“Me estaba muriendo”: colombiana cuenta cómo sobrevivió al ataque de sus perros
María Paula Peña Contreras narró, en entrevista con NTN24, que los dos caninos de raza American Bully XL actuaron defensivamente luego de que ella intentara jugar a las escondidas con uno de ellos.
Ya pasaron tres semanas desde que se conoció el caso de María Paula Peña Contreras, una colombiana residente en Estados Unidos que fue atacada por sus dos perros American Bully XL. Desde entonces su estado de salud ha presentado un gran avance, pese a que sigue internada en el hospital John Muir Health, y ya pudo reencontrarse con sus padres, Enio Peña y Paula Contreras.
En entrevista con el programa La Mañana de NTN24, María Paula Peña Contreras revivió los momentos previos al ataque por parte de sus perros.
Según la joven, salió a tirar la basura y vio que su perro Ragnar, el macho de la pareja de perros de raza American Bully XL, la siguió. Ella, en búsqueda de juego con su mascota, se escondió en una esquina observando a su perro y luego trató de sorprenderlo agarrando su pata, a lo que el perro reaccionó defensivamente por la sorpresa. “Él se asustó o creyó que yo lo estaba atacando, yo lo pude ver en su mirada, entonces él me saltó”, dijo la joven en entrevista con NTN24.
En ese momento, Ohana, su otra mascota de la misma raza, se acercó para defender a su compañero canino, pensando que María Paula lo estaba atacando y de inmediato la perra se abalanza sobre la joven, haciéndola caer. “Yo siento que ella pensó que yo la estaba atacando y ahí es cuando ella se me engancha”, cuenta la joven desde el hospital. “Es el instinto animal de ellos porque eran muy unidos”.
El otro perro, igualmente, la ataca y la muerde del otro brazo. En ese momento, María Paula recibió fuertes mordidas en sus brazos, piernas, glúteos y espalda y empezaba a presentar problemas para respirar. En medio del ataque, la perra se engancha a su seno y ahí es cuando la joven empieza a perder su respiración.
“Mi perrita me coge del seno y ahí es cuando yo me tiró al piso (...) ahí es cuando yo dije que yo ya no puedo más y empiezo a gritar a los vecinos a pedir ayuda”, contó a NTN24.
Los vecinos alcanzan a escuchar los gritos de María Paula y se acercan a su casa a tratar de ayudarla: empiezan a hacer ruido para distraer a los animales, pero los perros se van hacia ellos. Lamentablemente, en ese momento la joven ya había perdido todas sus fuerzas y no podía ponerse de pie, por lo que opta por pedir ayuda a la policía.
En pocos minutos, la policía llega a la vivienda, pero no puede entrar, por lo que María Paula tiene que intentar arrastrarse con sus manos hasta donde se encuentran los funcionarios. En medio de esto, su perrita Ohana llega nuevamente a donde la joven y esta vez la toma del cuello, situación que dejó totalmente indefensa a María Paula.
“En ese momento Ohana viene y se acerca a mi cuello, yo sentí que yo ya me estaba era muriendo (...) yo le digo a la policía que disparen por favor”.
A la orden de la joven, la policía decide dispararles a los dos perros American Bully XL para abatirlos y frenar su ataque: la hembra recibió tres disparos y el otro perro, que ya estaba más calmado, tratando de proteger a su dueña, recibe dos disparos. Esto lo cuenta María Paula en medio de lágrimas, recordando el momento.
Finalmente, la joven es llevada al hospital donde se encuentra hoy recibiendo atención médica y esperando su pronta recuperación junto a sus padres. En cuanto a sus mascotas, NTN24 le preguntó si estaba pensando en tener más perros, a lo que ella respondió: “Por el momento no quiero tener perros, quiero recuperarme y estar estable. Tal vez en unos años”.
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Ya pasaron tres semanas desde que se conoció el caso de María Paula Peña Contreras, una colombiana residente en Estados Unidos que fue atacada por sus dos perros American Bully XL. Desde entonces su estado de salud ha presentado un gran avance, pese a que sigue internada en el hospital John Muir Health, y ya pudo reencontrarse con sus padres, Enio Peña y Paula Contreras.
En entrevista con el programa La Mañana de NTN24, María Paula Peña Contreras revivió los momentos previos al ataque por parte de sus perros.
Según la joven, salió a tirar la basura y vio que su perro Ragnar, el macho de la pareja de perros de raza American Bully XL, la siguió. Ella, en búsqueda de juego con su mascota, se escondió en una esquina observando a su perro y luego trató de sorprenderlo agarrando su pata, a lo que el perro reaccionó defensivamente por la sorpresa. “Él se asustó o creyó que yo lo estaba atacando, yo lo pude ver en su mirada, entonces él me saltó”, dijo la joven en entrevista con NTN24.
En ese momento, Ohana, su otra mascota de la misma raza, se acercó para defender a su compañero canino, pensando que María Paula lo estaba atacando y de inmediato la perra se abalanza sobre la joven, haciéndola caer. “Yo siento que ella pensó que yo la estaba atacando y ahí es cuando ella se me engancha”, cuenta la joven desde el hospital. “Es el instinto animal de ellos porque eran muy unidos”.
El otro perro, igualmente, la ataca y la muerde del otro brazo. En ese momento, María Paula recibió fuertes mordidas en sus brazos, piernas, glúteos y espalda y empezaba a presentar problemas para respirar. En medio del ataque, la perra se engancha a su seno y ahí es cuando la joven empieza a perder su respiración.
“Mi perrita me coge del seno y ahí es cuando yo me tiró al piso (...) ahí es cuando yo dije que yo ya no puedo más y empiezo a gritar a los vecinos a pedir ayuda”, contó a NTN24.
Los vecinos alcanzan a escuchar los gritos de María Paula y se acercan a su casa a tratar de ayudarla: empiezan a hacer ruido para distraer a los animales, pero los perros se van hacia ellos. Lamentablemente, en ese momento la joven ya había perdido todas sus fuerzas y no podía ponerse de pie, por lo que opta por pedir ayuda a la policía.
En pocos minutos, la policía llega a la vivienda, pero no puede entrar, por lo que María Paula tiene que intentar arrastrarse con sus manos hasta donde se encuentran los funcionarios. En medio de esto, su perrita Ohana llega nuevamente a donde la joven y esta vez la toma del cuello, situación que dejó totalmente indefensa a María Paula.
“En ese momento Ohana viene y se acerca a mi cuello, yo sentí que yo ya me estaba era muriendo (...) yo le digo a la policía que disparen por favor”.
A la orden de la joven, la policía decide dispararles a los dos perros American Bully XL para abatirlos y frenar su ataque: la hembra recibió tres disparos y el otro perro, que ya estaba más calmado, tratando de proteger a su dueña, recibe dos disparos. Esto lo cuenta María Paula en medio de lágrimas, recordando el momento.
Finalmente, la joven es llevada al hospital donde se encuentra hoy recibiendo atención médica y esperando su pronta recuperación junto a sus padres. En cuanto a sus mascotas, NTN24 le preguntó si estaba pensando en tener más perros, a lo que ella respondió: “Por el momento no quiero tener perros, quiero recuperarme y estar estable. Tal vez en unos años”.
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