Los gatos, así como las personas, tienen preferencias al momento de mantener relaciones sociales. De hecho, diferentes estudios de etología felina sugieren que estos animales suelen elegir a un miembro del núcleo familiar como su persona favorita.
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De igual forma, los mininos pueden llegar a mostrar cierta aversión y antipatía hacia algunas personas debido a problemas en la etapa de socialización, experiencias negativas y/o traumas. Si la socialización ha sido deficiente o nula, es probable que el felino desarrolle miedo o ansiedad.
Sin embargo, es importante aclarar que estas actitudes no significan que su gato no lo quiera, sino que existen algunos problemas en su relación o en su estado de salud que deben corregirse para que muestre un comportamiento más positivo con usted y con otras personas.
De acuerdo con el portal Experto Animal, estas son algunas señales que demuestran que usted no es la persona favorita de su gato.
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Su gato se esconde cuando lo ve
Si su gato se esconde en el sofá, el armario o debajo de las mesas cuando lo ve, puede ser porque no está del todo contento con usted. Si además observa una postura corporal encorvada, cola baja, orejas caídas hacia atrás y pupilas muy dilatadas, es probable que su gato le tenga temor. Según los veterinarios, el estado continuado de miedo puede provocar estrés y ansiedad, por lo que es importante solucionar este problema lo más pronto posible.
Su gato lo evita
Es frecuente que los miembros de la familia evidencien que su gato ya no los quiere como antes, pues ya no hace algunas rutinas con ellos, como dormir o ser cariñoso. También es probable que el felino evite mirar directamente a los ojos de las personas o dejarse agarrar.
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La falta de vínculo puede producirse por muchos motivos, pero generalmente está provocada por un manejo erróneo por parte del cuidador. No comprender el lenguaje de los gatos, forzarle a hacer algo que no desea o el castigo continuo son algunos de los ejemplos que pueden provocar este problema.
Su gato le gruñe
Los bufidos, gruñidos y silbidos forman parte del lenguaje de los gatos y suelen indicar malestar y desagrado. Es muy probable que su felino los manifieste cuando lo regaña, lo molesta o cuando realiza algo que no le gusta.
Además, los felinos realizan movimientos rápidos de cola, que van de un lado a otro, para mostrar su irritación o enojo. En estos casos lo recomendable es que dedique más tiempo al minino para que pueda comprender mejor aquello que le gusta y lo que no.
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Su gato lo ataca
Si su gato lo ataca, mediante mordiscos o arañazos, es probable que tenga algún problema de conducta. Además del ataque en sí, es posible observar que el gato muestra las pupilas dilatadas, el manto completamente erizado y las orejas totalmente hacia atrás.
La agresividad en los gatos es un problema que no debe ignorarse, esta puede ser producida por altos niveles de estrés, ansiedad y hasta una enfermedad. La visita a un veterinario especializado en etología es imprescindible en estos casos.
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