¿Por qué mi gato ya no quiere dormir conmigo?
¿Su gato dormía con usted todos los días y de repente dejó de hacerlo? No se preocupe, le contamos por qué sucede esto y cómo puede solucionarlo.
Si usted está leyendo esto, muy probablemente se esté preguntando qué hizo “mal” para que su gato dejara de dormir al lado suyo en las noches. Por eso, lo primero que debe saber es que no hizo nada malo (y que su gatito tampoco lo odia), esta situación es más común de lo que parece y en La Red Zoocial le contamos cómo solucionarla.
Según Tania Carolina Hoyos Fang, médica veterinaria, los gatos son animales muy inteligentes, amorosos, cariñosos, activos, pero también “son muy cambiantes”. Puede que un día deseen estar al lado de su cuidador y al otro decidan ignorarlo por completo. Y eso está bien, pues cada mascota es un universo diferente.
De hecho, a diferencia de los perros, los gatos suelen ser más reservados y poco expresivos, además de que aman tener su propio espacio personal y son muy selectivos al momento de crear un vínculo con un humano u otro animal. Hoyos Fang indica que los felinos tienden a generar los espacios para interactuar, mientras que los caninos lo hacen de forma natural, pues ellos se expresan con mayor facilidad, demuestran su amor a diario y tienen comportamientos que surgen de manera natural al momento de tener contacto con sus dueños.
Pero esto no quiere decir que un gato no pueda querer de la misma manera que un perro, esto es totalmente falso. Los perros y los gatos quieren de la misma manera a sus dueños, así lo demostró un estudio de la Universidad Estatal de Oregon, en Estados Unidos, que encontró que los felinos domésticos forman vínculos con sus dueños humanos, que son muy similares a los vínculos formados por los caninos con sus cuidadores.
A través de pequeños gestos, como un parpadeo lento, el amasado, el ronroneo y hasta dormir a su lado, su minino le demuestra todo ese amor oculto que tiene hacia usted.
¿Qué significa que mi gato ya no quiere dormir conmigo?
Estas son algunas de las razones. Tome nota.
- Cambios en la rutina.
Los gatos son animales de costumbres. Si usted solía irse a dormir a las 10:00 p.m., pero ahora, por cualquier motivo, está haciéndolo más tarde o incluso más temprano, a ellos no les va a gustar esto y van a querer descansar en otro sitio.
En este caso, es recomendable que vuelva adecuar un horario para ir a dormir, así su gatito se irá acostumbrando de nuevo y, en menos de lo esperado, volverá a dormir con usted.
- Cambió su olor.
Para nadie es un secreto el gran olfato de los gatos. Si en su trabajo hay otro minino o si acarició algún animal antes de llegar a casa, puede que su gato lo rechace, pues no se siente a gusto con su nuevo olor.
Y no solo aplica para animales, puede que usted esté usando una nueva fragancia o un nuevo jabón para la ropa o sabanas que no es del agrado del felino.
- Estrés.
Puede que su gatito esté estresado por algún evento que sucedió durante el transcurso del día o con alguna persona en el hogar. Por eso, tenderá a resguardarse en un lugar que le brinde confianza y seguridad.
- Cambios climáticos.
Sí, aunque suene raro, esto también puede ser un factor determinante para que su gatito deje de dormir con usted. Si está haciendo mucho calor, lo más probable es que el animal esté en un lugar que le brinde más comodidad, como un mueble, un estante y hasta en el mismo piso.
- No le gusta.
Quizá su gato ya no se acuesta al lado suyo porque no se siente cómodo haciendo esto. Es muy normal que suceda, pues hasta las personas se cansan de hacer siempre lo mismo. Recuerde que su mascota, aunque ya no duerman juntos, le demostrará de otras formas todo ese amor que tiene hacia usted.
- No se siente cómodo con su presencia.
