Carramán, el perro que logró unir a toda una comunidad en Teusaquillo
El pasado 29 de enero, en el Park Way, le dieron el último adiós a Chepe, un habitante de calle, su perro, Carramán, quedó solo y desorientado tras la partida de su mejor amigo. Habitantes del sector se unieron para ayudarlo y buscan brindarle una mejor calidad de vida.
Angie Valentina Suárez Moreno
Marcela González vive desde hace dos años en la localidad de Teusaquillo, siempre tuvo miedo al salir a la calle pues los casos de acoso y violencia constante que se reportan a diario en contra de las mujeres no son menores. Le tenía cierto tipo de “miedo” a los habitantes de calle, hasta que apareció Chepe en su vida, un curioso personaje que, junto con su perro Carramán, vivía en los alrededores del Park Way y, de acuerdo con González, le permitió conocer, desde otra perspectiva, la realidad de estas personas en las calles.
El pasado 29 de enero, mientras iba para su casa, encontró acordonada una zona, al parecer, se trataba de alguien que había muerto en el lugar. Para su sorpresa, cuando se asomó, un hombre estaba sosteniendo con una mano, un tarro similar a los que contienen pegante y con la otra señalaba a un perro que no se movía de su lado, ni siquiera, al darse cuenta de que no respiraba.
Inmediatamente Marcela se dio cuenta de que se trataba de Carramán, el perro de Chepe, “para mi fue muy duro encontrarlo ahí, él era parte de nuestra comunidad, era muy buena persona y siempre me acompañaba, si yo le daba un pan a Chepe, el le daba la mitad a su perro”, comentó a La Red Zoocial.
Lea: Servicios no veterinarios para mascotas, una regulación pendiente
Marcela y otros habitantes se percataron de que sería muy duro para el animal comprender el hecho de que su mejor amigo se había ido para siempre y comenzaron a actuar. Ella, junto con Claudia, Carmen y Alejandra decidieron propender por mejorar la calidad de vida del canino.
Claudia vio por última vez a Chepe luego de volver de una paca ambiental, un proceso comunitario que nació en el marco del paro nacional. “Yo vi al perrito enfermo y me di cuenta de que era Carramán. Lo primero que le dije a Chepe, quien estaba en aparente estado de embriaguez, fue que cuándo íbamos a llevar al perro al veterinario y él me respondió que pronto” explicó. Pero eso nunca sucedió, ese mismo día, falleció.
Alejandra y Carmen se enteraron de lo que había sucedido a través de un grupo de WhatsApp. Sintieron mucha tristeza por Chepe, pero también por Carramán, pues no sabían cuál sería su suerte después de que todo pasara. “En ese momento dejé todo, empaqué comida blanda y me encontré a Carramán con un chico, otro habitante de calle” dijo Carmen, quien alimentaba al perro frecuentemente.
Luego de una solemne ceremonia para despedir a Chepe, Alejandra puso un trino para dar a conocer el caso en la localidad y tuvo más repercusión de la que se imaginaban. “La gente comenzó a escribir que conocían al perro y que se pondrían en contacto, fue muy bonito” comentó.
Le puede interesar: Perro rompe el Récord Guinness y se convierte en el más viejo de la historia
Pero Carramán no sería un perro fácil, varias veces escapó hacia el parque Santa Marta, al parecer, buscando a su humano. Fue cuidado por Fernando, un amigo de Chepe y por una pareja de habitantes de calle, Sara y Jhon, hasta que los vecinos se dieron cuenta de que debían llevarlo al veterinario para que lo revisaran.
Y aunque fue difícil llevarlo, lo lograron. “Él iba y volvía, era demasiado evidente que daba vueltas y vueltas por ese sector y pasaba en la calle 45, yo tenía miedo de que lo cogiera un carro, pero logramos retenerlo con la ayuda de otros vecinos” recordó Alejandra. Luego lograron llevarlo a una guardería donde comparte con otros animales y es atendido por todos los vecinos.
Vea las tiernas imágenes: Las imágenes ganadoras del Concurso Internacional de Fotografía de Perros 2022
Así puede ayudar a Carramán
Aunque el perro cuenta con el apoyo de los habitantes de la localidad, ellos quieren que esta ayuda sea frecuente, pues, por el momento, no quieren darlo en adopción porque consideran que es un perro feliz donde se encuentra. “Él está en una guardería cercana, no queremos que se vaya del barrio, eso fue lo que acordamos y todos nos comprometimos a llevarle comida” comentó Marcela.
