Un video, de una cámara de seguridad, captó a un hombre, presuntamente, agrediendo a un perro que se encontraba fuera de un supermercado en el barrio Alarcón, de Bucaramanga. Pronto, el clip se viralizó en redes sociales, además, porque el hombre habría actuado de una forma violenta, tras tener un altercado con la dueña del animal.
Tras esto, el hombre, que fue identificado, pidió disculpas públicas, reconoció su error y se mostró dispuesto a colaborar con las autoridades. No obstante, las consecuencias de sus actos no han parado.
“El 13 de agosto, cuando terminé mi jornada laboral, me llamaron para notificarme sobre mi despido. En la misma carta señalaban que era sin justa causa. Ayer en audiencia me impusieron una multa por cinco salarios mínimos. La verdad, estoy bastante afectado y también preocupado por las amenazas que aún continúan por redes sociales. Ahora va a ser complejo conseguir nuevamente empleo por la forma en la que han explotado mi imagen”, dijo quien, al parecer, maltrató al canino, según Caracol Radio.
El hombre manifestó que el golpe mediático pudo desencadenar el despido sin justa causa, ya que ese día no portaba ningún elemento que lo identificara como trabajador de la empresa a la que pertenecía, ni estaba en el horario en que le correspondía realizar sus funciones.
“De momento sí les digo que hay una afectación muy grave a mi derecho al trabajo y al buen nombre. Destruyeron totalmente, como le digo, mi vida personal, mi imagen, una carrera de más de 20 años de trabajo, mi carrera profesional. No me estoy justificando, pero créame que esta situación ha sido muy difícil, no se lo deseo a nadie”, concluyó el sujeto.
Aunque hubo rumores de que el presunto responsable de los hechos contaba con anotaciones judiciales, él aclaró que no tiene ningún antecedente ni con la ley ni con la empresa donde trabajaba.
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