En este punto, es importante que se pregunte qué hizo mal para que su gato se sienta incómodo con su presencia. Como siempre lo hemos dicho, los felinos (al igual que cualquier otro animal) no responden bien a la violencia y el miedo puede hacer que se sientan inseguros y estresados. Al educar a su gato a los golpes o gritos, solo conseguirá que él le tenga miedo, le muestre rechazo, se defienda e, incluso, que desarrolle problemas de conducta. Busque otras maneras de entrenarlo, puede pedir la ayuda de un experto en el tema como: un veterinario, un etólogo o un entrenador.
- Tiene dolor o está enfermo.
Preste atención a los comportamientos en su gatito, en muchas ocasiones, puede tratarse de un problema de salud. Y los gatos son maestros en ocultar su dolor, por ende, no sería raro que, con tal de evitar cualquier tipo de contacto que pueda agravar su malestar, el peludo se vaya a otro lugar donde se sienta más tranquilo y seguro.
¿Qué motiva a un gato a dormir con su dueño?
Esto es algo muy relativo y siempre dependerá de cómo el cuidador acostumbró al animal. Por ejemplo, si dejó que su gatito durmiera a su lado, es muy probable que al crecer lo siga haciendo, mientras que, si nunca lo dejó dormir con usted, sino en la cama de él mismo, será muy raro que él desee compartir ese espacio. Recuerde: no hay mayor muestra de confianza que dormir con alguien más.
“Los gatos siempre buscan a la persona que más quieren y con quien más sienten conexión, bien sea por protección, amor o apego”, dice la experta en animales.
¿Es bueno que mi gato duerma conmigo?
Para Hoyos Fang, no hay ningún problema, siempre y cuando este acto no afecte la salud del tutor ni del animal. La veterinaria recomienda que el felino esté desparasitado, con las vacunas al día y que, claramente, no sea un gatito que salga a la calle, pues al hacerlo, podría contraer algún virus en el exterior y esto podría perjudicar tanto la salud de él como la suya. Otro factor para tener en cuenta es que el cuidador no tenga ninguna alergia.
“Dormir con un gato creo que es lo más maravilloso que puede existir, siempre y cuando el gato esté desparasitado, tenga una buena salud y esté limpio”, finaliza por decir la experta en animales.
Si usted está leyendo esto, muy probablemente se esté preguntando qué hizo “mal” para que su gato dejara de dormir al lado suyo en las noches. Por eso, lo primero que debe saber es que no hizo nada malo (y que su gatito tampoco lo odia), esta situación es más común de lo que parece y en La Red Zoocial le contamos cómo solucionarla.
Según Tania Carolina Hoyos Fang, médica veterinaria, los gatos son animales muy inteligentes, amorosos, cariñosos, activos, pero también “son muy cambiantes”. Puede que un día deseen estar al lado de su cuidador y al otro decidan ignorarlo por completo. Y eso está bien, pues cada mascota es un universo diferente.
De hecho, a diferencia de los perros, los gatos suelen ser más reservados y poco expresivos, además de que aman tener su propio espacio personal y son muy selectivos al momento de crear un vínculo con un humano u otro animal. Hoyos Fang indica que los felinos tienden a generar los espacios para interactuar, mientras que los caninos lo hacen de forma natural, pues ellos se expresan con mayor facilidad, demuestran su amor a diario y tienen comportamientos que surgen de manera natural al momento de tener contacto con sus dueños.
Pero esto no quiere decir que un gato no pueda querer de la misma manera que un perro, esto es totalmente falso. Los perros y los gatos quieren de la misma manera a sus dueños, así lo demostró un estudio de la Universidad Estatal de Oregon, en Estados Unidos, que encontró que los felinos domésticos forman vínculos con sus dueños humanos, que son muy similares a los vínculos formados por los caninos con sus cuidadores.
A través de pequeños gestos, como un parpadeo lento, el amasado, el ronroneo y hasta dormir a su lado, su minino le demuestra todo ese amor oculto que tiene hacia usted.
¿Qué significa que mi gato ya no quiere dormir conmigo?
Estas son algunas de las razones. Tome nota.
- Cambios en la rutina.