Sin embargo, aún deben hacerle algunos exámenes, pagar la guardería y darle comida especial y para ello necesitan dinero. “Lo que pedimos son donaciones o que nos brinden servicios veterinarios para poder iniciar un tratamiento” comentan las mujeres, quienes lograron recoger algunos fondos en esta semana pero decidieron ayudar a Carramancita, una pitbull que llegó al sector desnutrida y con crías, quien actualmente se encuentra bajo cuidado de otra habitante del sector.
“Queremos seguir siendo parte de la historia de Carramán y poder ayudar a otros animales que lleguen porque todo lo que estamos haciendo lo sacamos de nuestros recursos y de nuestro corazón a través de un tejido comunitario”, concluyeron.
Le puede interesar: Condenan a comerciante de animales en Bogotá por maltrato animal
Dignificar a los habitantes de calle
De acuerdo con cifras del Ministerio de Salud, actualmente hay por lo menos 34.000 habitantes ciudadanos colombianos que viven en la calle, sin contar a los migrantes que viven en condiciones similares. El 87% de ellos son hombres y el mayor grupo poblacional está entre los 25 y 40 años de edad.
Por esta razón, estas mujeres piden que se dignifique la habitabilidad de calle porque a veces se observa un abandono total y solo queda la comunidad para ayudarlos. “Chepe era un habitante de calle de El Cartucho, de donde fue desplazado sin pensar en su historia, varios amigos de él nos dijeron que les daba miedo que les pasara lo mismo, por eso hicimos este tejido comunitario para actuar en conjunto” comentó Claudia.
Ellas explican que estas personas habitan las calles de otra forma y que, una alternativa para que ellos se sientan parte de la comunidad es que se conviertan en guardianes ambientales de la localidad, cuidando el Río Arzobispo, por ejemplo. Mientras tanto, la comunidad se reunirá el próximo domingo 5 de febrero para conmemorar una semana de la muerte de una persona que les enseñó a unirse alrededor del cuidado de un animal.
*Si usted quiere apoyar económicamente con esta iniciativa puede comunicarse con Marcela Gonzalez al 310 6188472.
🐾 ¿Quiere estar al día y conocer las últimas noticias sobre el mundo animal? Lo invitamos a verlas en La Red Zoocial. 🐶🐱 Además, si tiene alguna historia o está interesado en contar la suya con su mascota, puede escribirnos a laredzoocial@elespectador.com
Marcela González vive desde hace dos años en la localidad de Teusaquillo, siempre tuvo miedo al salir a la calle pues los casos de acoso y violencia constante que se reportan a diario en contra de las mujeres no son menores. Le tenía cierto tipo de “miedo” a los habitantes de calle, hasta que apareció Chepe en su vida, un curioso personaje que, junto con su perro Carramán, vivía en los alrededores del Park Way y, de acuerdo con González, le permitió conocer, desde otra perspectiva, la realidad de estas personas en las calles.
El pasado 29 de enero, mientras iba para su casa, encontró acordonada una zona, al parecer, se trataba de alguien que había muerto en el lugar. Para su sorpresa, cuando se asomó, un hombre estaba sosteniendo con una mano, un tarro similar a los que contienen pegante y con la otra señalaba a un perro que no se movía de su lado, ni siquiera, al darse cuenta de que no respiraba.
Inmediatamente Marcela se dio cuenta de que se trataba de Carramán, el perro de Chepe, “para mi fue muy duro encontrarlo ahí, él era parte de nuestra comunidad, era muy buena persona y siempre me acompañaba, si yo le daba un pan a Chepe, el le daba la mitad a su perro”, comentó a La Red Zoocial.
Lea: Servicios no veterinarios para mascotas, una regulación pendiente
Marcela y otros habitantes se percataron de que sería muy duro para el animal comprender el hecho de que su mejor amigo se había ido para siempre y comenzaron a actuar. Ella, junto con Claudia, Carmen y Alejandra decidieron propender por mejorar la calidad de vida del canino.
Claudia vio por última vez a Chepe luego de volver de una paca ambiental, un proceso comunitario que nació en el marco del paro nacional. “Yo vi al perrito enfermo y me di cuenta de que era Carramán. Lo primero que le dije a Chepe, quien estaba en aparente estado de embriaguez, fue que cuándo íbamos a llevar al perro al veterinario y él me respondió que pronto” explicó. Pero eso nunca sucedió, ese mismo día, falleció.
