan las cajas de cartón, pues en ellas toma largas siestas. No hay un momento en el que Earnie se sienta solo, con Persimmon y los voluntarios atendiendo sus necesidades, casi se puede ver una sonrisa en su cara.
Persimmon no fue la única en ayudar. Copper, una gata atigrada, comenzó a acercarse a Earnie para completar este grupo de cariño. “Ama a otros gatitos y a todos los que conoce les da dulces cabezazos. Parece que está protegiendo a Earnie aquí, y a él le encanta, a pesar de que Copper es más pequeña que él. Ella da energía de ‘mamá gata’”, explicaron los voluntarios en redes sociales.
Earnie se ha convertido en el compañero de siesta favorito del refugio, encajando en cualquier espacio ya ocupado por otro gato. A sus amigos felinos les cae bien y no les importa que se les eche encima.
“Él sabe que es amado y protegido en Alley Cat Rescue. Puede que necesite un poco más de atención médica, y está bien. Otros gatitos lo aman, él los ama y nosotros también lo amamos”, afirman en el refugio.
Ahora, hace parte del equipo felino de la oficina, Earnie “asiste” a humanos, acostándose frente a la computadora con un compañero felino. Los mimos abundan en cualquier lugar en el que esté Earnie.
La naturaleza amigable y afectuosa de Earnie se ha ido contagiando a otros gatitos. El felino está mejorando, rodeado de amigos cariñosos y solidarios. Ahora, patrulla la oficina con su pandilla felina, ofreciendo suaves abrazos y cabezazos, llenando el refugio de ronroneos a lo largo del día.
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