Los gatos son animales de costumbres. Si usted solía irse a dormir a las 10:00 p.m., pero ahora, por cualquier motivo, está haciéndolo más tarde o incluso más temprano, a ellos no les va a gustar esto y van a querer descansar en otro sitio.
En este caso, es recomendable que vuelva adecuar un horario para ir a dormir, así su gatito se irá acostumbrando de nuevo y, en menos de lo esperado, volverá a dormir con usted.
- Cambió su olor.
Para nadie es un secreto el gran olfato de los gatos. Si en su trabajo hay otro minino o si acarició algún animal antes de llegar a casa, puede que su gato lo rechace, pues no se siente a gusto con su nuevo olor.
Y no solo aplica para animales, puede que usted esté usando una nueva fragancia o un nuevo jabón para la ropa o sabanas que no es del agrado del felino.
- Estrés.
Puede que su gatito esté estresado por algún evento que sucedió durante el transcurso del día o con alguna persona en el hogar. Por eso, tenderá a resguardarse en un lugar que le brinde confianza y seguridad.
- Cambios climáticos.
Sí, aunque suene raro, esto también puede ser un factor determinante para que su gatito deje de dormir con usted. Si está haciendo mucho calor, lo más probable es que el animal esté en un lugar que le brinde más comodidad, como un mueble, un estante y hasta en el mismo piso.
- No le gusta.
Quizá su gato ya no se acuesta al lado suyo porque no se siente cómodo haciendo esto. Es muy normal que suceda, pues hasta las personas se cansan de hacer siempre lo mismo. Recuerde que su mascota, aunque ya no duerman juntos, le demostrará de otras formas todo ese amor que tiene hacia usted.
- No se siente cómodo con su presencia.
En este punto, es importante que se pregunte qué hizo mal para que su gato se sienta incómodo con su presencia. Como siempre lo hemos dicho, los felinos (al igual que cualquier otro animal) no responden bien a la violencia y el miedo puede hacer que se sientan inseguros y estresados. Al educar a su gato a los golpes o gritos, solo conseguirá que él le tenga miedo, le muestre rechazo, se defienda e, incluso, que desarrolle problemas de conducta. Busque otras maneras de entrenarlo, puede pedir la ayuda de un experto en el tema como: un veterinario, un etólogo o un entrenador.
- Tiene dolor o está enfermo.
Preste atención a los comportamientos en su gatito, en muchas ocasiones, puede tratarse de un problema de salud. Y los gatos son maestros en ocultar su dolor, por ende, no sería raro que, con tal de evitar cualquier tipo de contacto que pueda agravar su malestar, el peludo se vaya a otro lugar donde se sienta más tranquilo y seguro.
¿Qué motiva a un gato a dormir con su dueño?
Esto es algo muy relativo y siempre dependerá de cómo el cuidador acostumbró al animal. Por ejemplo, si dejó que su gatito durmiera a su lado, es muy probable que al crecer lo siga haciendo, mientras que, si nunca lo dejó dormir con usted, sino en la cama de él mismo, será muy raro que él desee compartir ese espacio. Recuerde: no hay mayor muestra de confianza que dormir con alguien más.
“Los gatos siempre buscan a la persona que más quieren y con quien más sienten conexión, bien sea por protección, amor o apego”, dice la experta en animales.
¿Es bueno que mi gato duerma conmigo?
Para Hoyos Fang, no hay ningún problema, siempre y cuando este acto no afecte la salud del tutor ni del animal. La veterinaria recomienda que el felino esté desparasitado, con las vacunas al día y que, claramente, no sea un gatito que salga a la calle, pues al hacerlo, podría contraer algún virus en el exterior y esto podría perjudicar tanto la salud de él como la suya. Otro factor para tener en cuenta es que el cuidador no tenga ninguna alergia.
“Dormir con un gato creo que es lo más maravilloso que puede existir, siempre y cuando el gato esté desparasitado, tenga una buena salud y esté limpio”, finaliza por decir la experta en animales.