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Los diez errores más comunes que se cometen con el arenero del gato

Los felinos necesitan un entorno limpio y cómodo, pero muchas veces se comenten descuidos que pueden afectarlos. ¿Quiere saber cuáles son y cómo evitarlos?

La Red Zoocial
12 de octubre de 2024 - 12:00 p. m.
La caja de arena debe estar siempre en un lugar de fácil acceso para nuestro gatito.
La caja de arena debe estar siempre en un lugar de fácil acceso para nuestro gatito.
Foto: GettyImages

Los dueños de gatos siempre queremos lo mejor para nuestros peluditos, pero a veces, sin saberlo, caemos en malas prácticas que podrían afectarlos. En La Red Zoocial, le compartimos los errores más comunes que solemos cometer con la caja de arena y cómo evitarlos para garantizar el bienestar de nuestros felinos.

  1. Elegir una caja muy pequeña: muchas veces, preferimos un arenero demasiado pequeño para no ocupar mucho espacio en casa. Sin embargo, esto es un grave error porque puede generarle incomodidad a nuestro felino. Según Zona Gatos, lo ideal es que la caja sea al menos 1,5 veces más larga que el cuerpo del felino y lo suficientemente ancha para que el gato pueda dar la vuelta dentro de ella.
  2. Poner el arenero junto a la comida: este error es bastante común y puede tener un impacto muy negativo para la salud de nuestro minino. Es importante procurar que la caja de arena esté bastante distanciada de los platos de comida para evitar la proliferación de bacterias e infecciones.
  3. No poner la cantidad de arena correcta: la profundidad de la arena es un factor crucial para la comodidad de los gatos. Se aconseja que la arena ocupe de 5 a 7 cm de altura. Una cantidad insuficiente puede resultar incómoda y provocar que el peludito evite usarla, mientras que una cantidad excesiva puede llevar a que se derrame fuera de la caja.
  4. Colocar la caja en un lugar concurrido: los animales necesitan un lugar tranquilo y relajado para hacer sus necesidades, de lo contrario, estarán incómodos y se sentirán amenazados en el proceso. Es fundamentar evitar poner el arenero en pasillos o cerca a elementos ruidosos como la lavadora.
  5. Elegir el arenero incorrecto: algunas cajas suelen venir con los lados muy altos para evitar que la arena se salga, sin embargo, esto es un grave error, ya que le dificulta al gato la entrada y salida, especialmente cuando nuestro peludito es de una edad ya avanzada. Le recomendamos elegir una caja que tenga un lado más bajo para facilitar el ingreso.
  6. No limpiar la caja: es fundamental limpiar la caja de arena diariamente. La acumulación de desechos puede provocar olores desagradables y atraer bacterias, lo que podría resultar en infecciones o enfermedades en nuestro gatito. Es importante retirar los desechos cada día y limpiar la caja de forma regular para mantenerla en óptimas condiciones.
  7. Esconder la caja de arena: como dijimos anteriormente, la caja de arena no debe estar en un lugar concurrido, sin embargo, esto no significa que deba estar oculta, ni mucho menos, tapada. La caja debe estar siempre al alcance de nuestros gatitos y debe tener visibilidad periférica. Como indican en Zona Gatos, “el momento de ir al baño es un momento de vulnerabilidad para ellos, por eso necesitan poder usar todos los sentidos posibles para saber si hay alguna amenaza”.
  8. Cambiar de lugar la caja: mover la caja de arena frecuentemente puede causar confusión y estrés en tu gato. Si su felino no puede encontrar su arenero, es probable que busque otro sitio para hacer sus necesidades, lo que puede resultar en problemas de comportamiento. Intente mantener la caja en un lugar estable y familiar, de modo que su gato se sienta seguro y cómodo al usarla.
  9. No tener otra caja de arena: si hay algún problema con la caja de arena y solo hay una en casa, nuestro gato no tendrá alternativa. Esto puede ser especialmente problemático en hogares con múltiples gatos, ya que pueden pelear por el acceso a un solo arenero. Es recomendable tener al menos una caja adicional, lo que ayudará a evitar conflictos y asegurará que todos tengan acceso a un lugar limpio para hacer sus necesidades.
  10. Dejarla en un lugar húmedo: la humedad puede afectar la calidad de la arena y crear un ambiente poco higiénico para nuestro gato. Además, un entorno húmedo puede ser incómodo y potencialmente perjudicial para la salud del felino.

Al evitar estas malas prácticas y seguir las recomendaciones adecuadas, no solo garantizamos un entorno más limpio y cómodo para nuestros felinos, sino que también promovemos su bienestar y felicidad

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