Alejandra y Carmen se enteraron de lo que había sucedido a través de un grupo de WhatsApp. Sintieron mucha tristeza por Chepe, pero también por Carramán, pues no sabían cuál sería su suerte después de que todo pasara. “En ese momento dejé todo, empaqué comida blanda y me encontré a Carramán con un chico, otro habitante de calle” dijo Carmen, quien alimentaba al perro frecuentemente.
Luego de una solemne ceremonia para despedir a Chepe, Alejandra puso un trino para dar a conocer el caso en la localidad y tuvo más repercusión de la que se imaginaban. “La gente comenzó a escribir que conocían al perro y que se pondrían en contacto, fue muy bonito” comentó.
Le puede interesar: Perro rompe el Récord Guinness y se convierte en el más viejo de la historia
Pero Carramán no sería un perro fácil, varias veces escapó hacia el parque Santa Marta, al parecer, buscando a su humano. Fue cuidado por Fernando, un amigo de Chepe y por una pareja de habitantes de calle, Sara y Jhon, hasta que los vecinos se dieron cuenta de que debían llevarlo al veterinario para que lo revisaran.
Y aunque fue difícil llevarlo, lo lograron. “Él iba y volvía, era demasiado evidente que daba vueltas y vueltas por ese sector y pasaba en la calle 45, yo tenía miedo de que lo cogiera un carro, pero logramos retenerlo con la ayuda de otros vecinos” recordó Alejandra. Luego lograron llevarlo a una guardería donde comparte con otros animales y es atendido por todos los vecinos.
Vea las tiernas imágenes: Las imágenes ganadoras del Concurso Internacional de Fotografía de Perros 2022
Así puede ayudar a Carramán
Aunque el perro cuenta con el apoyo de los habitantes de la localidad, ellos quieren que esta ayuda sea frecuente, pues, por el momento, no quieren darlo en adopción porque consideran que es un perro feliz donde se encuentra. “Él está en una guardería cercana, no queremos que se vaya del barrio, eso fue lo que acordamos y todos nos comprometimos a llevarle comida” comentó Marcela.
Sin embargo, aún deben hacerle algunos exámenes, pagar la guardería y darle comida especial y para ello necesitan dinero. “Lo que pedimos son donaciones o que nos brinden servicios veterinarios para poder iniciar un tratamiento” comentan las mujeres, quienes lograron recoger algunos fondos en esta semana pero decidieron ayudar a Carramancita, una pitbull que llegó al sector desnutrida y con crías, quien actualmente se encuentra bajo cuidado de otra habitante del sector.
“Queremos seguir siendo parte de la historia de Carramán y poder ayudar a otros animales que lleguen porque todo lo que estamos haciendo lo sacamos de nuestros recursos y de nuestro corazón a través de un tejido comunitario”, concluyeron.
Le puede interesar: Condenan a comerciante de animales en Bogotá por maltrato animal
Dignificar a los habitantes de calle
De acuerdo con cifras del Ministerio de Salud, actualmente hay por lo menos 34.000 habitantes ciudadanos colombianos que viven en la calle, sin contar a los migrantes que viven en condiciones similares. El 87% de ellos son hombres y el mayor grupo poblacional está entre los 25 y 40 años de edad.
Por esta razón, estas mujeres piden que se dignifique la habitabilidad de calle porque a veces se observa un abandono total y solo queda la comunidad para ayudarlos. “Chepe era un habitante de calle de El Cartucho, de donde fue desplazado sin pensar en su historia, varios amigos de él nos dijeron que les daba miedo que les pasara lo mismo, por eso hicimos este tejido comunitario para actuar en conjunto” comentó Claudia.
Ellas explican que estas personas habitan las calles de otra forma y que, una alternativa para que ellos se sientan parte de la comunidad es que se conviertan en guardianes ambientales de la localidad, cuidando el Río Arzobispo, por ejemplo. Mientras tanto, la comunidad se reunirá el próximo domingo 5 de febrero para conmemorar una semana de la muerte de una persona que les enseñó a unirse alrededor del cuidado de un animal.
*Si usted quiere apoyar económicamente con esta iniciativa puede comunicarse con Marcela Gonzalez al 310 6188472.
🐾 ¿Quiere estar al día y conocer las últimas noticias sobre el mundo animal? Lo invitamos a verlas en La Red Zoocial. 🐶🐱 Además, si tiene alguna historia o está interesado en contar la suya con su mascota, puede escribirnos a laredzoocial@elespectador.com