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Los gatos blancos son conocidos por su hermoso pelaje, su personalidad afectuosa y su vínculo con la pureza, la limpieza y la inocencia. Estos individuos, al igual que el resto de los mininos, son inteligentes, juguetones y cariñosos. Aunque existe la creencia de que todos los felinos blancos son sordos, esto no es cierto. Sin embargo, los que tienen este color de pelo y además poseen ojos azules, sí tienen una mayor probabilidad de serlo.
Estos animales suelen llevarse bien con casi todo el mundo. La calma y la paciencia son cualidades que valoran mucho. Ellos se sienten más cómodos en entornos tranquilos y con personas que respeten su necesidad de espacio. Aunque son seres amorosos que pueden llegar a amar a casi cualquier persona, hay ciertos comportamientos de los humanos que no les gusta mucho.
Existen estudios qué explican por qué los gatos aceptan a unas personas y rechazan a otras. Según cuenta John Bradshaw, destacado experto en comportamiento felino y autor del libro “En la mente de un gato”, esta conducta está directamente relacionada con el contacto inicial o temporal que ocurre entre el felino y una persona específica. Por ello, factores como el género, la edad y las experiencias pasadas también influyen.
Bradshaw indica que los gatos tienden a mostrar desconfianza hacia personas desconocidas, debido a su naturaleza independiente. Son animales que saben cuándo, dónde y a quién otorgar afecto. En muchos casos, ese rechazo puede deberse a alguna dolencia momentánea del felino, a situaciones de estrés, a la falta de familiaridad con la persona o simplemente al deseo de mantener la distancia y no establecer conexión con ese momento específico.
A continuación le contamos qué tipo de personas alejan a los gatos blancos.
Personas agresivas
Los gatos blancos, al igual que los demás tipos de mininos, no responden bien a las conductas violentas de las personas. El miedo puede hacer que se sientan inseguros y estresados. Por lo general, los dueños que corrigen a sus mascotas con actos agresivos solo consiguen que este les tenga temor y les muestre un rechazo profundo.
Personas ruidosas
Como explicamos anteriormente, los gatos blancos valoran mucho la calma y la tranquilidad. Ellos prefieren permanecer en espacios donde predomine el silencio y la paz. Además, sus oídos son más potentes y sensibles que el de los humanos, por eso, los ruidos fuertes pueden generarles miedo, ansiedad y estrés. No es de extrañar que se alejen y eviten a las personas ruidosas.
Personas que invaden su espacio personal
Los gatos blancos, al igual que el resto de felinos, pueden ser muy celosos con su propio espacio. No les gusta sentirse invadidos, acorralados o amenazados. Incluso, algunos mininos pueden mostrarse agresivos cuando otro animal u persona entra en sus dominios.
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